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Reina de Katwe: Sinopsis, elenco, ficha: Queen of Katwe

Reina de Katwe: Sinopsis, elenco, ficha: Queen of Katwe

SINOPSIS

Para Phiona Mutesi (Nalwanga), de 10 años, y su familia, la vida en el barrio pobre de Katwe en Kampala (Uganda) es una lucha constante.

Su madre, Harriet (Nyong'o), está determinada a proteger a su familia y trabaja incansablemente vendiendo verduras en el mercado para asegurarse de que sus hijos tengan comida y un hogar.

Cuando Phiona conoce a Robert Katende (Oyelowo), un jugador de fútbol que se convirtió en misionero y que enseña ajedrez a los niños locales, se siente cautivada. El ajedrez requiere de mucha concentración, pensamiento estratégico y toma de riesgos, habilidades que pueden aplicarse a la vida cotidiana, y Katende espera fortalecer a la juventud mediante el juego.

A Phiona le impresiona la inteligencia y el ingenio que el juego requiere y muestra su potencial de inmediato. Katende, que reconoce la aptitud natural de Phiona para el ajedrez y el espíritu luchador que heredó de su madre, comienza a guiarla, pero Harriet se opone a alentarla, ya que no quiere que su hija se sienta decepcionada.

A medida que Phiona comienza a tener éxito en competencias de ajedrez locales, Katende le enseña a leer y escribir para que pueda ir a la escuela. Ella sube rápidamente en las clasificaciones de los torneos, pero se separa de su familia para concentrarse en su propia vida.

Con el tiempo, su madre se da cuenta de que Phiona tiene la oportunidad de destacarse y se pone del lado de Katende para ayudarla a alcanzar su extraordinario potencial, escapar de la pobreza y salvar a su familia.

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La vida en Uganda para la pequeña de 9 años, Phiona Mutesi (Madina Nalwanga), es una lucha constante. Pasa sus días vendiendo verduras en las calles de Katwe, uno de los barrios marginales de Kampala más pobres por lo que la escuela no es una opción para ella. Su madre, Harriet (Lupita Nyong'o), una orgullosa y tenaz mujer, trabaja duro para mantener a su familia y, si bien adora y protege a sus hijos con pasión, está consumida por el duro trabajo diario y le preocupa no poder ofrecerles a sus hijos la promesa de una vida mejor.

Robert Katende (David Oyelowo) le ofrece esa promesa. Katende dirige un programa de ajedrez para niños en la improvisada iglesia Agape de Katwe, valiéndose del juego como una plataforma para involucrar y agudizar sus mentes. El ajedrez estimula el pensamiento abstracto, la innovación y la creatividad, habilidades que los prepararán para una educación formal y una vida mejor. Un día Phiona sigue a su hermano Brian (Martin Kabanza) hasta la iglesia, y allí ve a Katende enseñar los conceptos básicos del ajedrez a niños de su misma edad. Ese momento sellará su destino.

Phiona queda cautivada por el juego y rápidamente capta sus meticulosas reglas y la importancia que tiene cada movimiento calculado. Katende siente una conexión inmediata con Phiona y al reconocer su extraordinaria aptitud, comienza a entrenarla. Sin embargo, Harriet no comprende cómo un juego puede ser más importante que alimentar a su familia. Le parece que soñar es justamente lo que puede entorpecer la lucha por la supervivencia y como no quiere que Phiona se decepcione, le prohíbe regresar.

Katende sabe qué se necesita para sobrevivir, pero también sabe lo que significa tener aspiraciones. Con la ayuda de Brian, logra persuadir a Harriet de que deje sus miedos de lado y apoye el sueño de su hija de jugar al ajedrez en forma competitiva. Phiona rápidamente avanza en la clasificación de los campeonatos de ajedrez y dos años más tarde, a pesar de ser analfabeta, se convierte en la campeona juvenil de Uganda con un nuevo objetivo en la mira: el campeonato nacional. Sin embargo, debe luchar con la contradicción de su éxito y la precariedad de su vida en las calles. No caben dudas de su habilidad. La única duda ahora es si podrá encontrar la forma de vivir y conciliar ambos mundos.

Disney presenta, en asociación con ESPN Films: REINA DE KATWE , protagonizada por el nominado a los premios Globo de Oro® David Oyelowo, la ganadora de un Oscar® Lupita Nyong'o y el debut de Madina Nalwanga. Basada en una extraordinaria historia real, REINA DE KATWE es dirigida por Mira Nair a partir de un guión de William Wheeler y es producida por Lydia Dean Pilcher, p.g.a., y John B. Carls, p.g.a.; con Will Weiske y Troy Buder como productores ejecutivos.

-LA APERTURA-

A través de un artículo de Tim Crothers en la revista ESPN, John Carls (Rango, Where the Wild Things Are) se enteró del trabajo de Sports Outreach e inmediatamente vio el potencial cinematográfico que tenía. El productor se interesó especialmente en el trabajo de Robert Katende.

Katende, un entrenador de fútbol de Sports Outreach -una organización religiosa que se vale del deporte para establecer una diferencia en la vida de jóvenes en riesgo de las regiones más pobres del mundo-, era un ingeniero civil que estaba buscando trabajo para mantener a su esposa y dos hijos cuando su fe, compasión y amor por el fútbol lo llevó a Katwe. Así fue cómo desarrolló el programa de ajedrez que en los años siguientes ayudó a transformar la vida de numerosos niños. Phiona Mutesi era una de esos niños. El hecho de que fuera una historia real parecía tan increíble como la historia misma.

"Antes de conocer a Robert y comenzar a jugar al ajedrez, había perdido toda esperanza", cuenta Mutesi. "Estaba triste porque acababa de perder a mi padre y en casa no teníamos dinero para que yo fuera a la escuela, así que creí que viviría en la calle toda mi vida. Pero desde que lo conocí, he viajado a numerosos países y conocido muchísima gente maravillosa que jamás creí que llegaría a conocer, lo cual me ayudó a recuperar la esperanza. Agradezco a Dios haber conocido a Robert y haber aprendido a jugar al ajedrez, porque el ajedrez hizo posible todas estas cosas".

El increíble viaje de Phiona de las calles de Uganda a jugadora de ajedrez de categoría mundial encarna la fuerza del espíritu humano, y Disney -un estudio con una exitosa trayectoria llevando historias basadas en hechos reales a la pantalla grande- de inmediato se unió al proyecto. En primer lugar, debían encontrar al director: alguien con una fuerte estética visual a quien también le apasionara la historia.

