En el portal de El Bazar...

La batalla de los sexos: Sinopsis, elenco, ficha, critica: Battle of the Sexes

La batalla de los sexos: Sinopsis, elenco, ficha, critica: Battle of the Sexes

SINOPSIS

Tras la revolución sexual y la escalada del movimiento femenino, el partido de tenis en 1973 entre la campeona mundial Billie Jean King (Emma Stone) y el ex campeón mundial y vividor en serie Bobby Riggs (Steve Carell) fue denominado LA BATALLA DE LOS SEXOS, y se convirtió en uno de los eventos deportivos televisados más vistos de todos los tiempos, al haber alcanzado 90 millones de telespectadores en todo el mundo.

Mientras la rivalidad entre King y Riggs alcanzaba su pleno apogeo, fuera de la cancha cada uno estaba librando batallas más personales y complejas. Una mujer privada a ultranza, King no sólo estaba abogando por la igualdad, sino también luchando por aceptar su sexualidad, una vez que su amistad con Marilyn Barnett (Andrea Riseborough) evolucionaba.

Y Riggs, una de las primeras celebridades por méritos propios en la era moderna de medios, batallaba con los demonios de las apuestas, a expensas de su familia y su esposa Priscilla (Elisabeth Shue). 246_BOTS_15669.jpeg

Juntos, Billie y Bobby ofrecieron un espectáculo cultural que hizo eco más allá de la cancha de tenis, provocando discusiones en los dormitorios y en salas de juntas, que continúan repercutiendo en la actualidad.

LA BATALLA DE LOS SEXOS es dirigida por Jonathan Dayton y Valerie Faris (LITTLE MISS SUNSHINE) a partir de un guión de Simon Beaufoy (SLUMDOG MILLIONAIRE), y presenta un reparto que incluye a Emma Stone, Steve Carell, Andrea Riseborough, Sarah Silverman, Bill Pullman, Alan Cumming, Elisabeth Shue, Austin Stowell y Natalie Morales. La película es producida por Christian Colson, p.g.a., Danny Boyle, p.g.a. y Robert Graf, p.g.a. El equipo de realizadores incluye al director de fotografía Linus Sandgren, F.S.F., a la diseñadora de producción Judy Becker, a la editora Pamela Martin, ACE, a la diseñadora de vestuario Mary Zophres, así como la música de Nicholas Britell, el casting de Kim Davis-Wagner, CSA y Justine Arteta, CSA y la supervisión musical de Steven Baker.

CRÍTICA

La batalla de los sexos es una interesante propuesta fílmica sobre la rivalidad existente entre los tenistas Bobby Riggs y Billie Jean King que entretiene de principio a fin.

El guión no sólo se mete en la historia del legendario partido del año 1973, sino que va más allá contando una historia romántica: la de Billie descubriendo una nueva faceta en el amor. Ambas temáticas están muy bien entremezcladas y balanceadas, logrando que el interés no decaiga nunca a pesar de que lo que se cuenta es bastante reiterativo.

Las interpretaciones de Emma Stone y Steve Carell son excelentes y opuestas, destacándose ella con un gran trabajo interno (puro sentimiento) y él con una muy buena composición externa.

Una atrapante película basada en hechos reales que no podés dejar escapar.

Cintia Alviti

027_BOTS_07584.jpeg


En este artículo podés leer porque mis críticas no contienen calificación, sinopsis o detalles técnicos

"Comencé a pensar acerca de la sociedad y las mujeres y de lo que esto podría significar… Sabía que tenía que ganar".

-- Billie Jean King, 2015

1973 fue un año de inflexión en el progreso de la historia estadounidense -el inicio de la revista Ms., la adopción del Título IX, la ratificación del Congreso de la Enmienda por la Igualdad de Derechos y el fallo de la Suprema Corte en el caso Roe vs. Wade. Pero, a pesar de todo ello, las mujeres seguían luchando con tan sólo tener una tarjeta de crédito a su nombre. Después se presentó un evento que asestó un tipo de golpe distinto, uno que dio justo en el corazón de la cultura pop. Se le apodó de manera descarada "La batalla de los sexos" -un partido de tenis entre la estrella de 29 años Billie Jean King y el ex campeón Bobby Riggs.

Mientras 90 millones de telespectadores en todo el mundo se sentaban al borde de sus sillones, el enfrentamiento entre Bobby y Billie Jean estaba destinado no sólo a ser algo surrealista sino también a sacudir al mundo. Para cuando terminó el encuentro, algo nuevo había surgido: una época en los deportes en la que ya no podían estar separados de la política y el cambio social, sino ser parte de ello.

Lo que le antecedió al partido, el espectáculo en el que se convirtió y la misión por la igualdad continúan sirviendo de inspiración, y todo ello cobra vida en LA BATALLA DE LOS SEXOS. El equipo de directores conformado por Valerie Faris y Jonathan Dayton (LITTLE MISS SUNSHINE, ganadora de dos Premios de la Academia®), casados en la vida real, analizan un momento cuando el cambio social estaba personificado por dos personas complejas. Dayton y Faris juntaron a la ganadora del Oscar® Emma Stone, en un papel física y emocionalmente desafiante, como ningún otro que le haya tocado interpretar, y al nominado al Oscar® Steve Carell, en uno de sus roles más complejos, como Bobby Riggs, artífice de su éxito y una celebridad entre los medios.

Los realizadores recrearon la época con detalles meticulosos del momento y con un trabajo de cámara cuidado, para explorar ese momento crítico, cuando el balance de poder entre el hombre y la mujer, entre lo establecido y los marginados, comenzó a cambiar.

Faris comenta: "LA BATALLA DE LOS SEXOS es tanto la historia de un evento deportivo histórico como la de la transformación privada y personal de una mujer, mientras se encontraba bajo una exposición pública intensa. Nos interesaba ver cómo estaba librando tanto batallas personales como políticas al mismo tiempo".

Dayton añade: "Fue el proyecto más retador de nuestras carreras. Es, de manera simultánea, una película de deportes, una historia de amor, un drama sociopolítico y, a ratos, una comedia. Cuarenta y cuatro años después de la Batalla, las mismas cuestiones se siguen debatiendo sin lugar a duda. Estábamos impactados por cómo este evento, parecido a un circo, se convirtió en un espacio donde cuestiones sociales importantes se estaban desarrollando".

"Este partido se sintió como el precursor de la manera en la que las ideas políticas están funcionando en nuestro país actualmente, de cómo el debate es con frecuencia reducido a un juego o una especie de entretenimiento", comenta Faris. "Con frecuencia nos dejamos llevar más por quién gana que por lo que está en juego realmente. Comenzamos a trabajar en el proyecto durante las elecciones primarias de 2016, cuando parecía que íbamos a ver a la primera mujer candidata a la presidencia. Durante un tiempo, todos pensaron que la película iba a mostrar cuán lejos hemos llegado desde la Batalla. Obviamente, el resultado de la elección arrojó una luz muy distinta en la historia".

Esto los motivó a enfocarse incluso más en las historias personales de dos individuos que, a primera instancia, no eran tan diferentes como parecían. Ambos se vieron atrapados por los medios y en un momento mucho más relevante que sus estragos individuales. "El mundo se ha vuelto todavía más polarizado desde que comenzamos a hacer la película y no queremos contribuir para nada a ello -esa es la razón por la cual decidimos enfocarnos en las vidas emocionales de Billie Jean y Bobby", explica Faris.

Dayton se mete en la conversación: "Nuestro objetivo era empatizar con todos los personajes y experimentar la complejidad de la situación".

Detrás de cámaras, Faris y Dayton conjuntaron un equipo en su mayoría femenino de grandes talentos consumados, incluyendo la editora Pamela Martin, nominada al Oscar por THE FIGHTER; la editora de sonido/diseñadora de sonido Ai-Ling Lee, nominada por LA LA LAND el año pasado, además de que trabajó en otra película encabezada por mujeres, WILD; la diseñadora de producción Judy Becker, quien ha contribuido en todas las películas de David O. Russell, así como en CAROL, de Todd Haynes; y la diseñadora de vestuario Mary Zophres, nominada al Oscar por LA LA LAND y TRUE GRIT.

Christian Colson, quien se une a Danny Boyle y Robert Graf en la producción del filme, resume: "Es una historia retratada de una manera espléndida por un escritor, dos directores, dos estrellas y un gran reparto, todos en el mejor momento de su carrera -y una historia que la gente platicará de regreso a casa. La película nos da pie a preguntarnos qué ha cambiado, y qué ha seguido igual. A título personal, es acerca de cómo encontramos el valor para vivir dentro de nuestra propia piel. Es un filme muy esperanzador y se aferra de manera obstinada a la convicción de que hay más cosas que nos unen que las que nos separan".

TODAVÍA FALTA MUCHO POR RECORRER, NENA: LOS ANTECEDENTES DE LA BATALLA

Para 1973 todo tipo de muros -de raza, género, religión y orientación sexual- estaban comenzando a caer.

Las mujeres se estaban organizando y marchando como nunca lo habían hecho, pero, no obstante, estaban haciendo tan sólo 58 centavos de dólar en comparación con los hombres, y las puertas de las oportunidades seguían cerradas en todo ámbito de sus vidas.

Todavía faltaba mucho camino por recorrer, pero era un momento cuando el cambio era palpable. Eso es parte de lo que llevó a los realizadores a hacer LA BATALLA DE LOS SEXOS.

"Estábamos interesados en 1973, ya que formó parte de una época de gran agitación", comenta Dayton. "Tenías la enmienda de la igualdad de derechos, Roe vs. Wade, la guerra de Vietnam, Watergate, y todo parecía estar bajo cuestionamiento. Después, repentinamente, el debate sobre la igualdad de la mujer encuentra un foro en un partido de tenis entre la campeona de 29 años Billie Jean King y el ex campeón Bobby Riggs, de 55 años. Tan absurdo como esto pueda parecer en la superficie, se convirtió en algo de suma importancia. Bobby Riggs estuvo en la portada de la revista Time", indica Dayton.

Fue Riggs quien convirtió el partido en un debate social que resonó en todo el mundo. King ya estaba luchando por la igualdad en el tenis, donde las mujeres todavía recibían una doceava parte del premio que se les otorgaba a los hombres. Fue pionera del Virginia Slims Tour -que por primera vez les permitió a las mujeres establecer sus términos financieros-, fundó la Women's Tennis Association (WTA) y se convirtió en la primera jugadora de tenis en la historia en superar los $100,000.00 dólares en premios en un año. Pero fue el partido contra Riggs que difundió la conversación, así como la fe de King en lo que se podía conseguir con todo eso.

Riggs había sido el jugador número uno en la década de los '40, después de haber ganado Wimbledon y el Abierto de los Estados Unidos. Para 1973, ya retirado, extrañaba el drama del juego y tener un canal para ventilar su amor por el escándalo y la autopromoción. Riggs expresó de manera pública que el tenis femenil era inferior -y retó a cualquier jugadora a derrotarlo para ver si le podía demostrar lo contrario. Sabía que la idea tenía potencial comercial, y también sabía que no había mejor rival que King.

Cuando Riggs jugó y le ganó a Margaret Court, quien en ese momento era la jugadora número uno, King sintió que no tenía más remedio que tomar el riesgo de enfrentar a Riggs. Pero ninguno pudo haber imaginado el circo desenfrenado que iban a generar o el significado que iba a tener para tantos.

El guionista Simon Beaufoy comenta: "El partido fue visto por la mayor teleaudiencia desde el aterrizaje en la luna. Fue un espectáculo masivo, lleno de bombo y platillo, que nunca se había visto en una cancha de tenis. No obstante, el juego resultó ser casi una atracción secundaria con respecto a la batalla más grande que se estaba librando en los Estados Unidos: el hombre contra la mujer. No estoy seguro de que ha habido un debate binario tan claro desde entonces, ¡ya sea en la política o en los deportes!".

Para King, ese día fue un punto de inflexión y lo que dio inicio aquel momento sigue en marcha. "En la actualidad, seguimos teniendo muchas de las mismas discusiones", indica King. "Las mujeres blancas todavía hacen 78 centavos de dólar, las mujeres afroamericanas 64, y las mujeres hispanas e indias americanas están en 54. No tenemos un congreso que tenga siquiera el 20% de mujeres. Tenemos muy pocas mujeres como directoras generales. Y lo que la gente no entiende es que cuando las mujeres ganan menos, las familias enteras ganan menos. Es evidente que provoca que familias sufran más, entonces por qué queremos eso. Espero que la historia de este partido continúe con el diálogo, una a la gente y nos recuerde que es necesario pensar antes de menospreciar a otros por cualquier razón. Ahora sigo luchando por las cosas por las que luchamos en 1973 y no podemos cejar en el empeño".

EL GUIÓN Y SUS PARTES GANADORAS

El guionista Simon Beaufoy no es ajeno a historias que combinan un filo cómico con un comentario social. Recibió una nominación al Premio de la Academia® por THE FULL MONTY, la historia desenfrenada de seis hombres desempleados que montan un acto de striptease para poder llegar a fin de mes; después, en el 2008, obtuvo el Oscar, el Globo de Oro y el BAFTA por SLUMDOG MILLIONAIRE, ganadora del Premio de la Academia a Mejor Película, que trata de un competidor en un programa de preguntas y respuestas que vive en la pobreza, en la India contemporánea.

Para LA BATALLA DE LOS SEXOS, Beaufoy tuvo la oportunidad de ahondar no sólo en uno de los eventos deportivos más importantes y excéntricos de la historia, sino también en las vidas personales tanto de Billie Jean King como de Bobby Riggs, al revelar cómo para cada uno la "batalla" era acerca de encontrarse a sí mismos y de cambiar el futuro.

"Lo que se volvió aparente en la primera lectura", comenta el productor Robert Graf, "era la manera en la que el guión de Simon mezclaba de manera experta el espectáculo del juego, el momento cultural del feminismo de la década de los '70 y las cuestiones privadas con las que estaban lidiando tanto Billie Jean como Bobby. Combina elementos que son cómicos, culturalmente significativos y que también son muy humanos y conmovedores, a los que les coloca encima capas de lo personal y lo público, además de plantear la pregunta: "¿cómo controlas tu vida personal cuando te avientan a la caldera de un evento público así de candente?".

Christian Colson añade: "Lo que me encantó del guión de Simon es cómo revela que para Billie y Bobbie las cosas eran mucho más complicadas de lo que cualquiera sabía. La 'Batalla de los Sexos' fue un circo público con implicaciones sociales de gran alcance, pero para Billie, luchando con su sexualidad, y Bobby, luchando por aceptar su juventud perdida, los riesgos personales eran altísimos. Simon es un humanista y un escritor inmensamente cariñoso, además de ser muy generoso. Le gusta la gente y está interesado en sus defectos, y esto ilustra y mejora su trabajo".

Beaufoy señala que nunca fue seguidor del tenis como aficionado que es de los deportes. "El tenis es sorprendente de ver por la habilidad y atletismo que se requieren, pero, te confieso, no fue el tenis lo que me intrigó", comenta. "Fue la competencia entre estas dos personas, que son diametralmente opuestas casi en todos los sentidos. La manera en la que Billie Jean va más allá -y todavía lo hace- en el mundo de los deportes para desafiar la injusticia, fue audaz y francamente magnífico. Los riesgos para ella, tanto a un nivel personal como para el movimiento femenino, fueron enormes. Billie Jean es de verdad una leyenda y haberla podido conocer fue uno de los grandes privilegios de haber realizado la película".

King fue su fuente primordial y con quien pasó incontables horas -incluyendo una de las primeras juntas de guión que duró nueve horas con sólo un receso de 10 minutos para comer un sándwich de pavo. "Al final, apenas y podía hablar, escribir o moverme, pero Billie apenas estaba calentando. Pudo haber seguido otras nueve horas", reflexiona Beaufoy. "Ese es el nivel de concentración de una campeona. Lo que más me sorprendió fue su cariño por Bobby. En realidad, no estaba luchando contra él -un hombre que además le caía bien-, sino más bien contra todo un sistema de creencias de que los hombres eran simplemente mejores que las mujeres. Le pedí a Billie que volviera a visitar áreas de su vida que todavía siguen siendo incómodas para ella, por obvias razones. No podía escribir la película sin mostrar el viaje muy personal que estaba emprendiendo -pero siempre fue abierta, generosa y de una confianza enorme".

Entre más hablaba con King, era más evidente para Beaufoy que la historia del partido también era la historia de una mujer enfrentándose a su identidad sexual y enamorándose en el momento menos propicio. "La tensión de la película proviene de la presión que Billie sentía, ya que se estaba volviendo una personalidad muy pública y esto se encimaba con su vida privada", señala. "Es una película acerca de alguien que lucha por aceptar quién es en realidad cuando los riesgos no pudieron haber sido más altos".

Beaufoy indica que parte del heroísmo de King es que ella no salió a buscar la competencia con Riggs, ni era el momento adecuado para tomar semejante riesgo, sino que se unió a la batalla porque no podía rehusar la oportunidad para marcar una diferencia. "En 1973, su vida profesional nunca había estado tan ocupada y todo era muy complicado", comenta el escritor. "La última cosa que necesitaba era estar bajo la luz de los reflectores. Pero Billie nunca ha evadido una pelea en su vida. Cuando Margaret Court perdió con Bobby, Billie no tenía opción más que dar un paso adelante y jugar. Alguien tenía que poner a Bobby en su lugar y sólo había una persona que podía hacerlo".

