SINOPSIS
El film narra la historia de un veterano de guerra, ex militar capitán John Carter (TAYLOR KITSCH), quien inexplicablemente es transportado hasta Marte donde, pese a su reticencia, se verá inmerso en un conflicto de proporciones épicas con los habitantes del planeta, entre los que se encuentran Tars Tarkas (WILLIEM DAFOE) y la cautivante Princesa Dejah Thoris (LYNN COLLINS).
En un mundo al borde del colapso, Carter redescubrirá su humanidad al advertir que la supervivencia de Barsoom y su gente está en sus manos.
Del realizador galardonado con un premio de la Academia® Andrew Stanton, llega JOHN CARTER: ENTRE DOS MUNDOS,una aventura de acción espectacular ambientada en el misterioso y exótico planeta Barsoom (Marte).
JOHN CARTER: ENTRE DOS MUNDOS está basada en una clásica novela de Edgar Rice Burroughs, cuyas imaginativas aventuras sirvieron -y sirven hasta hoy- de inspiración para muchos cineastas.
CRÍTICA |
John Carter ofrece al espectador exactamente lo que va a buscar: una entretenida película épica con mucha acción, excelentes efectos digitales, alienígenas con un buen diseño, romance, buenas coreografías de lucha y un muy buen desenlace.
El espectáculo visual es de primera y es el complemento de una gran historia que parece que no aporta nada nuevo, pero lamentablemente no es así pues la novela original es de 1917, por lo tanto si se hubiera filmado varias décadas atrás el público hubiera caído rendido a sus pies.
Por eso recomiendo que para disfrutarla a pleno la vean ubicándose en el tiempo en que el libro fue escrito y consideren que fue la inspiración de todos los filmes de este estilo, pues sino injustamente van a verla como un simple refrito de, por ejemplo, el Príncipe de Persia y Star Wars.
Los personajes están bien definidos y el guión te engancha desde el comienzo con un ritmo que nunca decae. La animación es justa y medida sin saturar la pantalla.
Una película imperdible para todos los amantes de las aventuras y la ciencia ficción, tengan la edad que tengan.
Cintia Alviti
Lee este artículo para conocer mi estilo en hacer críticas y saber porque no contienen calificación, sinopsis o detalles muy técnicos
Notas:
· Edgar Rice Burroughs nació en Chicago y es reconocido mundialmente como el creador y autor de Tarzán, uno de los personajes más emblemáticos y exitosos de todos los tiempos. JOHN CARTER está inspirada en la primera novela de Burroughs, "A Princess of Mars".
· El director y autor galardonado con un premio de la Academia® Andrew Stanton dirigió y co-escribió el guión de la película WALL•E, que obtuvo un Oscar® y un Globo de Oro a la Mejor Película Animada en 2008. Además recibió una nominación a los premios Oscar al Mejor Guión. Stanton hizo su debut como director en BUSCANDO A NEMO, que le valió una nominación a los premios de la Academia® al Mejor Guión Original y que se alzó con dicho galardón en la categoría Mejor Película Animada en 2003. Fue uno de los cuatro guionistas que recibieron una nominación a la codiciada estatuilla en 1996 por su trabajo en TOY STORY, y luego también colaboró escribiendo otros éxitos de Pixar: BICHOS: UNA AVENTURA EN MINIATURA, TOY STORY 2, MONSTERS, INC.; BUSCANDO A NEMO y WALL•E.
· El laureado equipo de JOHN CARTER incluye al diseñador de producción Nathan Crowley, nominado al Oscar® por Batman: el caballero de la noche y por El gran truco; y a la diseñadora de vestuario Mayes Rubeo, cuyo trabajó brilló en Avatar y Apocalypto.
· Michael Chabon, ganador del premio Pulitzer de Literatura por su novela "The Amazing Adventures of Kavalier and Clay" es coautor del guión.
· El reconocido compositor Michael Giacchino ha recibido numerosos galardones por sus trabajos previos en films de Disney•Pixar, como UP: UNA AVENTURA DE ALTURA (ganadora del Oscar a la Mejor Música Original; BAFTA a la Mejor Música; Globo de Oro a la Mejor Música Original para una Película; Grammy al Mejor Álbum de Música de Película); RATATOUILLE (ganadora del Grammy al Mejor Álbum de Música de Película; Annie a la Mejor Música en un Largometraje Animado; nominada al Oscar® en la categoría Mejor Música Original) y LOS INCREÍBLES (premiada con el Annie a la Mejor Música en un Largometraje Animado; nominada al Grammy en el rubro Mejor Álbum de Música de Película).