Tendo Nagenda, el vicepresidente ejecutivo de producción del estudio, inmediatamente pensó en Mira Nair. Nair, una directora más conocida por sus exuberantes y coloridas películas que retratan una gran variedad de culturas, cuenta con una extensa lista de créditos cinematográficos entre los que se incluyen: la película nominada a los premios Oscar® Salaam Bombay!, que también obtuvo el premio Camera D' Or en el Festival de Cine de Cannes de 1988; Mississippi Masala; Monsoon Wedding, que le valió un León de Oro en el Festival de Cine de Venecia de 2001; y The Namesake.

Nair vivió en Kampala los últimos 27 años y es la fundadora de Maisha Film Lab, una escuela de cine para los habitantes de África del Este. En un viaje a Kampala para asistir a una reunión familiar, Nagenda, cuyo padre es de Uganda,le contó la historia de Phiona. La historia cautivó a la directora, quien no podía creer que esta extraordinaria jovencita viviera a pocos minutos de su casa y ella jamás hubiera oído hablar de ella.

"Era irónico", recuerda Nair. "Ya que uno de mis mantras es que, si nosotros no contamos nuestras historias, nadie más lo hará; y, sin embargo, aquí estaba esta historia local tan propia que nos llegaba de Hollywood".

La productora Lydia Dean Pilcher ha trabajado con Nair en más de 10 películas y ella también se enamoró de la historia. "Adoro a la protagonista y esta historia de iniciación en la que vemos cómo aprender a jugar al ajedrez transforma y convierte a esta jovencita en una madura e inteligente adolescente", señala.

La directora comenzó a establecer relaciones con los personajes centrales de la historia para familiarizarse con la cronología de los acontecimientos y reclutó a William Wheeler (The Reluctant Fundamentalist) para que escribiera el guión. Wheeler, quien también resultó ser un gran jugador de ajedrez, se reunió con Nair y Pilcher en Kampala, donde pasó tiempo con Phiona, Harriet y Katende y muchos de los primeros alumnos de su programa de ajedrez, a quienes él afectuosamente llama los Pioneros.

"Robert me había contado que Phiona había pasado mucho tiempo sin confiar en sí misma, pero cuando la conocí, me impresionó su aplomo y madurez", cuenta Pilcher. "Tenía esta adorable calma y entereza; y luego noté que Stellah, otra Pionera, tenía esa misma cualidad, al igual que Gloria: y sin duda tiene que estar relacionado con el hecho de que todas forman parte del programa de ajedrez. Todas ellas viven en niveles de subsistencia muy básicos y, sin embargo, todas se sienten poderosas".

Al estar basado en una historia real, Wheeler abordó el guión con sumo cuidado y respeto. "No puedes crear tus propios momentos dramáticos o tu propio arco de la historia", explica. "Debes detectar los momentos críticos en los cuales los personajes toman decisiones importantes o atraviesan sus peores reveses, y desarrollar el guión en torno a ellos".

La escritura del guión resultó ser una experiencia redentora. "Esta historia me enseñó a alentar a mis hijos a valorar las cosas que pueden aprender, lo que pueden llegar a ser y lo que pueden hacer por los demás", continuó Wheeler. "Me enseñó a valorar a las personas y las cosas que tengo en mi vida".

-SELECCIONANDO A LOS JUGADORES-

Hallar actores que interpreten personajes basados en personas reales no siempre es sencillo, pero para encarnar a Robert Katende, la primera opción de la directora Mira Nair era un actor que dos años antes había electrizado al público con su retrato de una entrañable figura histórica: el papel de Martin Luther King Jr. en la película SELMA. El actor era David Oyelowo.

"David es un camaleón", apunta Nair. "Tiene la habilidad de desaparecer detrás de cualquier papel que interpreta, de modo que uno ni siquiera lo reconoce. Hay tanta seriedad en él, pero también cierta picardía, y es asombrosamente parecido a Robert Katende."

De ascendencia nigeriano-británica y formación clásica, Oyelowo estaba ansioso por trabajar con la aclamada directora. "Siempre admiré sus películas", señala. "Mississippi Masala me marcó profundamente cuando era más chico".

Tras leer el guión de REINA DE KATWE ,Oyelowo quedó muy entusiasmado y se sintió inspirado por la pasión y humildad del hombre que elige poner su talento al servicio de su comunidad. "Una de las cosas que más me sorprendieron fue lo conmovedora que es la historia y cómo estas personas rebosan de alegría a pesar de tener que enfrentar vidas tan difíciles", señala Oyelowo. "Y es esa alegría lo que les permite trascender su entorno".

Además, estaba fascinado de poder formar parte de una película que derramaría una luz positiva sobre una parte del mundo que no siempre es vista con optimismo. "Como nigeriano, me siento frustrado por lo poco que se muestra la verdadera cara de África en las películas occidentales, y por cómo siempre somos confrontados con su lado más oscuro -dictadores, genocidio, enfermedad- cuando este continente está colmado de increíbles historias de esperanza, triunfo, amor y alegría", explica. "Esta era una de esas historias, que se rodaría en África, sería interpretada por africanos y dirigida por una mujer que vivió en el continente durante casi 30 años. Sabía que estábamos en buenas manos".

El actor estaba de algún modo preocupado por cuál sería la mejor manera de retratar toda esa bondad de Katende de un modo que fuera creíble. "Estaba fascinado y aterrado al mismo tiempo", explica Oyelowo. "Hay algo radiante en su presencia que esperaba poder transmitir… sólo quería asegurarme de hacerle justicia".

"Robert no es un santo", advierte Nair, "Pero es una persona muy centrada en la moral e increíblemente generosa. No hay engaños o artilugios en su forma de pensar y siempre piensa en los demás, y David logró trasladar eso a la pantalla. David se apropió del papel con gran humor y una profunda emotividad muy conmovedora, alejándolo de cualquier tipo de benefactor o misionero y haciéndolo en cambio un personaje mucho más complejo".

El papel de Harriet fue escrito para Lupita Nyong'o, a quien Nair conoce hace años. "Veo a Harriet como una suerte de joven Madre Coraje, y esa es la fuerza y belleza que hay en Lupita", señala Nair. Oriunda de África del Este, ex alumna del Maisha Film Lab y becaria de la compañía productora de Nair: Mirabai Films en Nueva York, Nyong'o saltó a la fama por su papel merecedor de un premio Oscar® en la película 12 AŇOS DE ESCLAVITUD, al que le siguieron papeles en las películas STAR WARS: EL DESPERTAR DE LA FUERZA y EL LIBRO DE LA SELVA.