El sexismo rampante en aquel entonces es algo que Beaufoy tuvo oportunidad de comprobar en su investigación. "Me topé con los comerciales más asquerosamente sexistas que salieron al aire alrededor de la época del partido; de verdad, te dejaban boquiabierto con la manera en la que la mujer era degradada y humillada públicamente. En definitiva, hemos mejorado en eso, pero es evidente que todavía tenemos mucho por hacer", comenta.

Los productores vieron una afinidad inmediata entre los mundos de Beaufoy y las sensibilidades de Faris y Dayton -una que sólo se intensificó cuando dio inicio la producción. "Nos decidimos por Jon y Val por su sutileza, su gran visión y la ligereza de su toque -en cuanto a Simon, hay una generosidad intrínseca en su trabajo que siempre te hace sonreír, que nunca es moralina y siempre es muy elegante", comenta Colson. "Nos entregaron todo eso, pero también le añadieron una seriedad dramática auténtica. Insistieron en que la historia no tenía que ser presentada tan sólo como una comedia, y siempre andaban en búsqueda de incrementar los conflictos internos de los personajes y los puntos dramáticos de estrés en el guión de Simon. Encontraron justo el tono correcto para la película: dramática sin ser estridente, y manteniendo una ligereza de tono sin ser absurda".

Quizás de manera conveniente, Faris y Dayton admiten que esta película provocó más peleas entre ellos que lo acostumbrado, en una pareja que es conocida por su simbiosis creativa -pero también los unió.

"Val y yo quizás peleamos más en este proyecto que en cualquier otro que hayamos hecho", dice entre risas Dayton.

"Discutir es siempre parte de nuestro proceso creativo", indica Faris, "En el fondo de nuestras mentes, creo que estábamos conscientes de la expectativa de que yo era la vocera de las mujeres y Jonathan el de los hombres, pero en realidad nunca lo vimos así. De verdad, no es una competencia. Es un diálogo continuo que nos lleva a una visión compartida".

013_1BotS_Day06a_3116.jpeg

ROMPIENDO EL MOLDE: BILLIE JEAN KING

"El efecto que tuvo en la vida de Billie Jean King, en la sociedad y en los deportes fue inmenso. No sé si, viéndolo en perspectiva, ella pudo haber imaginado el impacto tan increíble que ese día iba a tener, y en tantas áreas distintas. Pero en ese momento, me parece que sí sintió el peso de saber que estaba representando a todo el movimiento femenino y eso hizo que se apasionara más por el partido".

-- Emma Stone

Billie Jean King provenía de una familia de clase trabajadora, pero en el llamado "deporte de country club" del tenis ganó casi todo honor en esa disciplina y 39 títulos de Grand Slam. Aun así, se rehúso a quedarse de brazos cruzados con la manera en la que las mujeres adentro y fuera del deporte eran tratadas. Maravilló a las audiencias con su juego despiadado y agresivo, pero anhelaba de igual manera lograr un cambio social. Incluso a pesar de haber llegado a ser la mujer más famosa del mundo mientras intentaba mantener en secreto su propia sexualidad, se convirtió a final de cuentas en una de las primeras mujeres famosas en hablar abiertamente de ser gay en la década de los '80.

Para evocar la historia de una activista que se hizo valer por sí misma, a los realizadores de LA BATALLA DE LOS SEXOS les atrajo trabajar con la ganadora del Premio de la Academia Emma Stone. "Hemos querido trabajar con Emma desde hace años. Esta parecía ser la oportunidad perfecta", comenta Faris.

Sólo había una gran cuestión: Stone no tenía experiencia alguna en el tenis, y apenas sabía agarrar una raqueta. Pero estaba dispuesta a sumergirse de lleno en un programa intensivo de entrenamiento de 4 meses. "Sabíamos que nunca íbamos a poder elevar el juego de Emma al nivel del de Billie Jean, pero nuestra esperanza era capturar el carácter físico de King", explica Dayton. "Transformó su cuerpo, al ganar casi siete kilos de músculo".

"A Emma le encantan los retos y tenía muchas ganas de emprender éste", indica Faris. "Incluso retrasamos el inicio de la producción para que pudiera tener más tiempo para hacer ejercicio. Se preparó con el ex entrenador de Matt Damon en las películas de Bourne. Pero todavía más importante, Emma fue capaz de capturar el espíritu de Billie Jean, quien siempre está entusiasmada e interesada en todo, y en todos a su alrededor. Emma es en gran medida muy similar".

Para Stone, el atractivo del proyecto comenzó con el hecho de que sabía muy poco acerca del partido de 1973, y se dio cuenta que para su generación se estaba perdiendo en la historia. "Este asombroso momento no lo tenía para nada presente hasta que leí el guión", indica Stone. "En especial, me impactó la realidad de que no hemos llegado demasiado lejos a partir de esos eventos que se llevaron a cabo hace 43 años. Me pude identificar mucho con la lucha de Billie Jean y me parece que en la actualidad mucha gente también se sentirá identificada con estos temas".

El hecho de que Stone sea tan emblemática para su generación cautivó a los realizadores. Christian Colson indica: "De alguna manera, Emma representa de manera brillante quiénes somos actualmente, por lo que nos pareció que sería maravilloso verla interpretar a una figura de 50 años atrás. Es Emma Stone como nunca la hemos visto, y desaparece absolutamente en el papel, pero le aporta su frescura y popularidad a él. La película se desarrolla en el pasado, pero se siente vital en el presente, y Emma es la que lleva las riendas de todo eso".

Stone se sumergió en su propia investigación, leyendo, viendo y absorbiendo todo lo que pudiera. "Quería saber tanto como me fuera posible acerca de todo por lo que estaba pasando Billie Jean", explica Stone. "Hay tanto que el público no vio en aquella época -tanto que le estaba sucediendo en su interior".

Una cosa que le impactó a Stone es que a King la movía claramente una fuerza mucho mayor que la noción de convertirse en la jugadora número uno -claro que quería eso, pero, en lo que es algo que resulta inusual, también quería mucho más. "Desde una edad muy temprana, creo que a Billie Jean la impulsaban estas ideas más grandes de afectar el cambio en el mundo y vio al tenis como su vehículo para hacer que esto sucediera, porque era maravillosa en ello. Tienes que recordar que cuando era joven a la mujer se le menospreciaba incluso por ser una atleta -en especial una tenista de armas tomar. Desde el principio, sabía que estaba luchando por algo mucho más grande que por ella misma".

Otro aspecto del maquillaje mental de King que impresionó a Stone es cómo soportó esa presión extrema -entrenar para ganar el partido con Riggs, mientras intentaba fundar la pionera WTA, enfrentarse a su sexualidad y lidiar con las repercusiones que todo esto iba a provocar en su matrimonio. "Billie Jean dice con frecuencia que la presión es un privilegio, pero esta fue una cantidad de presión descabellada bajo la cual estaba. Y me parece que todavía se seguía formando de muchas maneras", reflexiona Stone. "Mientras la interpretaba, estaba intentando mantener en mente las cinco o seis cosas que estaban ocurriendo en su vida de manera simultánea y, honestamente…no sé cómo no se replegó por completo".

El pasar tiempo con King para intimar más con ella, le dio un entendimiento adicional al enfoque de Stone. "Entre más tiempo pasaba con ella, más entendía que su sistema de creencias tiene una perspectiva hermosa. Estar con ella es como estar en una recámara con un chico de quince años al que le emociona todo el mundo que tiene frente a él, y cree de manera absoluta que grandes cosas pueden pasar en cualquier momento", explica.

Stone comenzó a ver la cancha como algo no muy distinto a un escenario o set cinematográfico, como una plataforma en la que una persona se para, totalmente expuesta, para que todos vean sus habilidades y emociones. "Así es como me identifiqué con Billie -ambas somos intérpretes. El escenario es mi cancha de tenis y creo que para Billie el tenis siempre fue un tipo de danza", explica Stone.

En medio de todo el entrenamiento físico extremo y la investigación que Stone realizó de la psique de King, los realizadores la vieron transformarse de una manera sorprendente. "Si estabas intentando encontrar una actriz que se viera exactamente como Billie Jean King, quizás y Emma no hubiera sido tu primera elección", admite Robert Graf, "pero la manera en la que ocupó el espíritu del personaje fue asombrosa y eso, por sí solo, hizo que se pareciera a Billie Jean más de lo que imaginamos".

Además de encarnar el estado atlético y la determinación de King, Stone tuvo el desafío de interpretar a King mientras se estaba enamorando, cuando en realidad no quería hacerlo. Si bien tenía una gran cercanía emocional con su marido Larry, King se había sentido atraída a las mujeres desde hace mucho tiempo, algo que ella sabía que no podía revelar, mucho menos vivirlo, por miedo a que la ya de por sí frágil gira femenina fracasara. Al haber crecido en una atmósfera homofóbica, estaba segura de que el mundo la iba a aislar, y también le tomó tiempo aceptar sus sentimientos. Ese proceso comenzó cuando conoció a Marilyn Barnett (interpretada por Andrea Riseborough), quien se convertiría en su pareja secreta.

Llegar a la profundidad de este complicado triángulo entre King, el marido que adoraba y la amante que estaba sacudiendo sus cimientos, era clave para Stone. "Este no fue un romance que se dio a fuego lento", reflexiona Stone. "Fue una cosa instantánea porque desató algo en Billie Jean que había reprimido durante mucho tiempo. Repentinamente, esta conexión fue una chispa y el haber entendido que quizás y no sabía lo que se estaba perdiendo en su vida. Pero debido a la época, se tuvo que llevar a cabo a un nivel tácito y muy privado, que nadie más pudo ver".

Stone también investigó a Riggs, que la llevó a desarrollar su propia teoría de qué fue lo que impulsó su desenfadada, pero implacable rivalidad. Los ve como jugadores que respetaban la competitividad en el otro -pero que también cada uno entendía que se iban a convertir en algo más grande una vez que el partido estuviera a la vista. "Creo que Billie Jean entendió que Bobby, más que querer dejar algo en claro, quería generar un entretenimiento grandioso e inolvidable con él al centro de todo. Pero también entendió que, de poder ganar, podía cambiar la vida de millones", explica Stone.

EL ESPECTÁCULO DE BOBBY RIGGS

Quizás no pudo haber existido un mejor adversario para Billie Jean King que Bobby Riggs, quien puso en marcha los eventos volátiles de 1973. Mientras que King era intensa, estaba en su mejor estado físico y dispuesta a hacer cualquier cosa para abogar por la igualdad, Bobby era un parlanchín ingenioso, retirado del deporte y seducido por el poder creciente de las celebridades en los medios. La única cosa que tenían en común: un amor absoluto por el tenis y la competencia.

Riggs ganó Wimbledon a los 21 años, pero después de dejar una carrera remuneradora en el tenis, entró a un espiral descendente, trabajado de manera miserable como hombre de negocios, cuando siempre había disfrutado un ritmo ajetreado. Fue sólo cuando Riggs sugirió que, a sus 55 años, podía ganarle a una jugadora de tenis bien clasificada, que comenzó a reinventarse. Al reactivar su amor por el deporte y por ser el foco de atención, encontró una manera fresca de convertirse en un nombre familiar y una celebridad impulsada por los medios, incluso a expensas de interpretar a un villano.

"Bobby creó esta personalidad de cerdo machista chovinista a sabiendas de que lo iba a volver a hacer relevante y que con ella regresaría de nueva cuenta a la atención del público. Creo que realmente esperaba que iba a ser el inicio de una nueva carrera", advierte Faris.

Riggs también tenía un ídolo en el mundo del deporte: "Bobby estaba fascinado con Mohammed Ali y la manera en la que promovía sus peleas. Vio cómo Ali le hablaba a la prensa afuera del cuadrilátero, y eso le sirvió de inspiración a Bobby para reinventarse", explica Dayton.

Al darle el papel a Steve Carell, Faris y Dayton sabían que iban a obtener una interpretación más profunda de Bobby que tan sólo la de un simple oponente de King. "No estábamos interesados en representar a Bobby o cualquiera como un simple villano. Jack Kramer es lo más cercano en el filme a un tipo malo, aunque, en realidad, le estaba dando voz a las actitudes prevalecientes de la época", indica Faris.

De niño, Carell recuerda ver la postura chovinista de Riggs como algo fingido. "Me acuerdo mucho de que se decía de él que era este cerdo sexista y la gente estaba muy molesta", rememora. "Pero incluso a pesar de ser un niño de once años, podía distinguir entre el acto y la persona, en gran medida de la misma manera en la que veías a Ali diciendo cosas muy incendiarias con semejante fanfarronería, pero sabías que sólo era una interpretación. Bobby disfrutaba irritar a la gente y ese era parte de su encanto".

Faris y Dayton estaban fascinados de poder darle el papel a Carell, quien es conocido por sus interpretaciones incisivas, pero siniestramente divertidas en películas tales como FOXCATCHER, por la que fue nominado al Oscar®, y THE BIG SHORT. También representó una reunión para el trío, ya que es la primera vez que volvían a trabajar juntos desde el 2005, cuando Carell interpretó el papel revelación de Frank Ginsberg, erudito de Proust, en la película ganadora del Oscar® LITTLE MISS SUNSHINE.

Dayton comenta: "Nos encantan las habilidades cómicas de Steve, pero también es un actor dramático muy capaz. Nos emocionaba que al momento de interpretar a Bobby Riggs le iba a permitir a las audiencias ver todo el alcance de sus habilidades en un papel. Un momento te estás riendo, al siguiente te está rompiendo el corazón".

Faris añade: "Al igual que Emma, Steve sintió una gran responsabilidad por hacerle justicia a la persona real. Todos queríamos que Bobby fuera visto como algo más que un payaso".

Una vez que comenzó a explorar la vida de Riggs de una manera más profunda, Carell se enteró de la inhabilidad de Riggs para resistirse a adoptar un punto de vista ladino o ceder ante una apuesta ambiciosa, pero su respeto hacia Riggs como el gran atleta que fue también creció, situación que le sirvió de inspiración para entrenar de manera intensiva para el papel. "Creo que una parte de esta historia que la gente no conoce es que este hombre no era ningún chiste como jugador. No sólo era un acto de circo. Fue un auténtico campeón", indica Carell, "e incluso en sus 50's, todavía conservaba su talento. Su problema real es que estaba fuera del foco de atención. La gente ya no hablaba más de él y ansiaba que eso volviera a pasar".

Si bien Carell llegó al proyecto con habilidades sólidas para el tenis, una parte fundamental de su preparación fue trabajar con Lornie Kuhle, entrenador original de Bobby y amigo cercano. La autenticidad era imperativa, por lo que Carell entrenaba con la misma raqueta tradicional de aluminio Head Master de la década de los '70 y las mismas empuñaduras que Riggs usaba.

Kuhle también le ofreció a Carell un entendimiento invaluable de Riggs. "Aprendí que su comportamiento era pícaro, pero también dulce y agradable. Nunca se callaba", dice entre risas Carell. "Lornie sugirió que Bobby nunca usaría 100 palabras cuando podía usar 1,000. Más que nada, Lornie dijo que a Bobby le encantaba la acción. No era tanto el ganar dinero per se, sino el amor por el bullicio y el ajetreo. Le encantaba el deporte bajo ese contexto".

Carell opina. "En muchas maneras, Bobby fue tan grande para la autopromoción como lo fue para el tenis. No creo que haya pensado que la gente se iba a tomar tan en serio el partido como lo hicieron, pero al mismo tiempo tampoco creo que le importaba ser odiado por las mujeres, siempre y cuando todo fuera por diversión. Le encantaba la fama. De hecho, ¡se involucró tanto en la fama y la promoción que dejó de entrenar!".

Hasta cierto punto, Carell considera que la caricatura de chico malo que Riggs le estaba presentando al mundo comenzó a consumirlo. "Le estaban aventando todo este dinero y fama instantánea, pero no dejaba de ser una espada de doble filo, porque, al mismo tiempo, la fama no era para quien realmente era, sino para esta personalidad que estaba interpretando. A la gente se le olvidó que era un atleta serio y creo que eso le hizo daño", comenta Carell.

En especial, a Carell le encantó asumir la apariencia distintiva de Riggs, con todo y sus dientes prostéticos. "Bobby tenía una fórmula especial de Clairol que utilizaba para que su cabello fuera café rojizo, pero dejaba que sus patillas fueran canosas. Así que durante un tiempo anduve con estos extraños pedazos canosos y el cabello rojo", reflexiona. "Recuerdo que una azafata me dijo, 'Oye, Steve, ¡bárbaro tu look!' No le pude explicar que no era por decisión propia. Bobby tenía un aspecto tan singular que no quise nada más ponerme un par de anteojos y darlo por terminado. La manera en la que se presentaba ante el mundo era importante para él, así que tenía que hacerlo de manera correcta".