JOHN CARTER (TAYLOR KITSCH), quien inexplicablemente es transportado al misterioso y exótico planeta Marte, se ve envuelto en un conflicto de proporciones épicas y descubre que la supervivencia del planeta y sus habitantes está en sus manos.
Del realizador galardonado con un premio de la Academia® Andrew Stanton (BUSCANDO A NEMO, WALL•E), llega JOHN CARTER, una aventura de acción espectacular ambientada en el misterioso y exótico planeta Barsoom (Marte). JOHN CARTER está basada en una clásica novela de Edgar Rice Burroughs, cuyas imaginativas aventuras sirvieron -y sirven hasta hoy- de inspiración para muchos cineastas
FICHA
Género: Acción/aventuras.
Clasificación: Por determinar.
Fecha de estreno: Por determinar.
Reparto: Taylor Kitsch, Lynn Collins, Samantha Morton, Mark Strong, Ciaran Hinds, Dominic West, James Purefoy, Daryl Sabara, Polly Walker, Bryan Cranston, con Thomas Haden Church y Willem Dafoe.
Director: Andrew Stanton.
Productores: Jim Morris, Colin Wilson y Lindsey Collins
Guión: Andrew Stanton, Mark Andrews y Michael Chabon (crédito preliminar).
Basado en la novela
"A Princess of Mars", de: Edgar Rice Burroughs.
EL DIRECTOR ANDREW STANTON, EL REPARTO Y EL EQUIPO DE PRODUCCIÓN
RECREAN EL PLANETA MARTE EN EL SUR DE UTAH
Pocos lugares en el mundo son tan hermosos, extraños y geográficamente únicos como el sur del estado de Utah. Tierra roja esculpida por las aguas del antiguo lago Bonneville 25.000 años atrás, acantilados color arena y gigantescos arcos de piedra coexisten majestuosamente bajo un cielo infinito. Resistentes plantas desérticas como la yuca, el mezquite y el agave salpican el paisaje. Aparte de la belleza física y la singularidad del paisaje, otros elementos menos tangibles también pueblan este mundo desértico: el suave aroma del álcali, el penetrante olor de la salina, el dulce aroma del polen arrastrado por el viento y el acre olor de la artemisia, la ericameria y la creosota.
Todos estos elementos son el motivo por el cual el autor y director galardonado con un premio de la Academia® Andrew Stanton (Buscando a Nemo, Wall•E) escogió rodar los exteriores de su primera película de acción real, la espectacular aventura épica JOHN CARTER: ENTRE DOS MUNDOS , en el estado de Utah. Como gran parte de la película transcurre en el planeta Marte, Stanton sabía que Utah le brindaría las visuales perfectas para recrear el planeta como jamás nadie lo imaginó.
"Una de las cosas más maravillosas de Utah es que, hace 25.000 años, tenía uno de los lagos más grandes del planeta. Pero el lago no era alimentado por arroyos o ríos, sino sólo por el agua de la lluvia; y a causa del terreno, se volvió cada vez más salino", refiere Stanton. "En un momento llegó a ser un verdadero océano muerto, al igual que grandes extensiones de Marte. La topografía de ambos lugares es muy similar, y es bastante sencillo pararte en algunos rincones de este estado y sentir que estás en otro mundo".
"Además hay algo muy romántico y misterioso acerca del desierto. Quería que el mundo natural y el entorno que íbamos descubriendo fueran los que nos dictaran cómo usarlos en la película. Por ejemplo, encontramos estas formaciones rocosas del tamaño de un edificio, o incluso más grandes aún, que con unos ligeros retoques digitales convertimos en ruinas. De esa manera, el público tendrá la sensación de que gran parte de lo que ve en la pantalla es real, pero ese entre 20 y 30% de las imágenes que retocamos digitalmente, le dará a su vez la ilusión de que han sido hechas por el hombre, y acabarán preguntándose: "¿Pero dónde encontraron ese lugar?" Sacamos el máximo provecho de la erosión natural de estas formaciones rocosas para contribuir a que el público sienta que ha transcurrido muchísimo tiempo en Marte cuando la película comienza, rica en historia.