Nyong'o rompió a llorar tras leer las diez primeras páginas del guión. "Fue la primera vez en mucho tiempo que me sentí tan inspirada y desafiada por un papel", recuerda. "Inmediatamente envié un email a mis representantes diciéndoles: 'Debo hacer esta películaʼ".

"La historia se refiere mucho al poder de los sueños", continúa Nyong'o. "Robert cree que los sueños son los que dan cuenta de una vida bien vivida, mientras que para Harriet, soñar es peligroso porque te llena de expectativas que la vida quizás no pueda satisfacer. Para ella, es una lucha entre el amor y el temor: amar es temer por aquellos que amas. Pero luego se da cuenta de que su temor está reteniendo a su hija y debe aprender a dejarla ir".

Ambos formados en teatro, Nyong'o y Oyelowo comparten una fuerza y pasión similares por su oficio, y con frecuencia se los podía encontrar en el set repasando sus parlamentos entre toma y toma para perfeccionar el dialecto y la forma de hablar de sus personajes. "David es un actor tan generoso", señala Nyong'o. "Confío siempre en que me dará un pase que deberé devolverle luego. Está tan presente… nunca sabes con qué te saldrá de una toma a la otra y, para un actor, eso es algo realmente emocionante".

"Lupita vive cada escena momento a momento", agrega Oyelowo. "Hay pocos actores de los que puedo decir que, cuando estás con ellos en una escena, debes dar todo porque de lo contrario te quedas atrás, y ella es una de ellos".

El papel de Phiona Mutesi es formidable, ya que aparece en casi todas las escenas de la película. El personaje experimenta una importante transformación: en menos de cuatro años pasa de ser una niña de la calle a convertirse en campeona de ajedrez, y la actriz seleccionada iba a tener que estar a la altura de figuras de la talla de Nyong'o y Oyelowo. El proceso de selección duró más de un año, durante el cual los realizadores vieron cerca de 700 niñas del Reino Unido, Sudáfrica y África del Este, Kenia, Tanzania y Uganda. Irónicamente, el equipo de producción encontró a su Phiona a sólo 15 minutos de Katwe, en el barrio de Kibuli, semanas antes de que comenzaran a rodar.

La directora de casting Dinaz Stafford ( Mississippi Masala , The Perez Family) vio por primera vez a la joven de catorce años Madina Nalwanga en un ensayo de danza en la academia Sosolya Undugu y no pudo quitarle los ojos de encima. "Si bien era ligeramente más grande de lo que estábamos buscando, era sencillamente eléctrica", cuenta Stafford. "Le pedí que realizara una audición para el papel y la filmé en mi teléfono haciendo una escena muy simple; de inmediato sentí que tenía la confianza necesaria para interpretar el papel".

Tomó otras seis semanas de intensos talleres y entrenamiento para que Nair se convenciera de que Madina realmente podía encarnar el papel de Phiona. "Estábamos trabajando en el inglés de Uganda y el inglés no es la lengua en la que piensa Madina. Acabó por internalizar las escenas a tal punto que el idioma no importaba", apunta Nair. "Lo cual fue un gran alivio ya que desde el primer momento había querido filmarla. Su gracia física es arrebatadora y posee un espíritu maravilloso".

"La única manera de describirla es que es luminosa", continúa Nair. "Madina posee esta luz interior que la hace sencillamente brillar, y fue fenomenal desde la primera hasta la última toma. Es una extraordinaria jovencita, con gran aplomo y que enfrentó cada desafío con gracia, humildad y humor".

Al igual que Phiona, cuando Madina tenía 4 años de edad vendía maíz en las calles junto con su hermano, hasta que el dueño de la academia de baile que ofrece refugio, educación e imparte habilidades de danza y teatro a niños vulnerables y socialmente en desventaja, la rescató.

"La historia de Phiona se parece a la mía", refiere Madina. "Ambas provenimos del mismo contexto, sólo que a ella lo que le cambió la vida fue jugar al ajedrez, mientras que a mí me salvaron el canto y el baile".

"Vi a Madina hacer cosas que nadie puede enseñarte: su sinceridad, sutileza, confianza", declara Oyelowo. "Honestamente, no sé de dónde las saca. No vive lejos de los barrios pobres de Katwe donde Phiona se crió y aquí está: la protagonista de una colosal película de estudio. Y lo lleva con tanta gracia, tanta humildad y tanta habilidad. Tenerla cerca es para mí una enorme alegría".

Nyong'o agrega: "Ver a Madina crecer día a día y de una escena a otra fue fascinante. Posee un instinto para esta cosa llamada actuación. Mira jamás necesita decirle las cosas dos veces. En la toma siguiente, ya habrá ahondado en su comprensión de la dinámica de la escena, de lo que está teniendo lugar en ese momento y te ofrecerá otra cosa".

"Para ser actriz, debes ser muy disciplinada", señala Nalwanga, "Debes ser muy respetuosa de los demás. Hice tantos amigos durante el rodaje, y ahora los siento como parte de mi familia. Me llevaré la risa de cada uno de ellos en mi corazón y jamás voy a olvidar esta experiencia".

Los ugandeses Taryn "Kay" Kyaze y Martin Kabanza dan vida a los hermanos de Phiona: su hermana mayor, Night, y el pequeño Brian, respectivamente. Brian, quien también fue alumno de Katende, ahora enseña ajedrez en Kampala y estudia Ingeniería Eléctrica. Nair descubrió al joven de 14 años jugando al fútbol en la calle de su hogar en Buziga y quedó impresionada por cómo lograba defenderse y encarnar su papel de un modo tan genuino sin ser excesivamente adorable.

"Nunca antes había actuado", cuenta Kabanza, "Pero aprendí muchas cosas en los talleres de actuación: como a concentrarme y mantenerme enfocado en el personaje. También aprendimos a jugar al ajedrez y tuve la oportunidad de viajar por primera vez en avión".

Night es el relato admonitorio de la historia. Si bien posee una belleza increíble, debe arreglárselas con las cartas que le han repartido en la vida y, al igual que muchas jóvenes de su edad, siente que la única manera de salir de los suburbios es llamar la atención de un hombre mayor y adinerado. Su historia es la que refuerza la determinación de Phiona por superarse en el ajedrez y escapar por sus propios medios.

Kyaze tuvo la oportunidad de pasar tiempo con Night, lo cual, por momentos llegó a ser estremecedor. "Ha debido pasar por tantas cosas", señala Kyaze, "Hubo varias veces en que debía morderme el labio para no llorar. Estas niñas no tienen dinero para ir a la escuela, sin embargo, buscan desesperadamente una salida. No veo a Night como una rebelde, sino más bien como una persona que ha perdido el Norte. Necesita que alguien la guíe. Ella se cree que conoce el mundo real, pero en realidad no tiene ni idea".