Christian Colson cree que Carell descubrió las profundidades de Riggs. "El Bobby real interpretó al bufón, pero en su historia hay tanto una tragedia real como un sentido de dignidad, y eso fue lo que Steve encontró", comenta. "Aquí tienes a un hombre que tuvo un legado genuino como el gran deportista que fue, pero lo apostó todo por tener otra oportunidad para ser el centro de atención. Pudo haber sido recordado como el jugador que ganó los tres torneos de Wimbledon. En cambio, es el tipo bocón que perdió con Billie Jean King. Desde luego que Steve es divertido en el papel, pero también interpreta a Bobby de una manera muy conmovedora, como un hombre fuera de época, desfasado. Encuentra la humanidad en él como un niñito perdido, pero también, a final de cuentas, un dejo de redención".

LAS MUJERES EN LA BATALLA DE LOS SEXOS

En LA BATALLA DE LOS SEXOS, Billie Jean King está rodeada de un ensamble de mujeres -colegas, representantes y amigas- que crean un sistema de apoyo mientras se prepara para el partido más importante de su vida. Pero una mujer destaca al cambiar su vida por completo: la estilista Marilyn Barnett, con quien King entablaría su primera relación seria con una mujer.

El papel de Barnett lo interpreta la actriz británica Andrea Riseborough, quien coprotagonizó con Emma Stone la película BIRDMAN. "Dos cosas me emocionaron de unirme a LA BATALLA DE LOS SEXOS", comenta Riseborough. "Una, fue trabajar otra vez con Emma -en especial, adentrarme en esta historia de amor bella e íntima con alguien en quien confío. Y, después, lo que terminó por cerrar el trato fue conocer a Jon y Val. Vieron más allá de la historia deportiva para contar todos estos temas de igualdad, emancipación y derechos LBGT. Estaban muy en sintonía con todo, y vi que le iban a aportar su notable gusto y decoro al proyecto".

Riseborough siente que, por todos sus temas culturales y sociales, el filme es también en gran medida un romance -y, todavía más, la historia de una mujer que descubre el amor de una manera nueva. "Me parece que hay una manera muy específica en la que ama una mujer -sea heterosexual, gay, bisexual, o cual sea la orientación-, y eso es lo que tenemos oportunidad de explorar en esta película. Ahí es donde Emma y yo intentamos transmitir las bellas palabras de Simon".

Valeri Faris comenta: "En aquella época, Billie Jean se estaba enfrentando a una verdad de sí misma que era muy difícil de aceptar. Marilyn fue la que la empujó, y me parece que necesitaba de ese empujón. En la actualidad, Marilyn es un tema complejo para Billie Jean, pero todos queríamos una historia de amor positiva al centro de la película. Para nosotros y para Billie Jean fue importante que esta película les diera fuerza a aquellos que quizás y estén batallando con su sexualidad".

Otro personaje sin reservas proviene de un mundo totalmente distinto: la severa publirrelacionista y experta del tenis Gladys Heldman, interpretada por Sarah Silverman, una empresaria con agallas que hizo del circuito Virginia Slims un gran éxito entre los medios justo cuando el tenis femenino parecía estar en problemas. "Sin Gladys el tenis femenino no es lo que sería actualmente", declara King. "Gladys era excéntrica, brillante, creativa y sabía cómo hacer que las cosas sucedieran. Cuando escuché que Sarah iba a interpretarla me pareció perfecto".

Silverman se está volviendo tan conocida por sus trabajos en cine y televisión como por su innovadora comedia en centros nocturnos, y más recientemente podrá ser vista en THE BOOK OF HENRY. "Sarah como Gladys fue una idea de casting genial", reflexiona Robert Graf. "Tiene justo la mezcla correcta de dureza y encanto".

Silverman se sintió atraída de inmediato a Gladys. "En realidad no sabía nada acerca de ella", admite Silverman. "Pero cuando leí el guión, me encantó y maravilló; es tan llamativa y estridente. Hice un esfuerzo por intentar comprender cómo ha de haber sido su vida interior -era muy externa. Conozco a algunas personas que piensan que yo soy estridente y externa, pero, no obstante, fue un reto. ¡Habla muy rápido y mi cerebro no se mueve a esa velocidad! Era una mujer muy sensata y no tenía tiempo para sufrir con tontos".

A lo largo del rodaje, Silverman se sintió inspirada por la atmósfera que Faris y Dayton cultivaron en el set. "El temperamento del director lo es todo en un set cinematográfico", opina, "y tener a este matrimonio adorable, que juntos tienen un ritmo y vibra increíbles, fue muy revelador para mí. Hasta esta experiencia, no sabía que era posible dirigir una película completa y también ser tan agradable".

La nominada al Oscar® Elisabeth Shue interpreta a Priscilla, la adinerada, pero distanciada esposa de Bobby Riggs. Shue estaba intrigada con esta mujer de una generación y crianza muy distintas a las de ella. "Priscilla quizás y fue educada para subordinarse ante el hombre. Pero me parece que se sentía atrapada en ese rol", comenta Shue.

Shue continúa: "Cuando pensaba acerca de Priscilla, no podía dejar de imaginar cómo ha de haber sido para mi mamá, quien, a pesar de haber estudiado en la Facultad Wellesley y es una mujer muy brillante, nunca tuvo una carrera. Me parece que Priscilla ha de haber estado frustrada de que nunca le hayan permitido ir en búsqueda de sus propios sueños, de siempre haber vivido de manera indirecta a través de Bobby, quien tenía tanta libertad. Creo que sentía celos de su libertad, mientras intentaba hacer lo que fuera por el bienestar de su familia".

Si bien Bobby consternaba a Priscilla, Shue también quería inyectarle a su actuación una capa más profunda de amor. "Creo que al principio a Priscilla le encantaba estar a su alrededor y entre todo su caos. Vivía al filo con respecto a sus apuestas y, después, cuando comenzó los partidos de la 'Batalla de los Sexos', lo vio convertirse en una diferente versión de sí mismo. No creo que la personalidad machista era real; pero su desesperación por llamar la atención lo llevó a un nivel absurdo de teatralidad".

Una de las jugadoras más contrastantes a King en la gira fue la legendaria Margaret Court, ganadora de un imbatible récord de 62 títulos de Grand Slam en dobles y sencillos, quien más tarde se convertiría en ministro cristiana. Si bien Court fue una de las primeras mujeres en llevar a un niño en la gira, y la primera en aceptar el reto de Riggs, también fue franca en su visión intransigente contra la homosexualidad.

La actriz australiana Jessica McNamee interpreta el papel en LA BATALLA DE LOS SEXOS. McNamee opina de Court: "Margaret era bastante anticuada, aunque se unió a la causa de intentar conseguir la igualdad de género. Simplemente amaba el tenis, amaba competir y no estaba interesada en ninguna otra cosa. Ni siquiera creo que haya entendido la gravedad de jugar contra Bobby. Para ella era sólo otro encuentro. Ella y Billie Jean tenían una competencia inmensa en la cancha, pero su rivalidad también provenía de estilos de vida muy distintos. Margaret era puritana e incluso es día que aboga de manera categórica contra la igualdad de derechos para la comunidad gay".

El lado femenil de la historia lo completan aquellas apodadas como "Las Nueve", quienes fundaron el circuito original de Virginia Slims. Entre éstas, se encuentran Natalie Morales como la enérgica Rosie Casals, quien fue la muy condecorada pareja de dobles de Billie Jean King; Martha MacIsaac como Jane "Peaches" Bartkowicz; Mickey Sumner como Valerie Ziegenfuss; Bridey Elliot como Julie Heldman, hija de Gladys; la veterana de la gira femenil Ashley Weinhold como Kristy Pigeon; la estrella de tenis de la USC Kaitlyn Christian como Kerry Melville Reid; la tenista profesional de Louisville Lauren Kline como Nancy Richey; y la tenista profesional Fidan Manashirova como Judy Dalton.

Al llevar a cabo una investigación para el filme, las mujeres se dieron cuenta del cambio tan dramático que ha sufrido el mundo, aunque todavía hay mucho por hacer. Para Morales, en especial, es fascinante ver la transmisión original de Howard Cosell y Casals, que aparece palabra por palabra en el filme. Morales comenta: "Rosie Casals fue compañera de transmisión de Howard Cosell durante la Batalla real. Es increíble ver ahora en el video la manera en la que le habla, y la menosprecia. Cuando la presenta, una tenista profesional ganadora de torneos, la toma del cuello como si fuera una niña y dice que va a presentar a la pequeña Rosie Casals. Creo que en aquel entonces nadie entendió cuán insultante fue eso -era considerado normal porque así de profunda estaba enraizada la actitud en esa época".

MacIsaac lo resume: "Para mí, esta es una historia excepcional que narra el increíble viaje de una mujer. También es la historia de Bobby Riggs, pero el corazón y alma es ver a Billie Jean pasar por esto y verla con estas otras mujeres alzarse en contra y solidarizarse con el movimiento femenil".

LOS HOMBRES DE LA BATALLA DE LOS SEXOS

Los hombres de LA BATALLA DE LOS SEXOS estaban igual de conflictuados por los tiempos cambiantes. Uno de los más afectados es Larry King (Austin Stowell), marido de Billie Jean, quien fue uno de los organizadores de la gira de tenis femenil y su seguidor inquebrantable, incluso a pesar de que estaba consciente que su matrimonio se estaba yendo a pique.

Stowell comenta: "Larry fue como el todo de Billie Jean. Era su mejor amigo, su entrenador, su representante, su confidente, su preparador físico e, incluso, hasta cierto grado, su terapeuta. Desempeñó muchas funciones. Pero también fue su amante -y digo eso con el corazón en la mano, porque, de lo que pude recabar, se querían mucho. Sin importar cuál fuera la sexualidad de Billie Jean, estaba enamorado de ella".

"Había tantas cosas que estaban pasando con todas estas parejas, entre Larry y Billie Jean, entre Bobby y Priscilla, entre Marilyn y Billie Jean -todos estaban intentando descifrar estos momentos de confusión. Lo que en un principio pensé que quizás y podía ser una comedia también se convirtió en una obra muy emotiva para mí, acerca de gente que lucha por el cambio. Para mí, lo asombroso acerca de Larry es que tomó esta increíble decisión de no rechazar a la mujer que tenía frente a él, sino abrazarla, hacer lo que estuviese a su alcance para formarla y ofrecerle el potencial para volverse tan grandiosa como pudiese".

Durante la década de los '70, otra figura clave en la vida de Billie Jean fue Cuthbert Collingwood "Ted" Tinling, el intrépido diseñador de modas quien fraguó la apariencia moderna en los deportes, una vez que se encargó del vestuario en la gira Virginia Slims -y diseñar el vestido que King usó para la Batalla.

Alan Cumming, ganador del Premio Tony y nominado al Emmy y Globo de Oro, se encargó del papel. A Cumming le atrajo la manera en la que Simon Beaufoy entrelazó temas intrincados en un guión con un ritmo dinámico. "Simon lo hizo sentir muy auténtico y personal, e hizo que la esencia del guión fuera de cómo la gente se abre paso a través de un laberinto de relaciones en tiempos muy cambiantes", comenta.

Las cosas se volvieron todavía más intrigantes cuando Cumming comenzó a investigar a Tinling. "Ted era fascinante: un ex tenista y auténtico espía de la Segunda Guerra Mundial, que hizo la transición a la moda femenina. También fue alguien capaz de dar consejos a Billie Jean como hombre gay que era, que ya había pasado por eso unas cuantas veces", explica. "Hizo muchas cosas increíbles -en una ocasión fue expulsado de Wimbledon porque sus atuendos fueron considerados muy atrevidos".

Le encantó que Tinling era un pionero descarado. "Cuando comenzó la gira femenina, fue una idea tan radical y revolucionaria que cualquier cosa podía suceder desde un punto de vista de la moda. Era territorio inexplorado y él se aprovechó de eso", señala Cumming. "Billie Jean me dijo que Ted le ayudó mucho a reafirmar su confianza. Como actor que soy, sé que por lo general tienes una relación muy vulnerable y especial con la gente de guardarropa, y creo que Ted tenía ese mismo tipo de relación con las mujeres en la gira, en especial con Billie Jean".

King llama a Tinling "un alma creativa y brillante". Recuerda: "Siempre me decía Madame Superestrella. Estaba muy adelantado para su época en sus telas y diseños, siempre viendo hacia el futuro".

Lornie Kuhle, entrenador de tenis y antiguo amigo de Bobby Riggs, no sólo fungió como asesor de la película, sino que también es un personaje, interpretado por Eric Christian Olsen. A Olsen le encantó la oportunidad de preguntarle todo a Kuhle. "Lornie es una leyenda en el mundo del tenis y tiene historias asombrosas", reflexiona Olsen. "Él y Bobby tuvieron una relación hermosa. Fueron grandes amigos que se cuidaron mutuamente".

En cuanto a su opinión de la Batalla, Kuhle dice que Riggs tuvo un efecto inesperado en el mundo, que iba más allá del dinero, la fama y la diversión que estaba buscando. "La ironía es que, a la larga, Bobby quizás y pudo haber sido la mejor cosa que jamás le haya pasado al tenis femenil", dice entre risas.

Otra leyenda del tenis que tuvo un papel en la Batalla fue Jack Kramer (Bill Pullman). Ex número uno que jugó con Riggs, fue un promotor incansable del tenis profesional en la década de los '50 y '60, al llevar al deporte de ser soso y aburrido a una Era Abierta, que giraba en torno al atleta. Pero la creencia remanente de Kramer que las tenistas no podían vender boletos trajo consigo un enfrentamiento con King.

Dayton señala, "Kramer es un personaje interesante porque por un lado es un caballero, pero también tiene creencias acerca de las mujeres que pertenecen a otra época y no está dispuesto a cambiar. Me parece que fue bastante difícil para Bill incluso decir algunas de las palabras que dijo Jack, pero podía rehacerse, interpretar la escena y después sacudírselo".

Pullman dice que sintió empatía por Kramer al ser un hombre atrapado en un pasado que estaba siendo rápidamente desechado. "Creo que Jack es portavoz de mucha gente de aquella época. Ahora podemos ver atrás y pensar cuán estúpida era esa gente -pero la verdad es que la mayoría de la población aceptaba las convenciones sociales. Jack ya había tenido éxito en desvincularse de la jerarquía controladora del tenis y darle más poder y fuerza negociadora a los jugadores".

Pullman también estaba emocionado de trabajar en el proyecto con su hijo, el actor Lewis Pullman, quien interpreta a Larry, hijo de Riggs. Lewis cree que Larry vio en estado de shock cómo su padre se transformó en un símbolo chovinista durante la época representada en el filme. Explica: "Una cosa que Steve Carell me dijo, que me pareció muy reveladora, fue que cuando platicó con Larry acerca de su papá, le dijo que Bobby no siempre fue el personaje excéntrico que se aprecia en el material visual de archivo. Durante gran parte de la vida de Larry, fue un padre de oficina y después esta nueva personalidad se desarrolló repentinamente una vez que Bobby se convirtió en una celebridad".

El miembro más misterioso del séquito de Riggs fue Rheo Blair, un "nutriólogo de las estrellas" que se convirtió en el gurú de salud de Riggs, al insistir que su régimen de vitaminas y proteínas le abriría el camino para su rejuvenecimiento. El comediante, actor, músico y ex intérprete de SNL Fred Armisen interpreta el papel a tope.

Armisen estaba fascinado con la singularidad de Blair. "Investigué a Rheo cuando me ofrecieron el papel, y es hasta cierto punto curioso, pero sí se parece un poco a mí, aunque con una gran melena. Cuando leía acerca de él me daba la sensación de no saber qué estaba tramando este tipo", dice Armisen entre risas. Parece que era el precursor de cosas como Herbalife y de todas las barras proteicas súper nutritivas de la actualidad -una cosa más que podemos comprar que nos hace sentir bien con respecto a nosotros mismos. Pero, ¿quién sabe qué había en esas pastillas? Hasta donde sé pudo haber sido azúcar".

FILMANDO LA BATALLA

Los acontecimientos de LA BATALLA DE LOS SEXOS se llevaron a cabo en un 1973 que se siente inmediato y contemporáneo -gracias en parte a que Faris y Dayton eligieron filmar la película con la riqueza cinematográfica de los 35mm. Colaboraron de manera estrecha con un cuarteto clave -el director de fotografía Linus Sandgren, la editora Pamela Martin, la diseñadora de producción Judy Becker y la diseñadora de vestuario Mary Zophres- para hacer que su visión cobrara vida. Sandgren y Becker trabajaron juntos previamente en las películas JOY y SILVER LININGS PLAYBOOK, ambas de David O. Russell, mientras que Zophres y Sandgren colaboraron en LA LA LAND, por la que ambos ganaron Premios Oscar®. Las colaboraciones de Martin con Faris y Dayton incluyen LITTLE MISS SUNSHINE.

Sandgren llegó a la historia con muchas ideas firmes. Una fue diferenciar entre la perspectiva masculina y la femenina. "Sentimos que podía ser interesante crear una metáfora visual continua en la que Billie Jean y las otras mujeres siempre están mirando hacia delante, mientras que los hombres están mirando hacia atrás. Es algo muy sutil, pero usamos ese tipo de reglas visuales, que fueron divertidas al momento de trabajar", comenta el cinefotógrafo.