El productor Jim Morris concuerda con que el pasado y el paisaje de Utah fueron una opción perfecta para la historia de JOHN CARTER: ENTRE DOS MUNDOS . "Como la película tiene lugar luego de la Guerra de Secesión, en torno a 1875, la tecnología en Marte era bastante similar a la que se utilizaba aquí en la Tierra. Las tribus de Marte combatían entre sí con espadas y mosquetes de un solo disparo; pero en lo que sí habían logrado un gran avance era en los transportes. En lugar de utilizar barcos a vela y máquinas de vapor, habían hallado la forma de utilizar los haces de luz. De hecho, poseen barcos a vela que son mantenidos a flote y maniobrados por la luz. Esto confiere a la película un aspecto retro, como si uno estuviera viendo una historia alternativa. Es como si esta película fuera una obra de época sobre un tiempo y un lugar que la gente nunca antes había sabido que existían".
"Queríamos que la película tuviera un gran realismo: que la gente sintiera que el mundo que habíamos creado podía existir", continúa Morris. "Deseábamos que estuviera fundada en lo real. Por ejemplo, nuestros personajes tharkianos miden casi tres metros de alto, son verdes y poseen cuatro brazos, pero en lugar de parecer extraños alienígenas, intentamos basarnos en otras culturas del desierto existentes en nuestro mundo, como por ejemplo los guerreros masai, que son muy altos y sumamente delgados. Intentamos que las cosas se mantuvieran más orgánicas".
"El estado de Utah era perfecto para crear ese aspecto y estilo", señala Morris. "De hecho, un día nos topamos con un área de pruebas de experimentos marcianos. Como las condiciones aquí son tan parecidas a las de Marte, un grupo de científicos había construido un lugar para probar equipamiento de aterrizaje en Marte. También rodamos en el lago Powell y hallamos algunos afloramientos rocosos fantásticos. Realmente por momentos parecía que estábamos rodando en otro planeta. Y creo que sin duda será un paisaje provocador y estimulante para la película".
El diseñador de producción Nathan Crowley (Batman inicia) ahonda en los objetivos artísticos y de diseño en juego en la película JOHN CARTER: ENTRE DOS MUNDOS . "La película está ambientada en Marte, que es un planeta sin vida; y es necesario que quede claro que estas ciudades que vemos son antiguas", refiere. "Esta cultura está llegando a su fin. Los Tharks, por ejemplo, que son personajes de esta historia que habitan en Marte, pertenecen a una cultura antigua de hace 2.000 o 3.000 años. Sus construcciones y templos necesitan reflejar esa edad. Es como cuando nosotros descubrimos las ruinas egipcias".
Crowley continúa: "Debimos inventar una arquitectura para el planeta. Yo la he llamado ‛modernismo antiguo' porque he tomado el modernismo y le he añadido 2.000 años de antigüedad. Con "moderno" me refiero a las formas modernas en contraposición a las formas clásicas del diseño romano, griego o egipcio. Espero que hayamos logrado crear un estilo de arquitectura nuevo que la gente no pueda reconocer".
"En Utah, hallamos parajes con formaciones rocosas que, con un ligero retoque, parecen verdaderas ciudades antiguas", declara Crowley. "Los pocos interiores en JOHN CARTER: ENTRE DOS MUNDOS se rodaron en un estudio de sonido. Todas las demás escenas se rodaron aquí, en medio de estos inmensos paisajes".
El supervisor de efectos visuales Peter Chiang también está encantado con el enfoque utilizado en el rodaje de la película, pero por razones diferentes. Para dar mayor realismo a los Tharks, estos fueron interpretados por actores de carne y hueso -Willem Dafoe, Thomas Haden Church, Samantha Morton y Polly Walker- que utilizaron zancos, trajes enterizos grises cubiertos de puntos negros y cascos dotados de cámaras que grababan sus expresiones faciales todo el tiempo. Se utilizó la técnica de captura facial, captada en 3D con cámaras testigo y luego, en el proceso de postproducción, se los alteró digitalmente y se los convirtió en las criaturas verdes de casi tres metros de altura, con grandes colmillos que vemos en la pantalla. Este mismo proceso se utilizó en la películas Avatar y El Planeta de los Simios: Evolución. Permite crear un universo visual impecable que hace al público olvidar por completo que están viendo efectos especiales.