Como ya lo ha hecho en películas anteriores, Nair sabe cómo guiar a jóvenes talentos y obtener interpretaciones conmovedoras y auténticas. "Mira es sencillamente maravillosa con los actores jóvenes", declara el productor John Carls. "Siente un genuino amor por ellos y ellos, a su vez, se sienten seguros con ella".

Los Pioneros fue el primer grupo de niños a los que Katende enseñó ajedrez, quienes jugaban en la tierra con tapitas de botellas. Los realizadores querían seleccionar a niños locales cuyas vidas se asemejaran a la de los Pioneros: niños que pudieran encarnar la esencia de un personaje, pero que también se sintieran seguros como para dejar aflorar parte de sus personalidades.

En dos semanas habían hallado a los niños que darían vida a los Pioneros y que participarían de talleres de actuación para formar un grupo unido que reflejara el estrecho vínculo que mantenían sus miembros originales. El grupo estaba conformado por una mezcla de niños de clase media y niños de barrios marginales.

Los realizadores eran conscientes de la enorme responsabilidad que suponía trabajar con niños pequeños, en especial al provenir de contextos desfavorecidos, de manera que les asignaron tutores, talleres y ejercicios de formación para brindarles habilidades que también pudieran aplicar en sus vidas una vez finalizado el rodaje.

Nikita Waligwa fue seleccionada en un casting abierto para dar vida a Gloria, la más pequeña de las alumnas de ajedrez de Katende, quien le enseña a Phiona los principios básicos del juego. Ethan Nazario Lubega da vida a Benjamin, el primer chico que pierde contra Phiona. "Me enamoré de este pequeño terremoto", recuerda Nair. "Era inteligente e ingenioso y podía ser un niño un poco difícil, pero era realmente inolvidable".


-ACERCA DEL RODAJE-

La fotografía principal de REINA DE KATWE se realizó entre abril y junio de 2015 en la ciudad y alrededores de Katwe y Kibuli en Kampala, Uganda, así como también en la ciudad de Johanesburgo, Sudáfrica, y en ambos países empleó equipos de producción y extras locales.

El equipo creativo que ayudó a dar vida a la historia incluía: al director de fotografía Sean Bobbitt, B.S.C., (12 AÑOS DE ESCLAVITUD, Hunger); la diseñadora de producción Stephanie Carroll (The Namesake, Monsoon Wedding); el editor nominado a los premios Oscar® Barry Alexander Brown (Salaam Bombay!, Inside Man, Malcolm X); el compositor Alex Heffes (El último rey de Escocia, Los secretos del poder); y el diseñador de vestuario Mobolaji Dawodu (Mother of George, Restless City).

Kampala, la capital de Uganda, está ubicada en el margen oriental del Lago Victoria, el lago más grande de África, y posee una población de casi dos millones de personas, que la está convirtiendo en una de las ciudades de más rápido crecimiento de África. Katwe está ubicado varios kilómetros al Sur del centro comercial de Kampala, y tanto éste como sus alrededores son las zonas de mayor densidad de población de la ciudad. Sin embargo, para quienes viven allí, el centro de Kampala parece quedar al otro lado del mundo.

La esencia de la vida en Uganda era tan vital para Mira Nair como la de los personajes que la habitan. A fin de poder capturar tanto la esencia de Katwe como la de la intimidad de la familia de Phiona, la directora deseaba un director de fotografía que estuviera familiarizado con África pero que también pudiera traer su propia perspectiva a la pantalla. "Necesitábamos a alguien que pudiera capturar con frescura esa vida así como también crear un marco extraordinariamente clásico", señala Nair.

A la directora siempre le fascinó la ferocidad y pasión del trabajo de Sean Bobbitt, y decidió convocarlo para rodar REINA DE KATWE . Nair señala: "Logra esta increíble poesía con su trabajo con cámara en mano que nos sumerge en el corazón mismo de las escenas que estamos rodando".

"Katwe es el corazón visual de la película", explica Bobbitt. "Como camarógrafo de noticias y documentales, he estado frente a la más sombría pobreza de los barrios marginales de numerosos sitios del mundo, pero Katwe es diferente. Hay una vitalidad allí, una densidad de color y una paleta única. El contraste de la tierra roja con los amarillos y azules que usan para pintar las casas, la densidad de población, los vívidos colores de la ropa, el movimiento constante. Donde apuntáramos la cámara, había algo de belleza".

Bobbitt rodó la película con las lentes de mayor angular posible para crear imágenes imponentes, una tarea que demostró ser un verdadero reto; pero logró el resultado deseado.

En los barrios pobres de Katwe y Kibuli, los límites entre la película y la realidad de la vida en las calles se desdibujan. Con frecuencia no está claro dónde empieza y termina el set ya que se funde de un modo impecable con las calles que lo rodean. En todo momento la intención de Nair era dotar a la película de una absoluta autenticidad.

"Yo provengo de la tradición del cinéma vérité y el documental y siempre mantuve que la autenticidad es mi mayor tesoro", explica. "Desarrollamos orgánicamente el guión a partir de los personajes y las personas de la vida real; y de manera similar, estas locaciones se entretejieron con el concepto global de la película".

Desde diminutos salones de belleza y talleres de reparación de automóviles hasta puestos de fruta y tiendas de ropa, Katwe posee su propio centro comercial. Es una verdadera colmena de actividad y espíritu emprendedor: la vida se vive en las calles, y es muy colorida. "Esta historia me dio la posibilidad de traer a la pantalla lo que más adoro de vivir en Uganda", cuenta Nair. "Me permitió capturar visualmente la dignidad de nuestra gente, su estilo vibrante y original, sus calles rebosantes de vida. Ya es hora de que veamos una versión sincera del lugar donde vivimos".

El equipo de producción rodó las escenas donde Robert Katende les enseña a Phiona y a los Pioneros a jugar al ajedrez en la verdadera iglesia Agape de Katwe. La iglesia es una estructura de un solo piso, construida con desgastados tablones azules montados descuidadamente, y un techo de chapa oxidada. Los rayos del sol se cuelan entre las grietas de los tablones de madera lo que crea una calma y una atmósfera singular en su interior; los cineastas sabían que no habría forma de recrear esa sensación.

"Es una destartalada iglesia vieja, pero hay tanto amor allí dentro", señala David Oyelowo. "Puedes sentir que la vivencia trasciende la actuación, y eso es algo que siempre aspiras lograr cuando eres actor".