Junto con Faris y Dayton, Sandgren volvió a ver algunas de las películas más definitorias desde un punto de vista estético de la década de los '70 -en especial el trabajo de John Cassavetes y Robert Altman-, pero todos concordaron en que no querían que el filme echara mano de la nostalgia o reflexión de un pasado que ni siquiera está cerca de estar tras nosotros. Sandgren dice que la influencia más grande fue hacer que la cámara se convirtiera en una veleta emocional.

"Para mí, esta película era hacer que la cámara reaccionara de manera emocional ante la escena. No se trataba de hacer un tipo de estilo o movimiento de cámara en particular, sino que todo partiera de las emociones de los personajes", describe Sandgren. "Parte de la idea que teníamos Jon, Val y yo fue que la película no tenía que verse como una de los '70; en cambio debía verse como una película realizada en los '70. Y después le añadimos a ese concepto que la cámara nunca debía ser muy notoria o consciente de sí misma, sino más reactiva desde un punto de vista emocional".

Todos concordaron en no tomar el camino digital para esta película. Sandgren explica: "Debido a que estos son los '70, ayudó a la historia tener mucho grano visual y también contar con colores muy prominentes sin tener que saturar la película en postproducción. Queríamos que el mundo se sintiera muy fértil en cada detalle. Sí contemplamos filmar en 16mm, pero sentimos que este formato iba a ofrecer muy pocos detalles al momento de filmar el tenis, así que optamos por 35mm. Y después utilizamos lentes viejos de los '70, para que se sintiera todavía más como si se hubiera fotografiado en ese periodo de tiempo".

Para filmar el partido mismo, Sandgren encontró unos lentes zum antiguos que le permitieron acercarse como un camarógrafo deportivo de la época. "Queríamos que el partido fuera emocionante, incluso si no sabes nada de tenis", señala, "por lo que la idea principal era hacer énfasis en la esfera de acción de todo ello, en toda la locura en torno que pudiera distraer a Billie Jean de su intensa concentración. También lo queríamos fotografiar de una manera auténtica, como un partido de tenis de verdad de aquella época, así que usamos cámaras de televisión, grabando de la manera como se hubiera hecho por este medio. Sólo después del partido, la cámara se vuelve más íntima y se introduce, de una manera más personal, hasta Bobby y Billie Jean, mientras reaccionan".

"Trabajamos muy duro para hacer que el tenis se viera correcto", comenta Faris. "En el último partido, decidimos cubrirlo como si fuera visto por televisión, con una toma abierta de la cancha para poder ver toda la interacción entre los jugadores y el movimiento de la pelota, y así recordarnos que este fue un evento público".

La editora Pamela Martin, nominada al Oscar® por THE FIGHTER, regresa a un deporte distinto, pero donde también se ven las caras, en LA BATALLA DE LOS SEXOS. En especial, estaba emocionada de colaborar de nueva cuenta con Faris y Dayton en lo que ella considera su película más épica hasta la fecha. "Todas sus películas son acerca de la experiencia humana, pero lo que es distinto acerca de esta película es su esfera de acción", comenta Martin. "Es acerca de la gran guerra por la igualdad".

Desde el principio, una de las tareas más grandes en la resolución de problemas para Martin fue cómo balancear la mezcla de emotividad, deportes, suspenso y espectáculo cultural. Así que un mes antes de que diera inicio la producción, comenzó a ver y repasar una y otra vez el histórico material televisivo. "Estaba interesada en todos los detalles de él, desde la estrategia de juego a cómo también se estaba dando esta batalla entre Howard Cosell y Rosie Casals como comentaristas. Y de todo eso edité mi propia pieza de diez minutos", explica. Eso se convertiría más tarde en un plan de acción de cómo editó la escena. "Jon y Val llegaron con mucho material audiovisual, pero yo ya tenía una idea de hacia dónde queríamos ir; así que sólo fue una cuestión de encontrar las piezas valiosas y entrelazar todos los arcos de los personajes al partido", indica.

En cuanto al mismísimo tenis, Martin lo ha jugado desde niña, pero se hizo de un mejor entendimiento mientras editaba peleas de box en THE FIGHTER. "Con THE FIGHTER aprendí mucho de cómo puedes reducir un evento deportivo a un núcleo dramático y expresar una historia dentro de él", explica.

Trabajar con Faris y Dayton siempre ha sido algo especial para Martin, pero sintió que LA BATALLA DE LOS SEXOS parecía sacar todavía mucha más ventaja de tener dos mentes creativas como directores. "Los dos no siempre están de acuerdo en todo, pero lo notable es que no hay lugar a duda que son iguales -son inteligentes, creativos y perceptivos a la par, y debido a que ninguno domina al otro, trabajan juntos de una manera muy exquisita. Desde luego, en ocasiones yo terminaba siendo la mediadora", admite, "pero al igual que la mayoría de los editores, disfruto sopesar dos formas de cómo abordar las cosas. Para mí, siempre es divertido porque Jon y Val aman estar en la sala de edición, y eso fue especialmente cierto en esta película porque teníamos mucha historia que contar, sumada a la gran banda sonora de Nick Britell y toda la música. Es un hecho que es su película de mayor envergadura".

DISEÑANDO LA BATALLA

La diseñadora de producción Judy Becker trabajó previamente con Faris y Dayton en RUBY SPARKS y sabía que LA BATALLA DE LOS SEXOS iba a ser una experiencia muy creativa. "Me encanta trabajar con ellos", comenta, "porque son muy astutos visualmente hablando. Tan pronto y comenzamos a platicar, me decían de lo importante que era evitar todos los clichés de los '70 y de cómo teníamos que representar la gira femenil de tenis basados en la realidad, pero partiendo de nuestro propio estilo visual y expandiendo la paleta de color. Fue un proceso grandioso, muy estimulante y colaborativo".

Para Becker, parte de la diversión fue contrastar las vidas divergentes de Riggs y King. "Estábamos muy conscientes de distinguir entre el mundo de Bobby, el mundo del tenis y la gira de Virginia Slims, que es un paseo a través de los moteles de la década de los '70. Para la vida de Bobby antes del partido, decidimos de manera consciente usar una paleta que incluyera tonos arcilla, neutrales y cafés. Después contrastamos eso con verdes, amarillos, rojos y azules brillantes de la gira, que son colores que encuentras en los deportes", explica la diseñadora. "Eso es algo que nos tenía muy emocionados a Jon, Val y a mí".

Para ser una película basada en un deporte había una cantidad inusualmente grande de sets que construir y decorar, incluyendo una oleada constante de vestíbulos de hotel, así como estadios de tenis grandes y pequeños. "Hay muchas apariencias distintas en la película y fue algo muy ambicioso para el presupuesto", señala Becker. "Pero Jon y Val tienen tal gusto, que había altas expectativas para cada set tanto de su parte como de la nuestra".

Una de las locaciones más difíciles de encontrar fue la mansión de Betty Grable en Palm Springs, en la que Bobby Riggs es anfitrión de una gran fiesta. Al buscar casas que hicieran las veces de la mansión, el equipo encontró una diseñada por Paul Williams en Holmby Hills, con una alberca de época mirando desde lo alto una cancha de tenis, también de la época. "Era una casa en la que Connie Stevens había vivido, pero estaba un poco descuidada porque ya llevaba algo de tiempo deshabitada, así que la trajimos de regreso al nivel de una casa de estrella de cine de 1973. Renovamos la cancha de tenis, el paisajismo y todo el mobiliario -y todo fue muy divertido", comenta Becker.

La Mermorial Sports Arena de Los Ángeles hizo las veces del Astrodomo de Houston, que quedó muy dañado por el huracán Katrina. Una reliquia por derecho propio, la arena de Los Ángeles fue demolida poco después de la filmación, pero probó ser un esqueleto perfecto para recrear la atmósfera vibrante, casi psicodélica, de un evento que atrajo a todos, desde Helen Reddy cantando en directo "I Am Woman" hasta al mismísimo maestro del surrealismo Salvador Dalí.

"Obviamente, el Astrodomo y el día del evento están muy bien documentados, así que fuimos capaces de replicar toda la apariencia del partido, hasta el hecho de que 15cm. de cancha de basquetbol se asomaban por debajo de la cancha de tenis", explica Becker.

Becker vio con euforia cómo a sus sets erigidos con un gran cariño les infundieron vida, mientras los actores se metían a ellos. "Fue un poco alucinante ver a estos actores transformarse en el set. No estaban haciendo imitaciones. Emma realmente parecía convertirse en Billie Jean de una manera sorprendente", comenta Becker.

MÁS ALLÁ DEL BLANCO EN EL TENIS: EL VESTUARIO

1973 no sólo fue un año de cambio social, sino también un año en el que la moda cambió de manera vertiginosa, lo que le dio a la diseñadora de vestuario Mary Zophres una alta dosis de inspiración. "Cuando piensas en la historia de la moda, fue a finales de la década de los '60 y 70's cuando la idea de la autoexpresión a través de la ropa comenzó a entrar en juego. Y queríamos que la película hiciera alusión a ello", explica.

La película representa la tercera ocasión en la que Zophres viste a Emma Stone, pero esta vez las cosas fueron distintas. "Antes de este filme, Emma, para mí, era una flor delicada. Tenía un cuello parecido al de un pájaro y brazos elegantes. Pero lo que vi, partiendo de las mediciones que le hice antes de que comenzara a trabajar en la película, es que había transformado su cuerpo por completo", reflexiona Zophres.

Eso resultó ser perfecto para la apariencia de Billie Jean King, inspirada en gran medida en la persona real. "Cualquier cosa que no se sintiera atlética o fuera muy bonita era descartada, y usábamos camisas, cuellos de tortuga y chalecos. El objetivo era hacer que Emma se viera un poco más curtida -y nos dimos cuenta de que podía tomar ese camino de una manera fácil", comenta Zophres.

En la cancha, Zophres retomó los diseños de Ted Tinling que sacudieron al mundo del tenis de aquella época. "Tinling tuvo una imaginación de lo más maravillosa", describe. "Cuando se unió a la gira femenil, apreció la idea de que ya no tenían que seguir los códigos de vestimenta viejos y estrictos para jugar tenis. Su aportación principal fueron los diseños coloridos, cortos y llamativos. Me divertí increíble al recrear estos atuendos -nunca había hecho algo así".

La misma King recuerda cómo Tinling tuvo un efecto tangible en el tenis femenil, así como en su propia imagen pública. "Ted diseñó vestidos que eran distintos para cada una de nosotras", recuerda. "En el caso de Rosie, por ejemplo, Ted agregaba más lentejuelas porque era muy creativa y acrobática en su manera de jugar. Dejaba que tuvieras grandes cuellos o pequeños cuellos, o sin cuello, cuello en 'v' o no, y nos preguntaba cómo queríamos los paneles y el esquema de color. Cada año tenía un color como tema y el año del partido contra Riggs fue verde menta".

De hecho, el vestido de King para la Batalla fue una maravilla de corpiño, hecho de nylon, color verde claro y azul, lleno de lentejuelas y diamantes de imitación, que se convertiría en un icono.

Quizás el mejor cumplido que le dijeron a Zophres se presentó cuando King visitó el set durante una prueba de cámara para la réplica del vestido. "Cuando Billie Jean lo vio, preguntó cómo era posible que me haya hecho de ese vestido. Me hizo tan feliz pensar que lo habíamos hecho de una manera tan apegada, que creyó que era el vestido real", dice Zophres.

King añade: "Hicieron un trabajo increíble en haberlo hecho tan bien, y eso no ha de haber sido nada fácil".

Otro reto se presentó al momento de encontrar los tenis característicos de King. "Yo tenía unos Adidas azules y tenía que pelear por usarlos", recuerda King. "Creo que fui la primera jugadora en haber usado tenis de colores, y, si te das cuenta, el azul de mis tenis hacía juego con mi muñequera. Era muy meticulosa con este tipo de cosas".

Adidas ya no hace un tenis similar y no pudieron encontrar ningún par antiguo, así que Zophres solicitó un pedido especial. "Creo que tomamos a Adidas por sorpresa", reflexiona Zophres. "Pero fueron muy amables y al final encontraron el diseño original de esos zapatos, y los hicieron a la medida para Emma en el color azul con tres franjas blancas y las iniciales de Billie Jean. ¡Todas nuestras jugadoras de tenis se volvieron locas con esos zapatos!".

Cuando llegó el momento de crear el guardarropa de Bobby Riggs, Zophres trabajó de manera estrecha con Steve Carell para establecer, desde el primer segundo que aparece en pantalla, una silueta de pies a cabeza sólida e inigualable -en equilibrio entre el mundo acartonado del pasado y una necesidad excéntrica por ser su propio hombre.

"Discutimos la idea de que Bobby iba a ser visto por primera vez en un traje de los '60's sacado directamente de la tienda, de corte tradicional, con una solapa más ancha y zapatos brogue [wingtip] conservadores", describe Zophres. "No queríamos que Bobby se viera como una persona a la moda, porque nunca se vio así en el metraje que vimos. Incluso en fiestas, viste prendas de tenis tradicionales. O se ponía un atuendo llamativo, como los disfraces de Little Bo Peep o Enrique VIII, que, como todo mundo sabe, utilizó. En toda la investigación que realizamos, nunca noté que se saliera de su zona de confort. Ya tenía establecido su estilo cuando alcanzó su nivel máximo, que debió de haber sido en la década de los '50. Eso es algo que Steve también tenía muy presente; que pertenecía a esa época".

Zophres también se divirtió creando una réplica bien documentada de la sofocante chaqueta 'Sugar Daddy' que, por contrato, Riggs tenía que usar, quizás de manera desatinada, una vez que la original estaba perdida desde entonces. "A Bobby le pagaron mucho dinero por usar esa chaqueta, pero se acaloraba mucho, y como que le provocaba asfixia, así que fue algo que quisimos que se apegara lo más posible a la original", comenta la diseñadora.

Otra creación inusual se redujo literalmente a los calcetines de Riggs. Zophres fue incapaz de encontrar los calcetines rayados cortos que eran esenciales en la apariencia de Riggs. "Encontramos unos en eBay, pero eran para niño", recuerda. "Así que hicimos que una compañía en Carolina del Norte hiciera el calcetín. Después le cosimos un calcetín ortopédico moderno y cómodo a la plantilla de Steve e hicimos que sólo la parte rayada se asomara de su zapato.

Cuando se trató del mismísimo Ted Tinling, Zophres se fijó en el metraje para vestir a Alan Cummings. Valerie Faris comenta, "Si observas fotografías de Ted, podrás notar que vestimos a Alan tal cual se vestía. Era un tipo excéntrico, un personaje muy llamativo y colorido, con un gran estilo".

Conforme comenzó a investigar al personaje de la audaz Gladys Heldman, Zophres hizo énfasis en la brecha generacional que estaba abarcando. "Gladys era una fuerza que no podía ser ignorada, pero era un poco más vieja y de las contadas fotos que vi, usaba una faja, un corpiño y pantimedias. Le comenté a Jon y Val que teníamos que hacer énfasis de que ella formaba parte de otra generación -y que Gladys tenía que usar vestidos, porque el ser una defensora de la liberación de la mujer tampoco significaba que tenía que usar traje sastre. La puse en estampados gráficos vívidos, porque sentí que cuando Gladys entraba a una habitación, había un alboroto instantáneo".

A Sarah Silverman le encantó el look. "En realidad, dejé que el guardarropa, los lentes y el peinado hicieran toda la actuación", bromea. "Ya en serio, tan pronto y me puse los sorprendentes atuendos de Mary, me sentí como Gladys".

Al momento de vestir a Andrea Riseborough para el papel de Marilyn, Zophres jugó con estilos bohemios. "Quería que su apariencia expresará a alguien mucho más cómodo con su cuerpo y su sexualidad que Billie Jean -así que usamos muchas telas y mezclillas suaves. ¡Es uno de los pocos personajes en usar morado!".

Quizás lo más emocionante para Zophres fue diseñar el abanico asombroso de atuendos -desde los vestidos que estaban más de moda, hasta mascotas publicitarias desorbitadas- que llenaron el Astrodomo de Houston ese día, en septiembre de 1973. "La secuencia en el Astrodomo fue acerca de subirle al volumen", reflexiona. "Era muy festiva con muchos colores y texturas, pero también estaban estas personas muy adineradas y conservadoras de Houston en las primeras filas, así que fue toda una mezcla".

Para Zophres fue gratificante tener la oportunidad de poder traer de regreso para las audiencias modernas ese momento que no sólo fue un espectáculo desenfrenado, sino que dejó una huella en el mundo. "Jon y Val querían capturar esto y hacerlo bien", concluye, "porque en la actualidad muchos de nosotros ni siquiera sabemos de la Batalla de los Sexos, o todo lo que entró en juego para conseguir los derechos que las mujeres tienen ahora. Me parece que es una historia maravillosa para contarla a nuevas generaciones, y eso fue lo que más me emocionó de todo".