Chiang señala: "Todos los actores se adaptaron perfectamente al aspecto tecnológico del rodaje. Si la tecnología entorpece a los actores, no funciona; pero ellos realmente la adoptaron y comprendieron por qué era necesaria. Intentamos hacer que la tecnología pasara lo más inadvertida posible y Andrew fue fantástico explicando distintas cuestiones como por ejemplo: por qué necesitaba contar con dos cámaras estereoscópicas que apuntaran a los puntos negros en sus rostros o por qué debían usar zancos. Queríamos que los actores pudieran interpretar libremente y hacer lo que mejor saben hacer mientras nosotros nos encargábamos de capturar eso".
Thomas Haden Church concuerda con Chiang que los trajes enterizos, los zancos y las cámaras faciales contribuyeron a dotar de mayor realismo a la película y lo ayudaron a crear a su personaje.
"La posibilidad de llevar zancos se me planteó desde un primer momento, mucho antes de que comenzáramos a rodar", cuenta. "Andrew Stanton me mencionó que él deseaba usarlos, pero que no era más que una de las formas posibles de dotarnos de mayor altura para dar vida a los Tharks. También nos podríamos haber servido de plataformas, pero Willem [Dafoe] y yo también nos inclinamos por los zancos. Me sentía cómodo en ellos y Willem también se encontraba a gusto. Me ayudaron a meterme en la piel de mi personaje, Tal Hajus".
Willem Dafoe acota: "Se abrió una pequeña escuela antes de comenzar el rodaje. Aprendimos a hablar el idioma de los Tharks y a caminar sobre zancos. Esto realmente contribuyó al encuadre de tomas que Andrew necesitaba; y a la forma de moverse de mi personaje. Me ayudó con el ritmo de mi personaje".
Samantha Morton, quien encarna a un miembro de los Tharks llamada Sola se muestra igualmente entusiasmada acerca del rodaje y la técnica fotograma a fotograma (stop motion) que aprendió para dar vida a su personaje. "Nunca antes había trabajado con la técnica de captura de movimiento, pero me gusta pensar que lo que he desarrollado es una nueva habilidad y una nueva técnica. Un nuevo recurso en mi haber, si quieres. Pero no modificó mi forma de interpretar a Sola. En ningún momento pensé que estaba interpretando a una extraterrestre o a una Thark. Yo estaba interpretando a un personaje, y ya sea una asesina, la reina María de Escocia o Sola, mi forma de abordar su interpretación será la misma".
"Es un poquito diferente pues no sólo debía atender lo que necesitaba que hiciera Andrew [Stanton]", concede. "Si no que además debía atender lo que necesitaba Peter [Chiang]. Era una tarea de a tres, y yo debía asegurarme de cumplir con lo que cada uno de ellos necesitaba que hiciera en todo momento".
Los actores que daban vida a los Tharks, debieron aprender la lengua y el acento tharkiano, desarrollado para ellos en base a las novelas de Edgar Rice Burroughs por el Dr. Paul Frommer, un lingüista de la University of Southern California, quien también desarrolló el idioma de la película Avatar. La entrenadora de dialecto Roisin Carty, quien anteriormente había trabajado en la saga El señor de los anillos para desarrollar el idioma élfico, señala: "Tolkien basó su dialecto élfico en el galés, de manera que es muy lírico y suave. El Thark, es bastante entrecortado y simple, con consonantes muy marcadas. Sólo hay cuatro escenas en la película que requerían que los actores hablaran en thark, pero en el campamento Thark, antes de que comenzara el rodaje, los actores estaban realmente motivados a trabajar en grupo y practicar sus parlamentos sentados en círculo. Se copiaban e influenciaban unos a otros e intercambiaban ideas. Además trabajé con ellos en forma individual. Willem Dafoe, quien interpreta a Tras Tarkas, es quien más habla thark y ha aprendido el idioma realmente bien. Repasamos las escenas en tharkiano, yo profería una frase y él interpretaba la otra, y realmente comenzamos a comunicarnos en la lengua. Fue alucinante. Samantha Morton y Polly Walker lograron hacerlo cobrar vida. ¡Es lo que distingue a un buen actor!"