La escena favorita de la productora Lydia Dean Pilcher tiene lugar en la iglesia. "Se trata de la escena en la que Phiona se acerca por primera vez a la iglesia y espía en su interior a través de las grietas de la pared y descubre estos objetos mágicos que reposan sobre un tablero y queda completamente fascinada", explica. "Es un momento en el que algo se apodera de su imaginación. Todos necesitamos de nuestra imaginación para desarrollar nuestro potencial y convertirnos en quienes podemos llegar a ser verdaderamente. Y ese momento de conexión con esas hermosas piezas de ajedrez revelan la capacidad de Phiona para imaginarlo".

Nair convocó a la diseñadora de producción Stephanie Carroll para crear el aspecto de la película. "Posee una sensibilidad impecable y una maravillosa comprensión de ciertos lugares del mundo como India y África del Este", señala Nair. "Posee esa rara habilidad de tomar algo real y lograr realzarlo con color y detalles".

Carroll jamás había estado en Uganda y no tuvo demasiado tiempo para prepararse para la película, pero desde el momento en el que se sumó al proyecto, quedó cautivada por la vibrante cultura. "Estaba deslumbrada con los colores y texturas que había por todas partes", explica. "Uganda posee un aspecto y un estilo único, lo cual fue emocionante conocer, y no veía la hora de poner manos la obra".

La belleza natural de la vida en las calles de Uganda también fue una enorme fuente de inspiración para el diseñador de vestuario Mobolaji Dawodu, un influyente diseñador cuya experiencia en castings en las calles y dirección de arte dotó a REINA DE KATWE de un estilo auténtico y moderno.

"Dawodu volcó su ingenio y dedicación para asegurarse de que África fuera hermosamente capturada", señala Nair. "Al igual que muchos de nosotros, se sintió inspirado por el estilo de Uganda ya que hay una gran libertad en su forma de vestir. El diseñador de vestuario recorrió las calles y mercados de Kampala para empaparse de la moda local, y combinó colores y estilos disonantes que ayudaron a revelar el espíritu ugandés.

Además, quería ayudar a echar por tierra esa idea errónea tan generalizada que se tiene de que la gente de África que vive en barrios marginales es sucia y desaliñada; cuando, de hecho, ocurre todo lo contrario. "A pesar de la situación en la que se encuentran, las personas que viven en barrios de bajos recursos siempre están presentables, elegantes, limpias y llevan prendas de mucho colorido" señala. "Es algo tan hermoso cuando ves que gente con recursos tan limitados puede ser tan creativa en su forma de vestir".

En su papel de Harriet, Lupita Nyong'o se apodera de cada uno de los diferentes lugares donde reside su familia en la película; ya sea una iglesia construida parcialmente o una choza destrozada, ella domina el espacio.

"Su hogar está donde está su familia", señala Nyong'o. "Eso es lo que significa el hogar para Harriet. No importa qué cosas los rodeen, lo más importante para ella es tener a toda su familia reunida. Aunque deba luchar por mantener a su familia unida, o esté en un lugar repleto de goteras en el techo, ella se las arregla para lograr sacar lo mejor de eso".

"Eso es lo que es tan poderoso en esta película", continúa Nyong'o. "No rehuimos de la pobreza, y eso nos permite ver la resiliencia de estas personas que luchan a diario en sus vidas, y lo ricas y vibrantes que son sus vidas a pesar de ello".

La película presenta una vanguardista banda sonora afrobeat curada por el rapero ugandés Young Cardamom (alias Zohran Kwame Mamdani), el co-supervisor de música, quien se inspiró en las calles de Katwe para sumergir al público en el sonido moderno de la Kampala actual. Las 30 canciones de la película incluyen desde las inolvidables melodías de la estrella ugandesa de pop A Pass, hasta las exitosas canciones del grupo nigeriano MC Galaxy y el clásico sonido de la big band del grupo ugandés Afrigo Band.

Estas canciones sirven como complemento original a la animada banda sonora de Alex Heffes, que se vale de instrumentos tradicionales de Uganda para crear un imponente sonido orquestal. La banda sonora, disponible en Walt Disney Records, también incluye el tema "Back to Life", el nuevo sencillo de Alicia Keys compuesto por Keys, Carlo Montagnese y Billy Walsh y producido por Illangelo y Keys.

- EL PODER DEL AJEDREZ -

En el competitivo y vertiginoso mundo en el que vivimos, la gente tiende a creer que nada puede generar más confianza en uno mismo que el éxito, pero la productora Lydia Dean Pilcher disiente. "No se trata de ganar o perder, se trata de honrarse a sí mismo lo suficiente como para venir a la mesa y jugar la partida, arriesgarse y aceptar el fracaso. Eso es lo que construye la resiliencia y el éxito".

Para David Oyelowo: "El objetivo de Robert Katende es brindar a estos niños un sentido de respeto propio, conciencia de sí mismos y el convencimiento de que si se esfuerzan pueden cambiar su suerte y usar las lecciones de vida que aprenden del ajedrez para cambiar su destino. El ajedrez es sólo el conducto".

Un maestro excepcional y modesto, figura paterna y mentor de un grupo de niños de los barrios más vulnerables de Kampala, Katende, inspira a estos niños a creer en sí mismos a través de la simplicidad de un juego. Katende, un refugiado de la guerra civil de Uganda, debió sobrevivir a una dura infancia, pero se convirtió en un excelente alumno y destacado atleta, y logró una beca académica para estudiar en la universidad donde se graduó en Ingeniería Civil.

Katende fundó la SOM Chess Academy en 2004 y desde entonces, ha transformado la vida de miles de personas. La Academia se convirtió en su pasión y profesión a tiempo completo, y su primer grupo de alumnos de ajedrez, los Pioneros, se abrieron camino en los campeonatos de toda África. En la actualidad, la Academia posee distintos centros en todo Uganda, incluidos cinco centros en distintos barrios marginales de Kampala, siete en Gulu y uno en la comunidad de Jinja. Además de proporcionar un entorno donde los niños aprenden a jugar al ajedrez, la Academia inscribe a los jóvenes en un programa de formación profesional para ayudarlos a volverse autosuficientes y facultarlos para poder trabajar y alcanzar sus objetivos de vida.

"Creo que el ajedrez es una de las herramientas más efectivas para empoderar y transmitir principios de vida", declara Katende. "Siempre les digo a mis alumnos que el ajedrez es como la vida, porque todas las cosas que uno atraviesa en la vida, las puedes encontrar en un tablero. Y esa conectividad, que yo a veces llamo 'integración' es muy importante. Por ejemplo, en la vida enfrentamos numerosos desafíos. Y a veces estos nos toman por sorpresa, con lo cual uno debe planear otra cosa. ¿Te das por vencido, o planeas una nueva estrategia para ver cómo puedes sortear mejor el problema?