CONSERVANDO LA BANDA SONORA: NICHOLAS BRITELL HABLA DE LA MÚSICA

LA BATALLA DE LOS SEXOS explora una amplia variedad de temas -desde la competencia, al amor, a luchar por la igualdad. Para forjar un conexión emocional y musical entre estas ideas, Faris y Dayton comenzaron una colaboración con el compositor Nicholas Britell, quien fue nominado recientemente al Oscar® por su banda sonora para el filme MOONLIGHT, que no sólo fue poderosa, sino que además redefinió el género.

Con LA BATALLA DE LOS SEXOS, Britell sintió un vínculo inmediato con el material y los directores. "Cuando vi un primer corte del filme, me emocioné de inmediato", recuerda. "[La película] es una historia tan bella y significante que le habla a nuestro mundo en el 2017. No pasó mucho tiempo para darme cuenta de que Jon y Val son unos melómanos apasionados, con una riqueza vasta de conocimiento musical. Cuando compartes esa sintonía con los directores, cualquier cosa es posible. Todos concordamos en que queríamos contar una historia de manera musical, que corriera paralelamente a las imágenes, con una banda sonora que creara su propio paisaje".

Britell, al sumergirse en la composición, se centró en crear dos mundos musicales: el mundo "externo" de los deportes y la competencia de la película, y el mundo "interno" de sus personajes y de sus viajes personales. Además, comenzó a tratar de resolver cómo reflejar el paisaje sonoro de la década de los '70 de una manera fresca y única. "Jon, Val y yo comenzamos a platicar la manera de utilizar instrumentación de bandas de rock de esa década, pero también sentimos que dada la esfera de acción del filme se necesitaba de una orquestación mayor. Comenzamos a utilizar instrumentos de viento de madera y cuerdas, y de inmediato se sintió bien. El terreno musical no es expresamente de los '70, pero sí le rinde homenaje a cómo la música fue grabada en aquella época. Utilizamos micrófonos antiguos para nuestras sesiones de grabación, y jugamos con la calidad y la textura del audio para generar esa sensación de la época".

Britell también comenzó a componer lo que él llama la "arquitectura" de la música para construir una base de temas individuales para Billie Jean y Bobby, una vez que exploró las tensiones entre ellos. "El tema de Bobby es un pequeño ensamble de jazz, con piano, contrabajo, batería e instrumentos de viento de madera sutiles; mi intención era que se sintiera como un brote musical de sus propias inseguridades. Es sobrio de manera intencional, y Jon y Val sintieron que conectaba con ese sentimiento de Bobby".

En contraste, el tema de Billie Jean es más exuberante y poderoso. "Billie Jean tiene un tema muy dinámico y atlético, y mientras que el de Bobby es tocado en un piano vertical viejo, el de Billie Jean es interpretado en un bello piano de gran cola Steinway -que también se convierte en otra metáfora musical para sus personajes".

La historia de amor de Billie Jean con Marilyn reverbera a través de un conjunto evolutivo de colores musicales. "La música de su relación comienza con atmósferas delicadas y una melodía silenciosa. Pero conforme se desarrolla su relación, el fondo musical se fortalece, hasta que finalmente es tocado de manera intensa por una orquesta completa hacia el final del filme", explica Britell.

La música de Britell se escucha como contrapunto al soundtrack de la película, que incluye canciones icónicas tales como "What Is Life", de George Harrison, y "Rocket Man", de Elton John, que nos hace regresar de una manera hermosa a la era de la década de los '70 y se enlaza con un momento especial entre Billie Jean y Marilyn.

Para su beneplácito, Britell tuvo la oportunidad de conducir y grabar la banda sonora con una orquesta de 79 miembros. "Una orquesta de ese tamaño genera un sonido incomparable", comenta. "Fue una experiencia increíble ver cómo estos sonidos que estaban en mi mente cobraban vida a gran escala. Jon y Val también estaban ahí, y fue muy emotivo para todos nosotros escuchar cómo la música confluía de esta manera".

EL CAMBIO DE JUEGO

Conforme LA BATALLA DE LOS SEXOS llega al clímax del partido, Faris y Dayton se comprometieron no sólo a recrear la atmósfera visual del encuentro, sino también del tenis. "Queríamos capturar los estilos de juego específicos de Bobby y Billie Jean. Lornie Kuhle entrenó a Steve durante muchos meses, en los que le mostró los matices del juego de Bobby y le dio una percepción de primera mano de su personalidad", indica Faris. No fue una tarea fácil porque el tenis ha sufrido un cambio radical desde entonces, siendo el actual un juego más atlético, dominado desde la línea de base -el tipo que podrías ver en ESPN en el 2017-, que se ve muy distinto al juego fino de 1973.

"En la actualidad, el juego es totalmente distinto", comenta Billie Jean. "Comparado con los jugadores de hoy en día, no podríamos romper un huevo. Las raquetas eran muy pesadas en aquel entonces -ahora tienen este gran punto óptimo en las ellas y desde un punto de vista aerodinámico son sorprendentes. A los jugadores jóvenes les enseñan una mucho mejor técnica, lo que los vuelve más poderosos. A nosotros nos enseñaron a ser muy estáticos. De igual manera, en aquel entonces se jugaba el 75% de los partidos en pasto. La gente cree que ahora el tenis no es tan elegante y bello, pero la razón por la cual servíamos y voleábamos tanto fue que no queríamos que la pelota pegara en el piso, porque en el pasto botaba y rodaba. Si le pegabas en el aire, tenías más control de la pelota. Y debido a que como hay más dinero invertido en el deporte, los mejores jugadores tienen entrenadores, representantes, terapeutas de masaje, osteópatas y quiroprácticos. En nuestro caso, ni siquiera los entrenadores viajaban con nosotros".

King añade: "Los jugadores de la actualidad están viviendo lo que las 'Nueve' soñábamos con hacer. Y cada vez que una jugadora recibe un cheque por haber ganado o tiene un lugar para jugar, sabemos que ayudamos a que eso diera inicio".

Para hacer que el deporte se apegara a la realidad, dos jugadoras de tenis profesionales del reparto intervinieron como dobles de Emma Stone y Jessica McNamee: Kaitlyn Christian y Lauren Kline. Para jugar de "la manera antigua" -antes de que las canchas cambiaran, el servicio y volea pasara de moda y el juego moderno de poder quedara a cargo- tuvieron que volverse a reentrenar.

Una de las cosas que más le emocionó a Christian fue la oportunidad de jugar con King para poder emularla, que, dice, fue revelador. "Estuve dos horas en la cancha con Billie Jean mientras me enseñaba todos sus pequeños 'ismos' y cómo juega", comenta Christian. "La gran diferencia entre antes y ahora es que las jugadoras solían subir más a la red porque tenían mucho más tiempo. Pero aprendí cosas de la vieja forma de jugar que, de hecho, creo que me ayudarán a mi juego de tenis actual".

También se hizo de una buena idea del plan de juego de King para jugar contra Riggs. "Una gran parte del tenis es percibir la forma en cómo juega tu oponente", explica Christian. "La estrategia de Billie Jean con Bobby fue salir y hacerlo correr como perro por toda la cancha. Y vaya que funcionó. Fue impresionante ver. Estaba jugando al gato y al ratón con él, jugueteando con él -que es la victoria por excelencia".

Ese triunfo, uno de muchos en una cadena que continúa, es lo que mantuvo motivado a todos en el reparto y equipo de producción. El tiempo parecía ser el correcto para contar una historia tanto de acciones intrépidas como de una tolerancia compasiva.

Billie Jean King lo resume: "La Batalla de los Sexos se dio en medio de una ola del movimiento femenino, y siento que ahora estamos en otra ola. Algo está pasando. Cuando jugué contra Bobby Riggs todos pensaron que estaba separando a la gente, pero en realidad sucedió lo contrario, mucha gente se juntó e hizo relaciones. Hubo discusiones y más diálogo, y espero que eso siga sucediendo".

"Nadie que no esté obsesionado cambia al mundo…"

-Billie Jean King

Billie Jean King es la fundadora de la Billie Jean King Leadership Initiative y cofundadora de World Team Tennis. Desde hace mucho tiempo ha sido promotora del cambio social y la igualdad. Durante su legendaria carrera, King realizó grandes avances para hombres y mujeres en los deportes, y continúa dejando su huella en la actualidad.

King fue nombrada una de las '100 estadounidenses más importantes del siglo XX' por la revista Life y, en el 2009, en reconocimiento a su trabajo en el ámbito de la justicia social y sus logros en los deportes, el presidente Obama le otorgó la Presidential Medal of Freedom, que es la distinción civil más importante del país.

Nacida en Long Beach, California, jugó por primera vez al tenis a los once años en los parques públicos del sur de California. King ganó su primero de veinte títulos de Wimbledon (un récord) cuando consiguió el campeonato de dobles femenil con Karen Hantze. A la postre, ganó 39 títulos de Grand Slam en las categorías sencillos, dobles y dobles mixtos durante su carrera. El 20 de septiembre de 1973 les dio poder a las mujeres y educó a los hombres cuando derrotó a Bobby Riggs en uno de los más grandes momentos en la historia del deporte -La Batalla de los Sexos. Este partido es recordado por el efecto que tuvo en la sociedad y por su contribución al movimiento femenil.

En el 2014, en asociación con Teneo, lanzó la Billie Jean King Leadership Initiative para abordar cuestiones de inclusión y diversidad en el lugar de trabajo. En el 2016, se dirigió tanto a la National Football League como a la FIFA (órgano rector internacional del futbol soccer) para hablar de cuestiones relacionadas a la igualdad de género y la inclusión.

En el 2006, sus logros tanto en la cancha como fuera de ella fueron reconocidos cuando la sede del Abierto de los EE. UU. fue renombrada USTA Billie Jean King National Tennis Center. En el 2008, King lanzó su primer libro en más de veinte años. Titulado Pressure is a Privilege, el libro comparte una colección de lecciones de vida que ella ha usado a lo largo de su vida y carrera.

En 1974, King cofundó World Team Tennis (WTT), la revolucionaria liga profesional del tenis. Ahora, en su 42ª temporada y conocida como Mylan World Team Tennis, WTT muestra lo mejor del tenis profesional por equipos, que compiten por el trofeo King.

King continúa su misión de vida para ayudar a los desfavorecidos, de manera más notable a través de sus esfuerzos por brindar mejoras y financiamiento a aquellos infectados, afectados o en riesgo de adquirir VIH/SIDA, a través de su trabajo con la Elton John AIDS Foundation (EJAF). Miembro del concejo directivo de la organización, King ha ayudado a la organización a recabar más de $385 millones de dólares a lo largo de estos últimos 24 años, para apoyar programas dignos en más de 55 países alrededor del mundo.

Desde que fundó la Women's Sports Foundation en 1974, Billie Jean ha encabezado la organización en su misión por mejorar las vidas de niñas y mujeres a través del deporte y la actividad física. Desde su creación, la fundación ha otorgado más de $50 millones de dólares en becas educativas y en efectivo para la participación, investigación y liderazgo avanzados en los deportes y en actividades físicas para niñas y mujeres.

King también forma parte del concejo de la Andy Roddick Foundation y es ex miembro del

President's Council on Fitness, Sports and Nutrition. En febrero de 2014, King fue nombrada, por el presidente Obama, para formar parte de la delegación presidencial de los Juegos Olímpicos que se llevaron a cabo en Sochi, Rusia.

ACERCA DEL REPARTO

Con su impresionante belleza e indiscutible talento, la actriz ganadora del Premio de la Academia® EMMA STONE (Billie Jean King) se ha ganado su lugar como una de las actrices más solicitadas de Hollywood.

Stone apareció más recientemente en LA LA LAND, de Damien Chazelle, para Lionsgate, donde volvió a hacer mancuerna con Ryan Gosling. A la postre, por este trabajo, Stone ganaría el Premio de la Academia a Mejor Actriz, el Premio Screen Actors Guild por Actuación Sobresaliente de una Actriz en un Papel Protagónico, el Globo de Oro a Mejor Actriz - Película Musical o Comedia, el Premio British Academy Film a Mejor Actriz en un Papel Protagónico y el Premio a Mejor Actriz en el Festival de Cine de Venecia. También fue honrada, junto con su coestrella Ryan Gosling, con el premio Intérpretes Sobresalientes del Año en el Festival de Cine de Santa Barbara y el Premio Vanguard del Festival Internacional de Cine de Palm Springs, que compartió con Gosling y Chazelle.

Recientemente, terminó la producción de THE FAVOURITE, de Yorgos Lanthimos, para Fox Searchlight, al lado de Rachel Weisz y Nicholas Hoult. La película narra las maquinaciones políticas tras bambalinas durante el reinado de la Reina Ana, último monarca de la Casa de Estuardo.

Los créditos cinematográficos adicionales de Stone incluyen la aclamada BIRDMAN, para Fox Searchlight, que ganó el premio a Actuación Sobresaliente de un Reparto en una Película en los Premios SAG, Mejor Película en los Premios Independent Spirit, y Mejor Película en los Premios de la Academia. Su actuación le valió una nominación al Premio de la Academia® a Mejor Actriz Secundaria, así como nominaciones al Globo de Oro, SAG e Independent Spirit. También apareció en IRRATIONAL MAN (Un hombre irracional), de Woody Allen; ALOHA (Bajo el mismo cielo), de Cameron Crowe; MAGIC IN THE MOONLIGHT(Magia a la luz de la luna), de Woody Allen; la franquicia del superhéroe THE AMAZING SPIDER-MAN (El sorprendente hombre araña), en la que protagonizó las dos primeras partes; la película animada nominada al Oscar® THE CROODS (Los Croods), para DreamWorks Animation; el drama de época GANGSTER SQUAD (Fuerza antigángster); EASY A (Se dice de mí), que le valió una nominación al Globo de Oro y un Premio MTV Movie a Mejor Actuación Cómica; el premiado drama THE HELP (Historias cruzadas); la comedia romántica CRAZY, STUPID, LOVE (Loco y estúpido amor); FRIENDS WITH BENEFITS (Amigos con beneficios), para Screen Gems; el drama independiente PAPERMAN; la comedia animada MARMADUKE (Ídem), para Twentieth Century Fox; la exitosa comedia ZOMBIELAND (Tierra de zombis), para Columbia Pictures; la comedia romántica GHOSTS OF GIRLFRIENDS PAST (Los fantasmas de mi ex), para Warner Bros.; la exitosa comedia THE HOUSE BUNNY (La casa de las conejitas), para Columbia Pictures/Happy Madison; THE ROCKER (Un rockero de locura), para Twentieth Century Fox, y la comedia SUPERBAD (Súper cool), producida por Judd Apatow.

Stone terminó recientemente su corrida en Broadway, donde interpretó a la icónica Sally Bowles en la producción de Rob Marshall de Cabaret.

Cuando no está en rodaje, Stone es promotora de Stand Up To Cancer (SU2C), una innovadora iniciativa creada para acelerar una investigación pionera contra el cáncer, que le dará terapias nuevas de manera rápida y eficiente a pacientes para salvar sus vidas ahora. Laura Ziskin, la finada productora de THE AMAZING SPIDERMAN, fundó la organización e hizo que Stone se involucrara. Además de SU2C, Stone es también embajadora del Gilda's Club en la ciudad de Nueva York. Nombrada en honor de la fallecida comediante y miembro original del reparto de SNL, Gilda Radner, Gilda's Club ofrece un lugar donde gente que lucha contra el cáncer puede formar parte para generar apoyo social y emocional. Stone se ha convertido en miembro activo de la comunidad de Gilda's Club y continúa en ello, al involucrarse con sus departamentos más recientes para niños y adolescentes.

Oriunda de Arizona, Emma vive actualmente en Los Ángeles.

El actor nominado al Premio de la Academia® STEVE CARELL (Bobby Riggs) se ha establecido como una fuerza multi-talentosa en Hollywood. Después de obtener reconocimiento por sus contribuciones como corresponsal en el programa ganador del Premio Emmy "The Daily Show with Jon Stewart", para Comedy Central, Carell ha hecho la transición de manera exitosa de la pantalla chica hasta alcanzar un estatus protagónico en la pantalla grande, tanto en producciones de gran presupuesto como en películas independientes de autor.

Además, Carell estelarizará la adaptación cinematográfica de la novela LAST FLAG FLYING, del autor Darryl Ponicsan, al lado de Bryan Cranston y Laurence Fishburne. Dirigida por Richard Linklater, los tres interpretan a viejos amigos y oficiales de la marina, que se juntan para ayudar a Larry Meadows (Carell) a traer de regreso a casa el cuerpo de su hijo fallecido, muerto en la guerra de Irak. Amazon Studios estrenará la película el 22 de noviembre de 2017, después de su estreno mundial en el Festival de Cine de Nueva York, este mismo año.

Carell terminó recientemente la producción de BEAUTIFUL BOY para el director Felix van Groeningen. Amazon Studios distribuirá la película, que narra la adicción a las metanfetaminas y recuperación de un joven a través de la perspectiva de su padre, que lo ve luchar contra la enfermedad.

En el 2010, Carell prestó sus talentos vocales para la película animada DESPICABLE ME (Mi villano favorito), en el papel protagónico de Gru. El exitazo internacional trajo consigo una secuela en el 2013, con DESPICABLE ME 2. Después de repetir su papel, Carell regresó para una tercera película este verano, en la que además de haber dado voz a Gru, hizo la de Dru, su hermano gemelo perdido desde hace mucho tiempo, en DESPICABLE ME 3.