El vestuario también constituye un aspecto importante del estilo de JOHN CARTER: ENTRE DOS MUNDOS y es un reflejo de las desérticas planicies de Marte y Utah. Para crear los trajes de las tribus de Marte, la opción natural para Stanton fue la diseñadora de vestuario Mayes Rubeo, quien trabajó en las películas Avatar y Apocalypto. Rubeo señala: "Comenzamos a diseñar los trajes desde cero porque éramos conscientes de que, si bien son tribus que habitan en Marte, su aspecto debía reflejar lo antigua que era su civilización. JOHN CARTER: ENTRE DOS MUNDOS no posee un estilo futurista. No es supersónica ni nada por el estilo. Los espectadores se encontrarán con un mundo antiguo en Marte y eso fue lo que intentamos crear tomando elementos de todas partes del mundo. Buscamos inspiración en China, México, muchos países de África, Mesopotamia, antiguas civilizaciones italianas como la picena… lo que se te ocurra".
Mientras que para Taylor Kitsch, quien da vida al humano John Carter, un veterano de la Guerra de Secesión que es misteriosamente transportado a Marte, rodar en Utah supuso rigores y alegrías por igual. "Me fascinó rodar allí. Quizás se debió sobre todo a poder estar al aire libre luego de pasar tanto tiempo rodando en los estudios de Londres, pero fue la primera vez que realmente tuve la sensación de que estábamos haciendo una película épica de aventuras. Rodamos algunas escenas en el lago Powell, y los sets eran extraordinarios. Realmente parecía algo fuera de lo común. Creo que los espectadores adorarán esta película".
Ante la pregunta de qué fue lo que lo atrajo al proyecto, Kitsch no duda en contestar: "trabajar con Andrew Stanton, sin duda. Haría cualquier proyecto en el que él estuviera involucrado. El guión era genial y mi personaje tiene un arco increíble, de modo que como actor, estaba realmente emocionado de encarar este desafío. Además, es el papel de mayor acción que he hecho en mi vida. Los saltos, las escenas de riesgo y el entrenamiento con la espada han sido todos muy rigurosos. En casi todas las escenas que tienen lugar en Marte, estoy atado a cables. Eso sólo, ya de por sí ha sido realmente intenso.
"Trabajar 102 días de los 102 días programados también ha sido interesante", señala Kitsch con una sonrisa. "Digamos que sencillamente aprendí a conservar mi energía. Una vez que John llega a Marte, todas las situaciones que vive son de vida o muerte. De modo que debía arriesgarme todo lo posible".
Su coprotagonista Lynn Collins, quien da vida a la princesa Dejah Thoris, también fue puesta a prueba y recompensada por la experiencia JOHN CARTER: ENTRE DOS MUNDOS . "Adoro a Andrew. Posee un diálogo tan increíble con los actores. Además me emocionaba dar vida a Dejah porque tan pocas veces tienes la oportunidad de interpretar a un personaje femenino benevolente pero poderoso, que además es sexy y hermosa. Me fascinó y lo pasé sensacional en Utah. Mi miedo a las alturas quedó definitivamente aniquilado. Con Taylor, nos colgaron de todas las formas posibles. Y nos dejaron caer -caer de un modo seguro, claro- varias veces. Digamos que trabajar en JOHN CARTER: ENTRE DOS MUNDOS fue una excelente forma de acabar con la aprensión que despertaban en mí los papeles de acción".
"Cuando quedé seleccionada, de inmediato comencé a leer las novelas de Burroughs", continúa. "Por mi vida -y eso que soy una persona creativa- no lograba visualizar las imágenes. Sencillamente no podía. Así que fue tan gratificante ver cómo la historia tomaba forma y disfrutar la interpretación que Andrew realizó de lo que estaba escrito".
Peter Chiang sintetiza todos los numerosos elementos que intervinieron en la creación y realización del apasionante mundo de JOHN CARTER: ENTRE DOS MUNDOS . "Dotar de un estilo cinematográfico a la novela de Burroughs ha sido el aspecto más emocionante de trabajar en esta película", declara. "En la evolución de la historia y el desarrollo de los personajes, las visuales aportarán uno de los aspectos más sensacionales y emocionantes de la película. Haber ligado la historia a la naturaleza y la tecnología probablemente es para todos nosotros el aspecto más increíble de JOHN CARTER: ENTRE DOS MUNDOS ".
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