Dos años después de que Phiona Mutesi descubriera el programa de ajedrez de Robert Katende, se convirtió en la campeona juvenil de Uganda. Tres años más tarde, era la campeona nacional. Luego en 2012, a los 16 años, participó en su segunda olimpíada donde obtuvo el título de Candidata Maestra Femenina, el primer paso hacia Gran Maestro, que es su máxima aspiración.

Es una trayectoria impresionante, pero para Katende no se trataba sólo del ajedrez, sino de jugar el juego de la vida y lograr desarrollar su potencial, sean cuales sean los obstáculos que se presenten.

"En la vida, hay momentos de depresión", señala Katende. "Hay momentos de sacrificio. Hay momentos en los que uno siente que dispone de menos recursos, como cuando en el ajedrez te capturan la mayoría de las piezas. Debes darte cuenta de que esas piezas ya no son de utilidad y centrarte en cambio en las que sí tienes y hacer que eso funcione".

"Nuestra vida de todos los días es como el ajedrez porque debes planear cada movimiento, y tener claro qué esperas lograr", agrega Phiona Mutesi. "Al igual que día a día debo pensar cómo lograré obtener dinero para comprar comida, cuando juego al ajedrez debo imaginar cómo voy a obtener ese rey y ganar. Debes organizarlo todo en tu mente".

En 2016, Phiona se graduó de la escuela secundaria St. Mbuga Vocational, donde fue presidenta estudiantil. Actualmente, se encuentra aplicando para la universidad.

Durante toda la fotografía principal, Katende estuvo presente en el set, donde se desempeñó tanto como asesor técnico como entrenador de los actores que interpretaban a sus primeros alumnos de ajedrez. Si bien no tenían que ser buenos jugadores, los actores necesitaban comprender por qué hacían determinadas jugadas o por qué un movimiento podía hacer ganar o perder la partida.

Oyelowo reconoce lo afortunado que fue de poder contar con Katende en el set todos los días. Ya fuera atosigándolo a preguntas, estudiando sus movimientos o escuchando su forma de hablar, el actor hizo todo lo posible por intentar honrar a Katende con su interpretación. "Por lo general cuando trabajas con una historia real, el único acceso que tienes a esa persona es a través de libros o material fílmico", señala Oyelowo, "Pero en esta película, toda la investigación que necesitaba llevar a cabo, la tenía al alcance de mi mano".

Para los realizadores era importante mostrar íntegramente los campeonatos de ajedrez, lo que desde una perspectiva cinematográfica supuso un maravilloso reto visual. Visualmente, no querían volver sobre terreno familiar entre un juego y otro. El reto entonces se centró en cómo transmitir las emociones que experimenta Phiona en cada partida.

"El ajedrez es un juego inherentemente cerebral y estático, que no necesariamente se traduce bien en el cine", apunta el director de fotografía Sean Bobbitt. "En la película, recreamos las partidas de ajedrez reales, con todas las jugadas verdaderas; pero, al mismo tiempo, trascendemos el mero elemento físico del movimiento de las piezas y nos adentramos en la mente de las personas que están jugando… el drama en sus miradas o en su postura".

Un ejemplo perfecto de ello, es la escena del comienzo de la película cuando Phiona está jugando contra la campeona femenina de Uganda en el Campeonato de ajedrez Rwabushenyi de 2010. Intimidada, Phiona comete un error que podría ser fatal, y su entrenador Katende, al darse cuenta de que ha perdido la concentración debido al temor, le grita: "Tú perteneces aquí".

La cámara se centra en su rostro para captar su obvia angustia; es un momento que resume eficazmente el viaje de Phiona. Una profunda verdad universal para cualquiera que haya intentado triunfar y arreglárselas en un mundo ajeno al propio, nos habla de su lucha por encontrar su camino fuera de los suburbios. Por un momento, pierde el rumbo, pero recupera la compostura y cierra una de las jugadas más dinámicas del ajedrez que la hace ganar el campeonato y convertirse en la campeona más joven de la historia de Uganda. En ese momento obtiene el título de "Reina de Katwe".

"Phiona realiza una de las mejores jugadas del ajedrez", explica Carls, "Cuando el peón, la pieza menos poderosa del tablero, logra llegar al otro lado y convertirse en reina. Ese es uno de los mensajes más poderosos de la película: que no importa de dónde vienes, aun así puedes lograr las cosas más maravillosas".

Oyelowo no jugaba al ajedrez antes de la película, pero ahora lo juega con su esposa e hijos. "En el mundo de los iPads y teléfonos celulares, es increíblemente reconfortante poder mirar a la otra persona a los ojos y estar intelectualmente inmerso en el tablero y las piezas", señala Oyelowo. "Es una actividad realmente meditativa, maravillosamente intelectual, y me ha acercado a mis hijos".

- JAQUE MATE -

REINA DE KATWE es una poderosa historia humana que demuestra que el genio está, ciertamente, en todas partes… sólo necesitamos ser conscientes de ello y alimentarlo. Con el apoyo y la guía de Robert Katende y el amor e inspiración de su madre, Phiona Mutesi logra ir tras su sueño de convertirse en campeona de ajedrez bajo las circunstancias más improbables y en uno de los lugares más inesperados, llegando a salvarse a sí misma y a su familia.

La fuerza y humanidad de los personajes que perseveran contra viento y marea, sin rendirse jamás a la autocompasión, sino intentando vivir sus vidas al máximo, llenará de humildad al público, pero lo hará sentirse increíblemente inspirado. Es un sentimiento que la directora Mira Nair también comparte.

"El triunfo del espíritu humano no radica en llorar por lo que no tenemos, sino en centrarnos en lo que sí tenemos y dejar que eso nos lleve a lugares que jamás imaginamos", señala.

"Quiero que mi hija vea esta película y sienta que puede lograr cualquier cosa porque se lo merece, si se esfuerza y se aplica a ello, tal como vemos que hace Phiona", apunta David Oyelowo. "Lo que espero es que cierta jovencita de Iowa que desea ser piloto, vea esta película y se sienta inspirada a hacer eso que desea".

La nueva canción original de la multitalentosa cantante/compositora/productora, "Back to Life", suena en la película REINA DE KATWE y forma parte de su banda de sonido de Walt Disney Records, que también incluye la canción del artista nominado a un premio Golden Globe® Alex Heffes ("Mandela: Long Walk to Freedom", "The Last King of Scotland"). "Back to Life" fue compuesta por Alicia Keys, Carlo Montagnese y Billy Walsh, y fue producida por Illangelo y Keys.