En 2016, Carell protagonizó CAFÉ SOCIETY, de Woody Allen, al lado de Blake Lively, Parker Posey, Kristen Stewart, Jesse Eisenberg y Corey Stoll. Allen fungió como director y escritor de la película, producida por Letty Aronson, Steve Tenenbaum y Edward Walson. Carell trabajó previamente con Woody Allen en su película MELINDA AND MELINDA, en el 2004.

En el 2015, Carell protagonizó la película nominada al Premio de la Academia® THE BIG SHORT (La gran apuesta), para Paramount, por la que recibió una nominación al Globo de Oro® por su actuación como Mark Baum, un gestor financiero de la vida real. El filme fue reconocido con un Premio SAG a Mejor Ensamble y un Globo de Oro® a Mejor Película - Comedia o Musical. Previo a ello, Carell actuó al lado de Julianne Moore y Ellen Page en FREEHELD (No sin ella), de Peter Sollett.

En el 2014, Carell interpretó a John du Pont, al lado de Mark Ruffalo, Channing Tatum y Vanessa Redgrave en la película nominada al Oscar® Foxcatcher, de Bennett Miller. Por su reveladora actuación, Carell recibió una nominación al Premio de la Academia® a Mejor Actor, una nominación al Premio Screen Actors Guild en la categoría de Actuación Sobresaliente de un Actor en un Papel Protagónico, una nominación al BAFTA a Mejor Actor Secundario y una nominación al Globo de Oro ® a Mejor Actor en una Película Dramática.

El primer papel protagónico de Carell en una película, The-40-Year-Old Virgin (Virgen a los 40), que coescribió con el director Judd Apatow, se convirtió en un exitazo mundial en taquilla en el 2005. El filme fue honrado con un Premio AFI como una de las "10 Películas más Sobresalientes del Año". La película también le valió a Carell y Apatow una nominación a Mejor Guión Original del WGA.

Carell interpretó el papel protagónico de Maxwell Smart en GET SMART (El súper agente 86), al lado de Anne Hathaway y Alan Arkin, para el director Peter Segal. Carell fue parte del ensamble de la aclamada LITTLE MISS SUNSHINE (Pequeña Miss Sunshine), que obtuvo una nominación al Premio de la Academia® a Mejor Película y ganó un Premio SAG a Actuación Sobresaliente de un Ensamble en una Película. Carell también protagonizó Crazy, Stupid, Love (Loco y estúpido amor), junto a Julianne Moore, Ryan Gosling y Emma Stone, que fue producida por su compañía productora, Carousel Productions.

Créditos cinematográficos adicionales incluyen Seeking a Friend FOR the End of the World (Buscando un amigo para el fin del mundo), al lado de Keira Knightly; Hope Springs (¿Qué voy a hacer con mi marido?), junto a Meryl Streep y Tommy Lee Jones; The Incredible Burt Wonderstone (El increíble Burt Wonderstone), al lado de Jim Carrey y Steve Buscemi; The Way, Way Back (Desde muy muy atrás), junto a Toni Collette y Allison Janney; Alexander and the Terrible, Horrible, No Good, Very Bad Day (Alexander y un día terrible, horrible, malo…¡muy malo!), junto a Jennifer Garner; ANCHORMAN: THE LEGEND OF RON BURGUNDY y Anchorman 2: The Legend Continues (Al diablo con las noticias 1 y 2), al lado de Will Ferrell, Christina Applegate y Paul Rudd. Su trabajo de voz adicional incluye al alcalde de Whoville en Dr. Seuss's Horton Hears A Who! (Horton y el mundo de los quién), junto a Jim Carrey, y a Hammy en OVER THE HEDGE (Vecinos invasores), para DreamWorks y Paramount Pictures.

En la pantalla chica, Carell completó una corrida de ocho años como el pomposo jefe Michael Scott en la comedia nominada al Emmy "The Office", para NBC, que fuera adaptada de la aclamada serie británica homónima de Ricky Gervais. Por el papel, Carell fue nominado para seis Premios Emmy a Mejor Actor Protagónico en una Serie Cómica y ganó un Globo de Oro® a Mejor Actuación de un Actor en una Serie de Televisión - Musical o Comedia. Carell también fue nominado en cuatro ocasiones para un premio SAG, y ganó dos, como parte del ensamble del programa.

En el 2016, Carell y su esposa Nancy estrenaron dos temporadas de la serie policiaca cómica que crearon, ANGIE TRIBECA, protagonizada por Rashida Jones, para TBS. Carell funge como productor ejecutivo, escritor y director del programa, que es producido bajo los auspicios de Carousel Productions. ANGIE TRIBECA estrenó su tercera temporada el 10 de abril de 2017.

Nacido en Massachusetts, Carell vive en Los Ángeles con su esposa, la actriz Nancy Carell ("Saturday Night Live"). Es un orgulloso padre de una niña y un niño.

Las películas venideras de ANDREA RISEBOROUGH (Marilyn Barnett) incluyen THE DEATH OF STALIN, de Armando Iannucci, y BURDEN, de Andrew Heckler. En la primera, interpreta a Svetlana Stalin, al lado de Rupert Friend, Steve Buscemi, Jeffrey Tambor, Jason Isaacs y Olga Kurylenko. La última está basada en la historia real de Mike Burden, un huérfano criado dentro del Ku Klux Klan, que escapa de la organización cuando la mujer de la que se enamora lo exhorta a hacerlo. Riseborough actúa junto a Garrett Hedlund y Forest Whitaker.

En la actualidad, Riseborough se encuentra en la producción de la serie limitada de seis partes "Waco", junto a Taylor Kitsch, Michael Shannon, John Leguizamo y Melissa Benoist. La serie está basada en la historia verdadera del enfrentamiento de 51 días que comenzó cuando el FBI y la ATF se apostaron a las afueras de las instalaciones de la filial davidiana del líder religioso David Koresh en Waco, Texas, en la primavera de 1993.

Riseborough terminó recientemente la producción de NANCY, de Christina Choe, en la que también fungió como productora. En la película actúa al lado de Steve Buscemi, Ann Dowd y John Leguizamo, que narra la historia de un impostor en serie cuyas mentiras intrincadas se aclaran de manera inevitable.

Riseborough recién interpretó a Alessia en NOCTURNAL ANIMALS (Animales nocturnos), de Tom Ford, junto a Amy Adams, Jake Gyllenhaal, Michael Shannon, Aaron Taylor-Johnson, Isla Fisher y Armie Hammer, para Focus Features.

En televisión, Riseborough protagonizó recientemente la miniserie de cuatro partes "National Treasure", al lado de Robbie Coltrane y Julie Waters, para Hulu. Escrita por el guionista ganador del BAFTA® Jack Thorne, el drama encargado por Channel 4 examina el impacto de las acusaciones sexuales en contra de una figura pública muy querida. Riseborough también puede ser vista en el aclamado drama "Bloodline", para Netflix. Riseborough hace una entrada inolvidable en la segunda temporada, que sacude a toda la familia. También apareció en el telefilme "The Witness for the Prosecution", de Julian Jarrold, basada en la obra homónima de Agatha Christie.

Riseborough compartió con sus compañeros actores de BIRDMAN, dirigida por Alejandro González Iñárritu, el Premio Screen Actors Guild a Actuación Sobresaliente por un Reparto en una Película. La película ganó cuatro Premios de la Academia, incluyendo el de Mejor Película.

Al crecer en el centro turístico costero de Whitley Bay, en el Reino Unido, escribió y creó sus propios mundos. A los nueve años, su profesor de teatro la recomendó para una audición en el teatro del pueblo (hogar de la Royal Shakespeare Company en Newcastle), y fue ahí donde hizo su primera presentación en público.

Mientras estudiaba en la Royal Academy of the Dramatic Arts (RADA), comenzó a tomar papeles por fuera en telefilmes y producciones teatrales. Después de dejar RADA, protagonizó la obra ganadora del Premio Oppenheimer A Brief History of Helen of Troy en el teatro Soho, dirigida por Gordon Anderson, y fue nominada a Mejor Actriz Novel en los Premios Theatre Goers' Choice, en el 2005. El primer papel cinematográfico de la Srita. Riseborough fue en VENUS (2006), de Roger Michell, protagonizada por su buena amiga Jodie Whittaker y Peter O'Toole.

Protagonizó durante seis meses la obra Burn, original de Deborah Gearing¸ Chatroom, original de Enda Walsh, y Citizenship, original de Mark Ravenhill, todas dirigidas por Anna Mackmin en el National Theatre. Fue reconocida con el Premio Ian Charleson por su actuación en la puesta en escena de Measure for Measure, de Peter Hall, con la Royal Shakespeare Company.

La Srita. Riseborough se embarcó en su primer papel protagónico en una serie de televisión con "Party Animals", al lado de Matt Smith, Raquel Cassidy y Andrew Buchan.

Mike Leigh le ofreció un lugar en la compañía de su filme HAPPY-GO-LUCKY (La dulce vida). Hizo la película y después protagonizó la producción del Royal Court Theatre de The Pain and the Itch, de Bruce Norris, por la que fue nominada a Mejor Actriz Secundaria en los Premios Theatre Goers' Choice, en el 2007.

La Srita. Riseborough después interpretó a Margaret Thatcher en el telefilme "Margaret Thatcher - The Long Walk to Finchley", dirigido por Niall McCormick, por el que recibió una nominación al Premio BAFTA; protagonizó el cortometraje LOVE YOU MORE, dirigido por Sam Taylor-Johnson y escrito por Patrick Marber; estelarizó la película independiente MAD SAD & BAD, de Avie Luthra; e interpretó el papel protagónico en la miniserie "The Devil's Whore", acerca de la guerra civil inglesa del siglo XVII, dirigida por Marc Munden.

En escena, protagonizó A Couple of Poor, Polish-Speaking Romanians, de Dorota Maslowska, en el teatro Soho; y la producción del Donmar Warehouse de Ivanov, al lado de Kenneth Branagh y Tom Hiddleston. Hizo su debut en los EE. UU. en The Pride, original de Alexi Kaye Campbell, dirigida por Joe Mantello.

Entre sus largometrajes se encuentran NEVER LET ME GO (Nunca me abandones), de Mark Romanek; MADE IN DAGENHAM, de Nigel Cole; BRIGHTON ROCK, de Rowan Joffe; W.E., de Madonna, en el papel de Wallis Simpson; RESISTANCE, de Amit Gupta; DISCONNECT, de Henry Alex Rubin; OBLIVION (Oblivion: El tiempo del olvido), de Joseph Kosinski, junto a Tom Cruise; WELCOME TO THE PUNCH, de Eran Creevy; THE SILENT STORM, de Corinna McFarlane; HIDDEN, de los hermanos Duffer, y SHADOW DANCER, de James Marsh, junto a Clive Owen, por la que la Srita. Riseborough ganó el Premio British Independent Film (BIFA), el Premio Evening Standard British Film, y el Premio London Critics' Circle Film (Círculo de críticos de cine de Londres) a Mejor Actriz.

La ganadora de dos Premios Emmy SARAH SILVERMAN (Gladys Heldman) es uno de los talentos más versátiles en el entretenimiento, con créditos que incluyen los de actriz, creadora, escritora, productora ejecutiva, comediante y autora. Silverman está trabajando en un programa de actualidad semanal de media hora titulado "I Love You, America", para Hulu, que la verá buscando conectarse con gente que quizás y no esté de acuerdo con sus opiniones, a través de la honestidad, el humor, el genuino interés en otros y sin tomarse demasiado en serio. Silverman también continúa prestando su voz a la serie animada nominada al Emmy "Bob's Burgers", para Fox, y es parte de JASH, un colectivo de comedia en YouTube, que presenta contenido original de Silverman y de sus amigos Michael Cera, Tim & Eric, y Reggie Watts.

En escena, Silverman continúa cimentando su estatus como una fuerza en la comedia de centros nocturnos. En mayo de 2017, lanzó su especial de comedia más reciente, "A Speck of Dust", en Netflix, ante elogios de la crítica. En el 2013, estrenó su especial de comedia de una hora "Sarah Silverman: We Are Miracles", para HBO, que le valió el Premio Emmy de horario estelar a Mejor Escritura para un Especial de Variedades, en el 2014. Ese año, el especial recibió una nominación adicional al Emmy de horario estelar a Especial de Variedades Sobresaliente, además de una nominación de los premios Writers Guild (Sindicato de escritores). En septiembre de 2014, Silverman lanzó el especial como un álbum, a través de Sub Pop Records, que a la postre recibiría una nominación al Premio Grammy a Mejor Álbum de Comedia, en el 2015. Previo a ello, Silverman causó un revuelo impresionante con su concierto/película cómica SARAH SILVERMAN: JESUS IS MAGIC, que llamó mucho la atención en el Festival de Cine de Toronto.

En el mundo del cine, Silverman fue vista más recientemente como la estrella de I SMILE BACK, la adaptación cinematográfica de la novela de Amy Koppelman. El drama se estrenó en el 2015 en el Festival de Cine de Sundance ante elogios de la crítica y fue más tarde estrenado en cines por Broad Green Pictures. Silverman recibió grandes elogios por su papel como Laney Brooks, que culminó con una nominación del Screen Actors Guild a Actuación Sobresaliente de una Actriz en un Papel Protagónico, en el 2016. Sus créditos cinematográficos adicionales incluyen: THE BOOK OF HENRY, POPSTAR: NEVER STOP NEVER STOPPING, ASHBY, A MILLION WAYS TO DIE IN THE WEST (Pueblo chico, pistola grande), TAKE THIS WALTZ, GRAVY, PEEP WORLD, I WANT SOMEONE TO EAT CHEESE WITH, SCHOOL OF ROCK (Escuela de rock), THERE'S SOMETHING ABOUT MARY (Loco por Mary) y THE WAY OF THE GUN. Silverman también prestó su voz al papel de Vanellope en el exitazo nominado al Oscar WRECK IT RALPH (Ralph, el demoledor). Regresará al papel para la muy esperada secuela, que se encuentra actualmente en preproducción.

En el 2010, lanzó su primer libro, una memoria titulada The Bedwetter: Stories of Courage, Redemption, and Pee. A la postre, el libro se convertiría en un best-seller del New York Times.

En el 2009, Silverman fue nominada para un Premio Emmy de horario estelar a Actriz Protagónica Sobresaliente en una Serie Cómica por su interpretación de una versión dramatizada de ella misma en su serie "The Sarah Silverman Program", para Comedy Central. Esta nominación al Emmy fue la primera de Comedy Central en su historia en una categoría de actuación escrita. Silverman también recibió una nominación al premio del Writers Guild por su trabajo en el programa. En el 2008, Silverman ganó un Premio Emmy de horario estelar a Música y Letra Originales Sobresalientes por su colaboración musical con Matt Damon. Además, fue honrada con un Premio Webby a Mejor Actriz por su video en línea "The Great Schlep", en el que persuadió a chicos jóvenes a alentar a sus abuelos en Florida a votar por el presidente Obama antes de la elección presidencial del 2008.

Silverman ha hecho memorables apariciones como actriz invitada en una serie de aclamados y notables programas de televisión, incluyendo Monk, que le valió en el 2008 una nominación al Premio Emmy de horario estelar a Actriz Invitada Sobresaliente en una Serie Cómica. Su trabajo adicional en televisión incluye papeles muy comentados en Masters of Sex, The Good Wife, The Larry Sanders Show, Seinfeld y Mr. Show with Bob and David. Silverman también ha sido conductora de una serie de importantes programas de ceremonias de premiación, incluyendo los Premios MTV Movies, en el 2007, y los Premios Independent Spirit.

Silverman creció en Nuevo Hampshire y estudió un año en la Universidad de Nueva York. En 1993, se unió a Saturday Night Live como escritora y miembro del reparto, y desde entonces no ha dejado de trabajar.

En la actualidad, vive en Los Ángeles.

BILL PULLMAN (Jack Kramer) estelariza el thriller psicológico "The Sinner", para USA Network, en el papel del detective Harry Ambrose, un investigador sensible y terco, que queda perturbado y singularmente fascinado por Cora Turner (Jessica Biel), una ama de casa ordinaria que, de manera impulsiva y muy pública, comete un crimen violento. Convencido de que los hechos elementales del caso ocultan algo mucho más importante, Ambrose comienza a investigar la vida de Cora.

En 1983, Pullman comenzó a actuar de manera profesional en el New York Theater, y poco tiempo después comenzó una carrera en cine que, hasta la fecha, abarca más de 70 largometrajes y varias series de televisión. En los últimos quince años, Pullman ha actuado en seis producciones teatrales de renombre en la ciudad de Nueva York y ha sido nominado a mejor actor en cuatro ocasiones.