" REINA DE KATWE me conmovió en todo sentido", dijo Alicia Keys. "La película muestra en una forma hermosa a Uganda, con un gran nivel de detalles-los colores, los sonidos, la gente-todo cobra vida. Pero lo más profundo es la historia de esta valiente y brillante chica, Phiona, personificación de la idea de que el camino al éxito comienza primero con una oportunidad y la confianza que tiene cada uno en sí mismo de tener una meta mayor.

La canción 'Back To Life' que escribí para esta película con la colaboración de Illangelo y Billy Walsh habla de superar esa vocecita de duda que llevamos dentro para poder electrificar al mundo. Cuando permitimos a las mujeres encontrar y expresar su poder y su potencial, el mundo se convierte en un lugar mejor. Quiero que todos vean esta película, se dejen conmover por la historia de Phiona y luego vuelvan a sus comunidades y ¡alienten a las chicas a que crezcan como una flor que atraviesa el cemento para ver la luz!".

La directora de la película, Mira Nair, nominada a un premio Oscar de la Academia® ("Salaam Bombay!", "Mississippi Masala") dice: "Hace años apoyo la voz y el compromiso apasionado de Alicia Keys hacia el mundo, así que fue emocionante contar con su arte en REINA DE KATWE , ¡que celebra la idea de que la genialidad está en todas partes!".

REINA DE KATWE fue dirigida por Nair a partir del guion de William Wheeler, y cuenta con las actuaciones del actor nominado a un premio Golden Globe® David Oyelowo, la actriz ganadora de un premio Oscar® y nominada a un premio Tony® Lupita Nyong'o y la presentación de Madina Nalwanga. La película está basada en la historia real de Phiona Mutesi, una joven de las calles de la Uganda rural que ingresa al mundo del ajedrez de la mano de Robert Katende, ex misionero y entrenador de fútbol, y se convierte en campeona internacional de ajedrez.

Alicia Keys es una cantante/compositora/productora ganadora de 15 premios GRAMMY®, además de ser una actriz consagrada y autora de un best-seller del New York Times. A su vez, es una emprendedora y una poderosa referente en el mundo del activísimo. A principios de este año Keys lanzó su aclamado single "In Common." La canción pertenece al muy esperado sexto album de estudio de Keys que saldrá más adelante este año en RCA Records. Keys se unirá al panel de jueces del programa "The Voice" de NBC en su temporada número 11, que se estrena el 19 de septiembre de 2016, junto a Miley Cyrus, Adam Levine y Blake Shelton. En Septiembre de 2014, Keys lanzó We Are Here, un movimiento para fortalecer a la comunidad global con respecto a distintos temas e iniciativas, para construir un mundo mejor en donde todos son escuchados, respetados, iguales y tratados con dignidad. Keys también es cofundadora de Keep a Child Alive (KCA) y trabaja como Embajadora Global de la organización. Kyaze, Esther Tebandeke, Peter Odeke

~ Cuando John Carls (Rango, Where the Wild Ones Are) se topó con un artículo de Tim Crothers en la revista ESPN Magazine sobre el trabajo de los programas de la organización Sports Outreach, se dio cuenta de inmediato de su enorme potencial cinematográfico. Se interesó especialmente en el trabajo de Robert Katende, un ingeniero civil cuya fe, compasión y amor por el fútbol lo llevó a Katwe, donde ayudó a moldear la vida de innumerables niños, entre ellos, Phiona Mutesi. Su ascenso en el mundo del ajedrez era una historia poderosa sobre la fuerza del espíritu humano y, al poco tiempo, Disney se había sumado al proyecto y estaba buscando un director: alguien con una estética visual fuerte que sintiera la misma pasión por el material.

Tendo Nagenda, vicepresidente ejecutivo de producción en Disney, cuyo padre es ugandés, pensó inmediatamente en Mira Nair. Nair es una directora muy conocida por sus películas exuberantes y animadas que atraviesan diferentes culturas. Entre sus proyectos, se encuentran: Salaam Bombay!, que ganó el premio Camera D'Or en el festival de cine de Cannes de 1988 y fue nominada a un Oscar® en la categoría de Mejor Película Extranjera; Mississippi Masala; Monsoon Wedding, por la que ganó un premio Golden Lion en el festival de cine de Venecia en 2001; y The Namesake.Ha vivido en Kampala los últimos 27 años y es la fundadora de Maisha Film Lab, una escuela de cine para africanos orientales.

Nagenda le presentó la historia de Phiona a Nair en Kampala, donde se encontraba para asistir a una reunión familiar. La directora quedó inmediatamente fascinada y no podía creer que, si bien esta jovencita extraordinaria vivía a solo unos minutos de su casa, nunca antes había oído su nombre. "Fue bastante irónico -dice Nair- porque uno de mis mantras es que si nosotros no contamos nuestras historias, nadie lo hará, pero esta era una historia que era muy local, pero que me llegó desde Hollywood".

La productora Lydia Dean Pilcher ha trabajado con Nair en más de 10 películas y ella también se enamoró de la historia. "Me encanta la protagonista, la historia sobre el paso a la adultez y ver a esta niña crecer hasta convertirse en una adolescente madura y sofisticada mientras aprende el ajedrez", afirma.

El guionista, William Wheeler (The Reluctant Fundamentalist), se subió rápidamente a un avión para reunirse con Nair en Kampala, donde pasó tiempo con Katende y muchos de los estudiantes originales de su programa de ajedrez, a quienes se refiere cariñosamente como sus "pioneros".

~ David Oyelowo fue la primera y única opción de Mira Nair para el papel de Robert Katende. Este actor de ascendencia nigeriana y británica con entrenamiento clásico, que interpretó a Martin Luther King, Jr. en Selma, estaba muy ansioso por trabajar con la consagrada directora. "Siempre admiré sus películas -afirma-; Mississippi Masala fue una película que ayudó en mi formación".

El actor se sintió aún más entusiasmado después de leer el guión, ya que la pasión y humildad de Katende lo inspiraron profundamente. "Robert es un hombre increíble que elige usar sus talentos para retribuir a la comunidad en la que vive -explica-, y conocerlo y trabajar con él ha sido un honor".

"David es un camaleón", cuenta Nair. "Se permite desaparecer en el papel que esté interpretando, de manera que ni siquiera lo reconoces. Es tan serio y, a la vez, tan travieso, además, es increíblemente parecido a Robert Katende".