La carrea cinematográfica de Pullman incluye las comedias taquilleras RUTHLESS PEOPLE, SPACEBALLS (La loca historia de las galaxias), SLEEPLESS IN SEATTLE (Sintonía de amor), WHILE YOU WERE SLEEPING (Mientras dormías), CASPER (Casper, El fantasmita amigable) y BOTTLE SHOCK, y los dramas THE SERPENT AND THE RAINBOW (La serpiente y el arcoíris), THE ACCIDENTAL TOURIST (Un tropiezo llamado amor) e IGBY GOES DOWN (Las locuras de Igby). También es conocido por su papel como el presidente de la nación en la franquicia de acción INDEPENDENCE DAY (Día de la independencia) y por roles en el thriller MALICE (Malicia) y los westerns THE VIRGINIAN y WYATT EARP. Para no dejar ningún género fuera de su currículo, Pullman fue protagonista de las películas con tintes de cine negro THE LAST SEDUCTION, LOST HIGHWAY (Por el lado oscuro del camino), THE ZERO EFFECT y SURVEILLANCE, así como de la película de terror THE GRUDGE (La maldición). En televisión, apareció en "Revelations", "Torchwood" y "1600 Penn".

Más recientemente, Pullman fue visto en INDEPENDENCE DAY: RESURGENCE y BROTHER NATURE, al lado de Taran Killam y Bobby Moynihan, así como en LBJ, con Woody Harrelson. También a ser estrenada está "Trouble", con Angelica Houston. Además de "The Sinner", Pullman se encuentra rodando en la actualidad "The Ballad of Lefty Brown", junto a Tommy Flanagan y Peter Fonda.

ALAN CUMMING (Cuthbert "Ted" Tinling) estudió en la Royal Scottish Academy of Music and Drama (Academia Real Escocesa de Música y Teatro), ahora el Royal Conservatoire of Scotland (Conservatorio Real de Escocia). Después de haber dejado la Academia, no pasó mucho tiempo para que fuera distinguido en su tierra natal tanto por su trabajo en televisión (incluyendo la telenovela escocesa "Take The High Road") como por su trabajo como comediante de centros nocturnos (el legendario 'Victor and Barry', que escribió e interpretó con Forbes Masson, compañero suyo de la escuela de teatro). Pero fue el teatro lo que le dio su más grande oportunidad cuando apareció en Conquest of the South Pole, original de Manfred Karge, en el teatro Traverse de Edimburgo. La obra se trasladó al Royal Court en el West End de Londres, y Cumming fue nominado al Premio Olivier a Novato más Prometedor.

A la postre, Cumming trabajaría con la Royal Shakespeare Company y el Royal National Theatre, donde ganó un Premio Olivier por su actuación en Accidental Death Of An Anarchist, de Dario Fo. Para el National Theatre Studio dirigió Bonjour La, Bonjour, original de Michel Tremblay, e interpretó a Romeo en Romeo and Juliet. Fue nominado para Premios Olivier por La Bête y Cabaret, y por su sensacional Hamlet en el Donmar Warehouse, en Londres, obtuvo un Premio TMA a Mejor Actor y una nominación al Shakespeare Globe.

Hizo su debut cinematográfico en PRAGUE, de Ian Stellar, al lado de Bruno Ganz y Sandrine Bonnaire, que se estrenó en el Festival de Cine de Cannes en 1992. Su presentación a las audiencias estadounidenses vino con CIRCLE OF FRIENDS, seguida al poco tiempo de GOLDENEYE (007: Goldeneye) y EMMA. Su primera película filmada en Hollywood fue ROMY AND MICHELE'S HIGH SCHOOL REUNION, y desde entonces ha alternado entre grandes éxitos taquilleros, tales como X2:X MEN UNITED y la trilogía de SPY KIDS (Mini espías), y pequeñas películas independientes, como TITUS (al lado de Anthony Hopkins y Jessica Lange) y SWEET LAND (que también produjo). Con Jennifer Jason Leigh escribió, produjo, dirigió y actuó en THE ANNIVERSARY PARTY, que les valió un premio del National Board of Review y dos nominaciones al Independent Spirit. Más recientemente, apareció en STRANGE MAGIC, basada en una historia de George Lucas, y ANY DAY NOW, de Travis Fine, por la que obtuvo grandes elogios y numerosos premios a Mejor Actor por todo el mundo. En el 2015, protagonizó "After Louie".

En 1998, Cabaret se estrenó en Broadway y la impresionante actuación de Cumming como el maestro de ceremonias le valió los premios Tony, Drama Desk, Outer Critics' Circle, NY Press, Theater World, FANY y New York Public Advocate's.

Sigue trabajando en Broadway en The Threepenny Opera, al lado de Cyndi Lauper, y en Design For Living, original de Noel Coward, mientras que fuera-de-Broadway en Elle, de Jean Genet (que también adaptó) yThe Seagull (La gaviota), junto a Dianne Wiest. En el 2006, regresó a escenarios británicos con la producción del West End de Bent, de Martin Sherman, seguida muy poco tiempo después por la producción del National Theatre of Scotland (Teatro Nacional de Escocia) de The Bacchae, original de Eurípides, que inauguró en el 2007 el Festival Internacional de Edimburgo y estuvo de gira por Escocia, antes de haberse trasladado a Londres y Nueva York. Su siguiente colaboración con el NTS y el director John Tiffany fue una reinvención radical de Macbeth, que se estrenó en el Tramway en Glasgow, en el 2012. Al año siguiente, su actuación magistral en esta obra arrasó Broadway. Cumming regresó a Broadway con Studio 54 y una vez más con Cabaret, del 2014 al 2015, en la que recreó su ahora legendaria actuación como Sally Bowles, al lado de Michelle Williams, Emma Stone y Sienna Miller.

Sus múltiples apariciones en televisión incluyen los programas "Sex and the City", "Frasier", "The L Word", "Web Therapy" y "Tin Man". Interpretó a Eli Gold durante siete temporadas en la serie "The Good Wife", para CBS, por la que recibió múltiples nominaciones a los premios Globo de Oro, Emmy, SAG, Critics' Circle y Satellite. También es el conductor de "Masterpiece Mystery", para PBS. En Inglaterra, escribió y protagonizó la comedia de culto "The High Life", así como muchos otros filmes para la BBC, incluyendo BERNARD AND THE GENIE, por el que obtuvo un Premio British Comedy.

En el 2015, estrenó su espectáculo de cabaré Alan Cumming Sings Sappy Songs en el legendario Cafe Carlyle en la ciudad de Nueva York. El espectáculo fue descrito por el New York Times como una 'tormenta de fuego emocional' y desde entonces ha estado de gira por todo Estados Unidos, Canadá, Australia, Inglaterra, además de haber sido el éxito del Festival Internacional de Edimburgo, en el 2016 -un motivo particular de orgullo para Cumming, ya que fue aquí donde se presentó por primera vez en cabaré, con 'Victor and Barry', ¡32 años atrás! El espectáculo fue grabado para un especial de la PBS y un álbum en directo homónimo fue lanzado en febrero de 2016, para coincidir con su debut ante localidades agotadas en el Carnegie Hall de la ciudad de Nueva York.

Como autor, Cumming hizo su debut con una novela, Tommy's Tale, y en el 2014 lanzó sus memorias, Not My Father's Son, que se convirtió en el best-seller #1 del New York Times, además de haber recibido el Premio Slightly Foxed a la Mejor Primera Biografía, dos premios Audible, un premio Audie y una nominación al Premio Lambda Literary. En el 2016, Rizzoli publicó su libro de historias y fotografías You Gotta Get Bigger Dreams, y en el 2017 su libro infantil animado The Adventures of Honey and Leon, una colaboración con su marido, el ilustrador Grant Shadder, será publicado.

El activismo y pasión de Cumming por varias causas de derechos civiles y educación sexual le han valido múltiples premios humanitarios por parte de AMFAR, Human Rights Campaign, la Matthew Shepard Foundation, GLAAD y el Trevor Project, por nombrar unos cuantos.

Vive en la ciudad de Nueva York y en Edimburgo con su marido, Grant Shaffer, y sus dos perros, Jerry y Lala.

ELISABETH SHUE (Priscilla Riggs) ha tenido una extensa carrera cinematográfica que incluye una nominación al Premio de la Academia por su actuación como una prostituta que se relaciona con un alcohólico suicida en LEAVING LAS VEGAS (Adiós a Las Vegas), de Mike Figgis. Su actuación al lado de Nicolas Cage también le valió un premio a Mejor Actriz en los Premios Independent Spirit, de la Los Angeles Film Critics Association (Asociación de Críticos de Cine de Los Ángeles), la Chicago Film Critics Association (Asociación de Críticos de Cine de Chicago), la Dallas-Fort Worth Film Critics Association (Asociación de Críticos de Cine de Dallas-Forth Worth) y la National Society of Film Critics (Sociedad Nacional de Críticos de Cine), además de nominaciones del New York Film Critics Circle (Círculo de Críticos de Cine de Nueva York), los Globos de Oro® y el Screen Actors Guild® (Sindicato de actores de cine).

Más recientemente, Shue coprotagonizó los filmes HOUSE AT THE END OF THE STREET,al lado de Jennifer Lawrence; CHASING MAVERICKS, dirigida por Michael Apted y Curtis Hanson, y protagonizada por Gerard Butler, Jonny Weston y Abigail Spencer; HOPE SPRINGS, del director David Frankel; y BEHAVING BADLY, con Nat Wolff.

Los otros créditos cinematográficos de Shue incluyen JANIE JONES, de David M. Rosenthal, con Abigail Breslin; HAMLET 2, al lado de Catherine Keener y Steve Coogan; GRACIE (que Shue coprodujo), de Davis Guggenheim; HIDE & SEEK (Mente siniestra), junto a Dakota Fanning y Robert De Niro; MYSTERIOUS SKIN (Piel misteriosa), de Gregg Araki, con Joseph Gordon Levitt; AMY AND ISABELLE, producida por Oprah Winfrey; HOLLOW MAN (El hombre sin sombra), con Josh Brolin y Kevin Bacon; DECONSTRUCTING HARRY (Los enredos de Harry), de Woody Allen; THE SAINT (El santo), de Phillip Noyce; así como algunos de sus primeros proyectos, como THE KARATE KID (El karate kid); ADVENTURES IN BABYSITTING (Una noche por la ciudad); COCKTAIL (coctel); BACK TO THE FUTURE PARTS I AND II (Volver al Futuro 1 y 2) y SOAPDISH.

Los créditos teatrales de Shue incluyen haber protagonizado "Some Americans Abroad", original de Richard Nelson, en Broadway, así como el reestreno fuera-de-Broadway de "Burn This", de Lanford Wilson, al lado de Peter Sarsgaard, Ty Burrell y Dallas Roberts.

Es una ávida jugadora de tenis y en la actualidad vive en Los Ángeles con su marido, el director Davis Guggenheim, y sus tres hijos.

Después de papeles secundarios en BRIDGE OF SPIES (Puente de espías), drama nominado al Oscar del director Steven Spielberg, en el 2015, y WHIPLASH (Whiplash: Música y obsesión), película nominada al Oscar y ganadora del Gran Premio del Jurado y del Premio del Público en el Festival de Cine Sundance, en el 2014, la prometedora estrella AUSTIN STOWELL (Larry King) tiene varias películas en el horizonte.

Entre sus proyectos venideros se encuentran STRATTON, donde interpreta a LT. Hank Monroe, un heroico y curtido miembro de las Fuerzas de Operaciones Especiales de la Marina de EE. UU. (Navy SEALS) que combate un ataque terrorista internacional; HIGHER POWER, el largometraje de ciencia ficción de múltiples plataformas donde hacen mancuerna el productor de TRANSFORMERS Lorenzo di Bonavenutra y Defy Media; y HORSE SOLDIERS, al lado de Chris Hemsworth, Michael Shannon y Michael Pena, que es un drama basado en el libro de no ficción de Doug Stanton, adaptado por Peter Craig y Ted Tally. Esta última trata de un equipo de las Fuerzas Especiales de los EE. UU. y su capitán inexperimentado que son enviados a una región violenta de Afganistán semanas después del 9 de septiembre. Jerry Bruckheimer Films y Black Label Media están produciendo, mientras que Lionsgate se encargará de la distribución.

Más recientemente, Stowell fue visto en COLOSSAL (Ella es un monstruo), al lado de Anne Hathaway. La película fue escrita y dirigida por Nacho Vigalondo (escritor y director de TIMECRIMES), para Brightlight Pictures, y se estrenó en el Festival de Cine de Toronto. Stowell también fue visto en IN DUBIOUS BATTLE, adaptación cinematográfica de la novela homónima de John Steinbeck, de 1936, dirigida por James Franco, y coprotagonizada por Robert Duvall, Vincent D'Onofrio, Ed Harris y Bryan Cranston.

Entre sus créditos pasados se encuentran PUBLIC MORALS, escrita/dirigida y protagonizada por Ed Burns, en la que Spielberg fungió como productor ejecutivo; BEHIND THE CANDELABRA, de Steven Soderbergh, película premiada de HBO basada en la vida del famoso pianista Liberace, interpretado por Michael Douglas; las exitosas películas familiares DOLPHIN TALE 1 & 2 (Winter - El delfín), junto a Morgan Freeman, Harry Connick Jr. y Ashley Judd, para Warner Bros.; BEHAVING BADLY, al lado de Selena Gomez; y LOVE AND HONOR, junto a Liam Hemsworth.
Su presentación en Hollywood vino en el papel de 'Jesse' en "Secret Life of The American Teenager". Lo que comenzó como una breve participación en un episodio se convirtió en un arco de diecisiete capítulos, que abarcó dos temporadas en la exitosa serie para ABC Family.

Al haber crecido en Connecticut, Stowell fue un atleta competitivo. Después de que una lesión en el hombro lo marginó, acordó actuar en una producción teatral local y fue ahí que descubrió su pasión por la actuación. Un reclutador colegial en la audiencia le ofreció una beca total en el Departamento de Artes Dramáticas de la Universidad de Connecticut. Poco tiempo después de haberse graduado, Stowell se mudó a Los Ángeles, donde vive en la actualidad.

NATALIE MORALES (Rosie Casals) es una actriz, escritora, directora y narradora en todos los sentidos.

Detrás de cámaras, Morales grabó videos musicales para artistas independientes tales como Holly Miranda y Andrew Byrd.

Morales más recientemente protagonizó la comedia "The Grinder", para Fox, así como la comedia "Trophy Wife", para ABC. También dirigió y estelarizó junto con Michaela Watkins, Martin Starr y Paget Brewster la serie "James Joyce's Love Letters", para Funny or Die.

Morales también ha tenido papeles recurrentes en la premiada serie "Newsroom", creada por Aaron Sorkin para HBO, así como en "Girls", para HBO, y "Parks & Rec", para NBC. Tuvo un papel periódico en la exitosa serie "White Collar", para USA Network, y en la serie "The Middleman", para ABC Family.

Morales fue vista más recientemente en "Santa Clarita Diet", para Netflix, y en "Powerless", para NBC. Entre sus papeles venideros se encuentran un papel protagónico en "Losing It", para ABC, además de papeles en "Crashing", para HBO, "Making History", para FOX, y "BoJack Horseman", para Netflix.

Los créditos cinematográficos de Morales incluyen haber interpretado a la mejor amiga de Drew Barrymore en GOING THE DISTANCE (Amor a distancia), y fue elegida personalmente por Oliver Stone para un papel en WALL STREET 2: MONEY NEVER SLEEPS.

ACERCA DE LOS REALIZADORES

VALERIE FARIS y JONATHAN DAYTON (Dirigida por) hicieron su debut como directores de cine con el éxito comercial y entre la crítica LITTLE MISS SUNSHINE (Pequeña Miss Sunshine), que fue nominada para cuatro Premios de la Academia®, incluyendo Mejor Película. A ésta le siguió RUBY SPARKS (Ruby, la chica de mis sueños), protagonizada por Zoe Kazan y Paul Dano.

El equipo de casados comenzó su carrera dirigiendo el programa documental musical "The Cutting Edge", para MTV, que fue revolucionario en su momento. Han dirigido premiados videos y documentales para numerosos artistas, y han ganado dos Premios Grammy y nueve Premios MTV Music Video.

Cofundaron Bob Industries, una compañía productora de comerciales, a través de la cual han dirigido comerciales de televisión para Apple, AT&T, Sony, NBA y ESPN, entre otros.

Esta es la tercera colaboración de SIMON BEAUFOY (Escrita por) con el productor Christian Colson y Danny Boyle. Como una parte del trío, escribió el guión de SLUMDOG MILLIONAIRE (Quisiera ser millonario), el de 127 HOURS (127 horas), junto con Danny, y LA BATALLA DE LOS SEXOS.

Beaufoy comenzó su carrea como guionista con THE FULL MONTY (Todo o nada), por la que fue nominado para un Premio de la Academia, y ha escrito y colaborado en muchos guiones en el ínter, incluyendo AMONG GIANTS, SALMON FISHING IN THE YEMEN, THIS IS NOT A LOVE SONG, MISS PETTIGREW LIVES FOR A DAY y EVEREST.

De nueva cuenta está colaborando con Danny y Christian en "Trust", una serie de televisión de diez partes, para FX, acerca del secuestro de John Paul Getty tercero, que se está filmando actualmente en Italia.

CHRISTIAN COLSON, p.g.a. (Producida por) es el productor ganador del Premio de la Academia® de SLUMDOG MILLIONAIRE. También produjo 127 HOURS, de Danny Boyle, por la que recibió una nominación al Premio de la Academia® a Mejor Película, y el drama de derechos civiles SELMA, por la que también recibió una nominación al Premio de la Academia® en la misma categoría. Otros créditos como productor incluyen STEVE JOBS yT2: TRAINSPOTTING,ambas deBoyle, y THE DESCENT (El descenso), de Neil Marshall.

La Ceremonia de Apertura de DANNY BOYLE, p.g.a. (Producida por) para los Juegos Olímpicos de Londres en el 2012 impresionó tanto a críticos como a audiencias de todo el mundo.

En el 2009, Boyle ganó el Premio de la Academia® a Mejor Director por SLUMDOG MILLIONAIRE. La película obtuvo ocho Premios Oscar® en total, incluyendo el de Mejor Película, y más de 100 premios dentro de la industria. La siguiente película de Boyle, 127 HOURS, fue protagonizada por James Franco y fue nominada para seis Premios de la Academia®, incluyendo el de Mejor Película, así como para nueve Premios BAFTA.

Los primeros dos largometrajes de Boyle con el guionista John Hodge, SHALLOW GRAVE (Tumba al ras de la tierra) y TRAINSPOTTING (La vida en el abismo), recibieron dos premios BAFTA y una nominación al Oscar. TRAINSPOTTING sigue siendo una de las películas británicas independientes más queridas y de las que más dinero ha recabado en taquilla de todos los tiempos. En el 2017, su secuela, T2: TRAINSPOTTING, fue estrenada ante elogios de la crítica.

Además, Boyle ha dirigido los largometrajes 28 DAYS LATER (Exterminio), MILLIONS, THE BEACH (La playa), A LIFE LESS ORDINARY (Vidas sin reglas), ALIEN LOVE TRIANGLE y SUNSHINE (Sunshine: Alerta solar). De igual manera, ha dirigido proyectos muy aclamados en televisión y teatro, incluyendo Frankenstein en el Royal National Theatre, en el 2011.

A la postre, Boyle dirigió TRANCE (En trance), protagonizada por James McAvoy en el 2013, y la serie "Babylon" en el 2014, para Channel 4. El 2015 vio a Michael Fassbender y Kate Winslet recibir increíbles elogios de la crítica y premios por STEVE JOBS, escrita por Aaron Sorkin y dirigida por Boyle. Kate Winslet ganó el BAFTA a Mejor Actriz Secundaria, entre muchas nominaciones y galardones más para la película.

ROBERT GRAF, p.g.a. (Producida por) es un productor radicado en Los Ángeles cuyo currículo incluye más de 30 películas a lo largo de más de 25 años.

Graf ha disfrutado de una prolongada asociación con los hermanos Coen, que se remonta a FARGO(Fargo, Secuestro involuntario) en 1995 cuando fungió como gerente de locaciones. Desde entonces, ha hecho la transición a una función como productor en todas sus películas, que dio inicio con NO COUNTRY FOR OLD MEN(Sin lugar para los débiles) - con créditos que también incluyen TRUE GRIT (Temple de acero), INSIDE LLEWYN DAVIS (Balada de un hombre común), HAIL, CAESAR!(¡Salve, César!) y el actual proyecto western THE BALLAD OF BUSTER SGRUGGS.

Desde el 2011, Graf ha trabajado con Dayton y Faris, directores de LA BATALLA DE LOS SEXOS, para quienes produjo su reciente programa piloto "Highston", para Amazon, y su película anterior, RUBY SPARKS, paraFox Searchlight.

Un aficionado al tenis a lo largo de su infancia, Graf vio la Batalla de los Sexos original en la cocina de su casa en Minnesota, donde él y su familia apoyaron a Billie Jean. Más tarde, se convirtió en capitán de uno de los peores equipos de tenis de preparatoria en la historia.

LINUS SANDGREN, F.S.F., (Director de Fotografía)es un cinefotógrafo sueco. Sandgren ganó más recientemente el Oscar a Mejor Fotografía por su trabajo en LA LA LAND. También trabajó en JOY (Joy: El nombre del éxito), su segundo filme con David O Russell, habiendo trabajado con él por primera vez en AMERICAN HUSTLE (Escándalo americano). También ha colaborado con los aclamados directores Gus Van Sant en PROMISED LAND, y Lasse Hallström en THE HUNDRED FOOT JOURNEY (Un viaje de diez metros).

Sandgren estudió en la Escuela de Cine de Estocolmo. Cuando no está trabajando en películas y comerciales, se ha dedicado a desarrollar una carrera como fotógrafo de videos musicales, cortometrajes y comerciales, que fue lo que lo introdujo al mercado internacional.

En el 2005, obtuvo el Premio Swedish Guldbagge por su ópera prima Storm, y, desde entonces, por su trabajo en comerciales ha sido galardonados con múltiples premios, incluyendo el León de Cannes y el Clio.

JUDY BECKER (Diseñadora de Producción), oriunda de Nueva York, comenzó su carrera cinematográfica en la fértil comunidad de cine independiente de Nueva York. Comenzó como asistente de producción del departamento de arte, de donde escaló puestos hasta alcanzar el de diseñadora de producción.

Esta es su segunda colaboración con Jonathan Dayton y Valerie Faris, después de la aclamada RUBY SPARKS.

Becker también es una colaboradora frecuente de David O. Russell y Todd Haynes. AMERICAN HUSTLE, por la que Becker recibió nominaciones al Oscar y al BAFTA, es una de sus cuatro colaboraciones con David O. Russell, entre las que se encuentran THE FIGHTER (El peleador), SILVER LININGS PLAYBOOK (Los juegos del destino) y JOY. CAROL, por la que recibió una nominación al BAFTA, fue su segunda colaboración con Todd Haynes; también le diseñó la aclamada historia I'M NOT THERE (Mi historia sin mí), acerca de la vida de Bob Dylan.

En el 2016, Becker hizo su primera incursión en series de televisión con la aclamada serie limitada de Ryan Murphy "FEUD: Bette and Joan". Continuó su trabajo con Murphy en la segunda temporada de "American Crime Story", titulada "Versace/Cunanan", y hará el programa piloto para la venidera "Pose", basado en el premiado documental "Paris is Burning". La primera experiencia en televisión de Becker fue diseñando el programa piloto de "Girls", de Lena Dunham, por la que recibió un Premio del Art Directors Guild (Sindicato de Directores de Arte).

Becker ha trabajado con muchos otros directores aclamados, incluyendo Ang Lee [BROKEBACK MOUNTAIN (Secreto en la montaña)]; Lynne Ramsay [WE NEED TO TALK ABOUT KEVIN (Tenemos que hablar de Kevin)] y Steve McQueen [SHAME (Deseos culpables)]. Ha fungido como diseñadora de producción en otros filmes notables, incluyendo GARDEN STATE (Tiempo de volver), de Zach Braff, y RAISING VICTOR VARGAS, de Peter Sollett.

Cuando no está trabajando en Los Ángeles o en locaciones, Becker vive en Washington Heights, en Manhattan, con su marido, el editor Michael Taylor.

PAMELA MARTIN, ACE (Editora) es una editora de cine que en el 2010 recibió una nominación al Premio de la Academia® por la cruda película biográfica de boxeo THE FIGHTER, de David O. Russell, proyecto por el que también recibió su segunda nominación al Premio Eddie de los American Cinema Editors. En el 2006, fue nominada para el galardón del ACE por su edición en otro proyecto nominado al Oscar® a Mejor Película, LITTLE MISS SUNSHINE. Esta es su tercera película con los realizadores Valerie Faris y Jonathan Dayton.

Cuando comenzó su carrera, Martin trabajó como editora de diálogos y sonido, antes de haber obtenido su primer crédito como editora, que coincidió con el propio debut en la pantalla grande de David O. Russell, la comedia SPANKING THE MONKEY, en 1994.

Su ecléctica lista de créditos incluye THE FREE STATE OF JONES (Lucha por la libertad), ALEXANDER AND THE TERRIBLE HORRIBLE NO GOOD VERY BAD DAY (Alexander y un día terrible, horrible, malo… ¡muy malo!), HITCHCOCK, RUBY SPARKS (su segunda película con Dayton/Faris), YOUTH IN REVOLT (La chica de mis sueños), WEEDS, SAVED! (¡Salvados!), HOW TO KILL YOUR NEIGHBOR'S DOG, SLUMS OF BEVERLY HILLS, THE HOUSE OF YES, THE SUBSTANCE OF FIRE, ED'S NEXT MOVE y WHAT HAPPENED WAS… (Editora asociada).

Martin se graduó de la escuela de cine de la Universidad de Nueva York, donde estudió varios oficios distintos, antes de haber elegido la edición de cine como su carrera. Durante su último año en la universidad, obtuvo su primer trabajo como editora profesional para un documental de la PBS. Se hizo de todavía más experiencia cuando le presentaron a Ang Lee (y a su editor, Tim Squyres), para quien fungió como editora de diálogos en sus primeros tres largometrajes (además de haber sido asistente de edición en los primeros dos) -PUSHING HANDS, THE WEDDING BANQUET (El banquete de bodas) y EAT DRINK MAN WOMAN (Comer, beber, amar).

Sus créditos en comerciales incluyen las marcas Volkswagen, Holiday Inn y Hewlett Packard. En el 2007, también formó parte del jurado de la sección dramática del Festival de Cine de Sundance, y fungió como asesora creativa en el taller Sundance Filmmakers en el 2014 y el 2017.

MARY ZOPHRES (Diseñadora de Vestuario) fue nominada recientemente para un Premio de la Academia por LA LA LAND y diseñó HAIL, CAESAR!, que representó su treceava colaboración con los hermanos Coen, después de haber trabajado con ellos en INSIDE LLEWYN DAVIS; FARGO; THE BIG LEBOWSKI (El gran Lebowski) ; O BROTHER, WHERE ART THOU? (¿Dónde estás, hermano?) ; THE MAN WHO WASN'T THERE (El hombre que nunca estuvo) ; INTOLERABLE CRUELTY (El amor cuesta caro) ; THE LADYKILLERS ; NO COUNTRY FOR OLD MEN; BURN AFTER READING (Quémese después de leer) ; A SERIOUS MAN (Un hombre serio) ; y TRUE GRIT, por la que obtuvo su primera nominación al Oscar. Previo a ello, fue asistente de diseñadora de vestuario en THE HUDSUCKER PROXY (El apoderado de Hudsucker), de los Coen.

Ha sido diseñadora de vestuario en varias películas de Steven Spielberg, incluyendo THE TERMINAL (La terminal) ; CATCH ME IF YOU CAN (Atrápame si puedes), que le valió una nominación al Premio BAFTA a Mejor Diseño de Vestuario; e INDIANA JONES AND THE KINGDOM OF THE CRYSTAL SKULL (Indiana Jones y el reino de la calavera de cristal).

Los otros filmes de Zophres incluyen PEOPLE LIKE US; las tres primeras películas de los hermanos Farrelly: DUMB AND DUMBER (Una pareja de idiotas), KINGPIN (Locos por el juego) y THERE'S SOMETHING ABOUT MARY (Loco por Mary) ; DIGGING TO CHINA, de Timothy Hutton; ANY GIVEN SUNDAY (Un domingo cualquiera), de Oliver Stone; GHOST WORLD (Mundo fantasma), de Terry Zwigoff; MOONLIGHT MILE (La vida continúa), de Brad Silberling; VIEW FROM THE TOP, de Bruno Barreto; BEWITCHED (Hechizada), de Nora Ephron; SMOKIN' ACES (La última carta), de Joe Carnahan; y LIONS FOR LAMBS (Leones por corderos), de Robert Redford.

Obtuvo un título en historia del arte y arte de estudio de la Facultad de Vassar, antes de comenzar su carrera profesional trabajando en la industria de la moda para Norma Kamali y Esprit. Comenzó a trabajar en la industria cinematográfica como supervisora de guardarropa de extras en BORN ON THE FOURTH OF JULY (Nacido el cuatro de julio), de Oliver Stone. Zophres diseñó el vestuario para dos filmes dirigidos por Jon Favreau: IRON MAN 2 y COWBOYS AND ALIENS. Otros créditos recientes incluyen INTERSTELLAR (Interestelar) y GANGSTER SQUAD (Fuerza antigángster).

NICHOLAS BRITELL (Música de) es un compositor, pianista y productor nominado al Premio de la Academia. Su aclamada banda sonora para la película ganadora del Oscar MOONLIGHT (Luz de luna), de Barry Jenkins, fue nominada al Oscar en el 2017 a Mejor Banda Sonora y obtuvo el Premio Hollywood Music in Media a Mejor Banda Sonora Original (Película dramática), en el 2016, además de haber recibido múltiples reconocimientos, incluidos una nominación al Globo de Oro y otra al Critics' Choice, ambas en el 2016. En el 2015, Britell compuso la banda sonora para la película nominada al Oscar THE BIG SHORT (La gran apuesta), de Adam McKay. Su música también apareció de manera prominente en el filme ganador del Oscar 12 YEARS A SLAVE (12 años esclavo), de Steve McQueen, para el que compuso e hizo los arreglos musicales en cámara, incluyendo las interpretaciones de violines, las canciones espirituales, las canciones laborales y los bailes. Recientemente, compuso la banda sonora de la película FREE STATE OF JONES (Lucha por la libertad), de Gary Ross, protagonizado por Matthew McConaughey, además de TRAMPS, de Adam Leon. Sus bandas sonoras para cine venideras incluyen la música para OCEAN'S 8, de Gary Ross.

Britell compuso la banda sonora para el debut como directora de cine de Natalie Portman, A TALE OF LOVE AND DARKNESS, que fue elegida para una proyección especial en el Festival de Cine de Cannes, en el 2015. Britell también compuso la música para el filme CARIBS' LEAP, de Steve McQueen, que se escuchó como parte de la retrospectiva "Master of Light - Robby Müller" en el museo Eye film, en Ámsterdam. Britell también compuso la música para el filme GIMME THE LOOT (dirigido por Adam Leon), que ganó el Gran Premio del Jurado en el SXSW, en marzo de 2012, y formó parte de la Selección Oficial del Festival de Cine de Cannes (Una cierta mirada), en el 2012. Además, Britell compuso la música para el documental THE SEVENTH FIRE, de Jack Pettibone Riccobono, que se estrenó en el Festival Internacional de Cine de Berlín, en febrero de 2015. En diciembre de 2015, obtuvo la beca Henry Mancini de la fundación ASCAP y también ganó el Premio ASCAP/Doddle al Logro Colaborativo; y en el 2016 fue nominado al premio "Descubrimiento del Año" en la 16ª edición de los Premios World Soundtrack, en Ghent. Britell es miembro fundador del L.A. Dance Project y es miembro del concejo del ensamble Decoda, radicado en Nueva York y primer ensamble afiliado al Carnegie Hall.

Como productor, Britell produjo el cortometraje WHIPLASH, dirigido por Damien Chazelle, que obtuvo el Premio del Jurado a Mejor Ficción EE. UU. en el Festival de Cine de Sundance, en el 2013. Después del éxito inicial del corto, a la postre fungió como coproductor del largometraje nominado al Oscar WHIPLASH, que también ganó el Premio del Jurado y el Premio del Público en Sundance, en el 2014. Britell ha producido numerosos proyectos con The Amoveo Company, una compañía multimedia de producción y colectivo de artistas que cofundó con Benjamin Millepied. Entre sus proyectos, Amoveo colaboró con el director Alejandro González Iñárritu para producir su cortometraje NARAN JA; otros proyectos incluyen comisiones de balé y cine de Van Cleef & Arpels, la producción de la transmisión en directo del 30º aniversario de Canal + y sociedades de marca con los zapatos Feit y con Maiyet.

Como pianista, durante los últimos seis años se ha presentado como parte del aclamado proyecto "Portals" con el virtuoso del violín Tim Fain. Britell ha tocado frente a audiencias desde una edad muy temprana, dando su primer recital público a los 10 años en Manhattan. Estudiante de la ya fallecida Jane Carlson en la división preuniversitaria de la escuela Juilliard, se ha presentado en recintos como el Peter Jay Sharp Theater en Juilliard, el Steinway Hall, el Palace Theater, el Kaneko, el Fogg Museum of Art y la Signet Society de la Universidad de Harvard, el Festival Musical de Aspen, el National Arts Club, el Million Dollar Theatre en Los Ángeles, la Brooklyn Public Library, y el Barbican Hall, en Londres. También ha interpretado los conciertos para piano No. 12 y 14 de Mozart en el legendario Old Westbury Gardens, con una orquesta encabezada por Eric Jacobsen, reconocido conductor de The Knights.

Además, Britell fue el tecladista del ensamble de hip-hop The Witness Protection Program. The WPP, como eran conocidos, era el grupo telonero para agrupaciones de hip-hop, incluyendo Blackalicious y Jurassic 5, y se presentaba en recintos que iban desde el Paradise Theater, en Boston, hasta el clásico Arlene's Grocery, en Nueva York.

Britell se graduó con honores y Phi Beta Kappa de la Universidad de Harvard, además de haberse graduado de interpretación de piano de la división preuniversitaria de la Escuela Juilliard. En mayo de 2016, Britell fue honrado para ser el orador en la ceremonia de graduación de la división preuniversitaria la escuela Juilliard.