El papel de Harriet se escribió para Lupita Nyong'o, a quien Nair conoce hace años. "Me imaginé a Harriet como una joven Madre Coraje, y esa es la fuerza y la belleza que tiene Lupita", dice Nair. Nyong'o nació en África Oriental, se graduó de Maisha Film Lab y trabajó como pasante en la compañía productora de Nair, Mirabai Films, en Nueva York. Saltó a la fama con su papel en la película 12 años de esclavitud -por la que ganó un Oscar®- y, luego, interpretó papeles en Star Wars: El despertar de la Fuerza y The Jungle Book.

La actriz rompió a llorar después de haber leído solo 10 páginas del guión. "Era la primera vez en un tiempo que me sentía tan viva, inspirada y desafiada por un papel que estaba considerando interpretar", recuerda Nyong'o. "De inmediato, les envié un correo electrónico a mis representantes y les dije: 'Tengo que actuar en esta película'".

"Esta historia tiene mucho que ver con la fuerza de los sueños", continúa. "Robert cree que los sueños son lo que puede manifestar una vida bien vivida, mientras que, para Harriet, soñar es exactamente lo que obstaculiza la supervivencia. Soñar es peligroso porque te llena de expectativas, expectativas que la vida nunca podrá cumplir. Para ella, es un tira y afloja entre el amor y el miedo: amar es temer por quienes amas. Pero, luego, se da cuenta de que es su miedo el que está frenando a su hija y tiene que aprender a soltarlo".

El papel de Phiona Mutesi es formidable. El personaje aparece casi en todas las escenas y se transforma de una niña en las calles a una exitosa campeona de ajedrez en menos de cuatro años. La actriz elegida tendría que mantenerse a la par de actores importantes como Nyong'o y Oyelowo. El proceso de casting llevó más de un año; en este tiempo, los realizadores vieron a cerca de 700 niñas del Reino Unido, Sudáfrica, África Oriental, Kenia, Tanzania, Ruanda y Uganda. Irónicamente, la producción encontró a su Phiona a solo 15 minutos de distancia en Kibuli, un área que no está lejos de Katwe, semanas antes de la fecha en que estaba programado el comienzo de la filmación.

La directora de casting Dinaz Stafford, otra colaboradora frecuente de Nair, descubrió a Madina Nalwanga, de 14 años, en un ensayo de baile y no pudo quitarle los ojos de encima. "Si bien era un poquito mayor de lo que estábamos buscando originalmente, era simplemente eléctrica", dice Stafford. "Le pedí que audicionara para el papel y la filmé en mi teléfono haciendo una escena simple, y sentí que tenía la confianza para hacerse cargo del papel".

"La historia de Phiona es como mi historia", dice Nalwanga. "Su trasfondo es como el mío, pero, para ella, fue el ajedrez lo que cambió todo, y, para mí, fueron la danza y el baile".

"La única forma de describirla es 'luminosa'", afirma Nair. "Madina tiene una luz dentro que brilla, y desde nuestra primera toma hasta la última, estuvo fenomenal. Es una jovencita extraordinaria y equilibrada que se enfrentó a cada desafío con gracia, humildad y humor".

~ REINA DE KATWE se filmó de abril a junio de 2015 en Katwe y Kibuli, en Kampala (Uganda), y cerca de estas localidades; también en Johannesburgo (Sudáfrica), con equipos locales y extras en los dos países. El equipo creativo que ayudó a dar vida en pantalla a la esencia de Katwe incluye, entre otras personas, a: Sean Bobbitt, miembro de la Sociedad Británica de Cinematógrafos (British Society of Cinematographers, BSC), (12 años de esclavitud, Hunger) como director de fotografía; Stephanie Carroll (The Namesake, Monsoon Wedding) como diseñadora de producción; Barry Alexander Brown (Salaam Bombay!, Inside Man, Malcolm X) como editor; Alex Heffes (The Last King of Scotland, State of Play) como compositor; y Mobolaji Dawodu (Mother of George, Restless City) como diseñador de vestuario.

Kampala, la capital de Uganda, es una de las ciudades de más rápido crecimiento en África, con una población de casi dos millones de personas. Katwe y sus inmediaciones son las áreas más pobladas de la ciudad. "Esta historia me dio la oportunidad de llevar a la pantalla lo que me encanta de vivir en Uganda", dice Nair. "Capturar visualmente la dignidad humana de nuestro pueblo, el estilo original y brillante, las calles que palpitan con vida… es hora de que veamos una versión honesta del lugar en que vivimos".

"Katwe es el corazón visual de la película", agrega Bobbitt. "Como camarógrafo de noticias y documentales, me he enfrentado a la pobreza apagada de los barrios pobres de todo el mundo, pero Katwe es diferente. Allí hay un brillo, una densidad de color y una paleta única. El contraste de la tierra roja con los amarillos y azules que usan para pintar los edificios, la densidad de la humanidad, los elementos brillantes de la ropa, el movimiento constante. En todos lados, había algo bello".

REINA DE KATWE presenta una innovadora banda sonora de afrobeat que se inspira en las calles de Katwe y hace que el público se sumerja en el sonido moderno y candente de la Kampala actual. Entre las 30 canciones que se presentan en la película, la música incluye desde las inolvidables melodías de la estrella del pop ugandés A Pass hasta éxitos del afrobeat nigeriano como "Sekem" y "Skelewu", y el sonido de estilo big band ugandés clásico de Afrigo. Estas canciones son un complemento distintivo para la música de Alex Heffes, que usa instrumentos tradicionales ugandeses y los incorpora perfectamente en un hermoso sonido orquestal.

~ REINA DE KATWE es una historia humana poderosa y apasionante que prueba que hay genialidad en todos lados… solo debe ser reconocida y alimentada. La película produce mucha humildad en el público y, a la vez, hace que se sienta empoderado, un sentimiento que la directora Mira Nair también comparte. "El triunfo del espíritu humano es no llorar por lo que no tenemos, sino concentrarnos en lo que sí tenemos y permitir que eso nos lleve a un lugar que nunca imaginamos posible", afirma.

Con el apoyo y la orientación de Robert Katende, y el amor y la inspiración de su madre, Phiona Mutesi puede ir más allá de sus circunstancias y, eventualmente, brindar seguridad a su familia y a sí misma.

"Tengo una hija y quiero que mire esta película y sienta que puede hacer cualquier cosa porque se lo merece, porque se esfuerza, como vemos que hace Phiona", dice David Oyelowo. Espero que alguna niña en Iowa que quiere ser piloto vea esta película y se sienta inspirada para hacer lo que quiere hacer".